jueves, 5 de abril de 2018

Esto es lo que piden los jóvenes a la sociedad colombiana

Dejar de lado el discurso polarizado y no caer en los peligros de la manipulación son algunos de los puntos expuestos en una carta escrita para hacer un llamado a la unión. 

 

Esto es lo que piden los jóvenes a la sociedad colombiana 

Cientos de jóvenes de 20 colegios públicos y privados de Bogotá se reunieron, durante 2017, en un Seminario Intercolegiado con el fin de analizar el proceso de paz en Colombia. Al final, escribieron esta carta dirigida que reproduce Semana Educación.

Ante los acontecimientos que vivimos en el país, y teniendo en cuenta el próximo debate electoral presidencial y parlamentario, como jóvenes estudiantes de secundaria en Colombia queremos transmitir un llamado a la reconciliación, a la unión, a la consolidación de un proyecto nacional conformado por todos.

A los jóvenes, para que sigamos proponiendo y moviendo este país desde los cimientos con opiniones, críticas y propuestas desde el espíritu rebelde que nos caracteriza; a los medios de comunicación, para que informen de manera objetiva y enriquezcan las opiniones de todos los colombianos; a los candidatos políticos, para que aporten nuevas ideas, para que hagan conciencia del momento histórico que fijará el curso del país en un futuro; a las alternativas políticas nacientes, para que se hagan oír, para que propongan desde diferentes puntos de vista y nutran el debate nacional; al sector educativo en todos sus niveles, para que se construya una cultura humana y de paz; a las comunidades religiosas, por el papel que desempeñan en la población colombiana y su importancia como motor social. Y, por último, a los líderes comunitarios, por lo que aportan desde sus poblaciones y las voces que intentan hacer visibles.

Por un futuro informado adecuadamente 

Notamos que los medios de comunicación se limitan a mostrar los hechos por una sola cara, al difundir, en muchas ocasiones, ideas que contribuyen a la polarización de la sociedad, sesgando la opinión de muchos colombianos e impidiendo el desarrollo de un criterio propio. Les proponemos que trabajen por ser neutrales e imparciales, que asuman con responsabilidad su rol fundamental en la construcción de ideas. Colombia necesita que aporten elementos de juicio con el fin de cumplir con su función de ser fiscales sociales, y presenten diferentes puntos de vista a la audiencia, para que sea esta la que decida y no a la que se le imponga un modo de pensar. Nosotros, como jóvenes colombianos, queremos la oportunidad de decidir, de interpretar los hechos y poder asumir una postura propia frente a ellos. 

Líderes políticos: la responsabilidad es no polarizar más 

Ustedes, líderes políticos de diferentes partidos que se han convertido en referentes para diversos sectores de la población civil llevan consigo la responsabilidad de mantener la cohesión social y actuar haciendo honor a dicho propósito.

Es su deber abrir caminos para el diálogo y el debate –con argumentos, sin ataques personales– en los que se deje de lado el discurso polarizado y se asuma la responsabilidad de fomentar la unión nacional y la participación política, sin estigmatización ni distinción étnica y social, con nuevas voces para un nuevo país. 

Educación: cambio para la reconciliación

La paz no se construye por sí sola, se crea a través de un trabajo entre las instituciones y nosotros mismos. Por esto, queremos pedir al sistema educativo colombiano que forme personas más tolerantes e incluyentes; que aprendan a respetar las diferencias y a convivir con otros a pesar de tener opiniones distintas, sin necesidad de violentarlos; que apoyen la independencia de criterio y el uso de una postura propia. Así mismo, que enseñe a las nuevas generaciones a dudar, a sensibilizarse por su país y a no caer en los peligros de la manipulación. 

Que les indique a los niños que el perdón es un gran pilar, que deben aceptarse los errores propios y de los demás, pero sin olvidar nuestra historia; a interesarse por su país y a participar en las decisiones que se tomen.

La espiritualidad y el perdón: aportes para la reconciliación

Las comunidades religiosas han promovido el desarrollo sociocultural y político, además de la creación de un sentido de identidad dentro de los colombianos. Teniendo en cuenta que ocho de cada diez colombianos se consideran creyentes, no se puede pasar por alto el papel fundamental que cumplen las comunidades religiosas en la sociedad colombiana. 

La espiritualidad –punto esencial en la religión– posee un papel reparador, el cual busca evitar los rencores y llama al perdón. Gracias a este, el dolor se analiza de forma diferente; se ve como un impulso que, guiado por la esperanza, sirve como motor para la construcción de un mejor país. 


Les hacemos un llamado para que dicha influencia sea utilizada para apoyar procesos que aporten a la construcción de la paz. Más allá de respaldar un partido político, que secunden un objetivo en favor de toda la sociedad. 

Líderes sociales: no se encuentran solos

Debemos destacar el papel que han desempeñado los líderes sociales de cada uno de los rincones del país, como voces que deben ser escuchadas para atender las necesidades de la comunidad colombiana. Pero su importancia ha sido minimizada y hasta violentada.

De 2014 a 2017, las amenazas a estas personas aumentaron significativamente. Este año, la Defensoría del Pueblo presentó una cifra de más de 136 homicidios, 33 atentados y 27 agresiones en su contra. 

A ustedes les pedimos que no se rindan, que sigan luchando. Son defensores de los derechos de trabajadores, campesinos y ciudadanos. Les agradecemos por ser capaces de alzar su voz por todos los colombianos, por arriesgarlo todo, incluso sus vidas. 

Esperamos que, aun con esta decepcionante situación, no lleguen a perder la esperanza de un cambio, ya que Colombia los necesita. 

Juventud: de la indiferencia a la acción

Jóvenes rebeldes, soñadores, esperanzados, indiferentes. Esta carta va dirigida a ustedes, a nosotros, que como pares, miembros de una nueva generación de colombianos, hemos actuando de manera pasiva ante uno de los momentos más trascendentes en nuestra historia. 

Colombia cuenta con una población juvenil llena de pasión, disposición y proactividad. Sin embargo, en gran medida, la indiferencia, la desesperanza y la impaciencia han impedido el cumplimiento de nuestros objetivos. 

Contamos con una capacidad de indignación extraordinaria, con altos niveles de empatía y emocionalidad; somos eufóricos, reaccionamos con rapidez y eficacia; buscamos que nuestras voces sean escuchadas, tenemos exigencias y peticiones. Pero junto a esta facción eufórica y apasionada convive otra indolente y desinformada que aún no logra sensibilizarse y a la que invitamos a participar.

Debemos abandonar la suposición de que el cambio es imposible y reconocer el poder transformador inherente a nosotros. La juventud es portadora de cambios, ideas, progreso e innovación. 

Debemos asumir que las transformaciones llegarán con nosotros de la misma manera en que lo hicieron los jóvenes que impulsaron el movimiento de la Séptima Papeleta. Sigamos soñando, sintiendo y trabajando por concretar nuestros proyectos e ideas para Colombia y creamos que un mejor futuro es posible.

miércoles, 4 de abril de 2018

Ser o no ser... votante?

Solo el 20 % de jóvenes creen que en el Congreso se discuten temas que son relevantes para ellos. 

No sé si quiero que voten los jóvenes. Una de las fuentes consultadas para esta columna, el viceministro del Interior, Luis Ernesto Gómez, casi me convence de que sí, de que es bueno que voten, no importa si lo hacen a conciencia o con ciertos criterios de responsabilidad o no. Pero sigo con mis dudas. Primero, aclaro que soy de las que piensan que el voto debería ser obligatorio, que no hay derecho a que el futuro del país quede en manos de la reducida opinión pública que vota y de las maquinarias de los partidos. Pero esa obligatoriedad la imagino no para desencartarse del problema de pagar una multa por no hacerlo, sino como el punto culmen de una serie de requisitos por cumplir para poder votar.

Por ejemplo, que se acredite que quien vota realmente conoce las propuestas de la persona por la que vota, la viabilidad de realizarlas, las consecuencias de llevarlas a cabo, y que es un ser políticamente activo. Con esto no me refiero a que necesariamente pertenezca a un partido, sino a que ejerza una ciudadanía comprometida con su comunidad.

Sé que hay gran cantidad de jóvenes que piensan en construir sociedad, da emoción oírlos y verlos organizarse; pero también sé que hay un montón que no saben en dónde están parados, pero que, con el arrojo propio de la juventud, creen que se las saben todas. En manos de ellos no quiero que quede el futuro de Colombia. Muchos son tan desinformados del presente, tan ignorantes del pasado y tan sin planes para el futuro que creo que es mejor que no se les ocurra pasarse por un puesto de votación; qué peligro que se dejen endulzar el oído con discursos pensados para cautivar indignados... ¡con lo fácil que es estar indignado a los 20 años! 

Sé que hay gran cantidad de jóvenes que piensan en construir sociedad, da emoción oírlos y verlos organizarse; pero también sé que hay un montón que no saben en dónde están parados. 

En el censo electoral actual hay casi 15 millones de jóvenes de entre 18 y 29 años habilitados para votar; la Registraduría lanzó este martes la campaña #YonodejoaColombiaenvisto, para invitarlos a acudir a las urnas, aunque, como dice Alejandra Barrios, de la Misión de Observación Electoral (MOE), nadie tiene ni idea de si los jóvenes son más abstencionistas que los mayores de 30, por la sencilla razón de que la Registraduría solo en las elecciones de este año empezará a calcular los datos de votación por grupos etarios. Hasta hoy, la única pista para concluir que los jóvenes no van a las urnas es que en las elecciones al Congreso del 2014, la votación en las dos últimas mesas de los centros de votación de cabeceras municipales fue del 41 %, y se entiende que en las últimas mesas es donde están registradas las cédulas más nuevas, es decir, las de los más jóvenes, como lo explica el exregistrador Carlos Ariel Sánchez.

En todo caso, las candidaturas están que no saben cómo capturar a ese público; es que es nada más y nada menos que el 41 % del censo electoral. Pero, según el análisis del Observatorio de la Democracia, que usa los datos del Latinobarómetro de 2016, solo 4 de cada 10 jóvenes participan en elecciones, solo uno de cada 10 dice que confía en los partidos políticos, y solo 20 % creen que en el Congreso se discuten temas que son relevantes para ellos. A ver qué pasa...

Entre tanto, es muy útil que, por fin, sea sancionada, justamente esta semana, la ley que reglamenta la ciudadanía juvenil, que estaba empantanada desde el 2013. Sin duda, la elección de consejos de juventud de orden nacional y local, para los que se pueden candidatizar personas desde los 14 hasta los 28 años, abrirá un camino para que la juventud se forme en el ejercicio de la democracia, y quizá permita que cuaje la propuesta de bajar a 16 años la edad para votar. Según el viceministro ‘de los Converse’, el efecto de esa decisión en Austria fue que el voto joven fue más consciente, ya que se construyó en familia, con discusión en los colegios, y les creó el hábito de no ‘dejar en visto’ a su país. Pero sigo con mis dudas...

martes, 3 de abril de 2018

La virtualidad, el presente y el futuro de la educación?

Hoy en día son más los que le apuestan a una educación virtual y continuada, pero ¿qué beneficios le trae en el mercado laboral de hoy? Un experto responde a esto. 

 
¿La virtualidad, el presente y el futuro de la educación? Foto: pixabay.com 

La educación virtual tiene fieles defensores como detractores, unos la ven como una amenaza, mientras que otros como una oportunidad. Lo cierto es que hoy está en boca de todos y representa un punto importante en el mercado laboral.

Juan Martín, director de Cerem Business School, una de las más importantes escuelas virtuales de negocios española, llegó a Colombia para generar más alianzas con el país y hoy cuentan con seis mil alumnos de los cuales 800 son colombianos, SEMANA habló con él y esto fue lo que dijo.

SEMANA: ¿Dentro del sector se percibe alguna resistencia a la educación virtual?

Juan Martín (J.M.): Siempre hay una resistencia inicial que se ha dado en muchos países, y Colombia no es una excepción. Hay que ser claros y la educación virtual tiene prejuicios, uno respecto a la validez o al prestigio de las titulaciones, parece que cursar una maestría virtualmente tiene menos valor percibido para la gente que puede hacerlo presencialmente, y además existe de alguna manera el prejuicio a la calidad, hay a quienes le parece que estudiar virtualmente es más fácil, que no tiene el mismo rigor.

SEMANA: ¿Y cómo acabar con estos prejuicios?

J.M.: Estas apreciaciones son cosa del pasado, la gente debe conocer todos los beneficios que trae: la educación virtual provoca un ahorro de tiempo, cada minuto que el alumno dedica a estudiar es un minuto aprovechado en aprender.

SEMANA: ¿Cuáles son los beneficios que trae a la hora de entrar al mercado laboral?

J.M.: Está demostrado que las empresas valoran más, en los currículos, haber estudiado virtualmente porque para esto se requiere más esfuerzo y más autodedicación, en muchas maestrías y pregrados los alumnos no se quedan con los conceptos, en la educación virtual se brinda un acompañamiento del profesor, están pendientes de todo el progreso del estudiante asegurándose de que haga lo que tiene que hacer.

SEMANA: ¿Cuáles son los obstáculos a la hora de enfrentarse a ese mercado?

J.M.: Uno de los principales problemas de la educación presencial es la gran brecha entre lo que la universidad enseña y lo que las empresas demandan. Se están creando perfiles que luego las empresas no aceptan porque no es lo que necesitan, esto se puede disminuir si los docentes estuvieran relacionados con las empresas de los sectores.

SEMANA: ¿Y qué diferencias brinda la educación virtual?

J.M.: La educación virtual de calidad no es sólo equivalente sino superior a la presencial, es más, permite que el profesorado sea de calidad. Una cosa que ocurre en Colombia es que los maestros están en clase todo el día, suelen dar clase a pregrado y por las tardes o noches dan clase a alumnos de posgrado, entonces a diferencia de la virtual, esta no tiene una articulación entre el mercado laboral.

SEMANA: Pero está claro que existen escuelas virtuales que no brindan este tipo de rigor ¿usted qué opina?

J.M.: Uno de los principales puntos negativos es que la virtualidad rompió las barreras de entrada para escuelas de negocios y universidades que no son de calidad. Hoy en día se puede montar una maestría virtual efectivamente con materiales de mala calidad y con un campus virtual, se da la clave y las personas se meten ahí y no se hace nada, esto es cierto y digamos que hay educación virtual que no es de la calidad que el alumno espera. Se encuentran con que aprenden menos de los que esperaban aprender o de lo que se aprendería en una clase presencial.

SEMANA: ¿Se puede decir que la virtualización es una herramienta que falta aprovechar más?

J.M.: La clave es que la educación virtual es una herramienta para la internacionalización, ha hecho accesible y universal la educación. 

Las universidades presenciales deberían ver la virtualización como una oportunidad de expansión y sobre todo para la expansión internacional. Colombia siempre ha sido uno de los países más abiertos, el alumno colombiano está muy interesado en salir en hacer negocios, están abiertos a las experiencias.

SEMANA: ¿Cómo ve el panorama de la virtualidad en Colombia?

J.M.: Yo creo que Colombia tiene una red bastante alta, lo que hay es resistencia de bastantes instituciones, de universidades y el Ministerio de Educación está pecando de cierto proteccionismo. Sin embargo, es un tema coyuntural y Colombia seguirá la tendencia. La virtualización es el futuro y el presente.

lunes, 2 de abril de 2018

Federer se convierte en el número 1 de más edad en la historia de la ATP

El Suizo Roger Federer regresa a la cima del tenis mundial después de cinco años. 


El suizo Roger Federer se convirtió a los 36 años y 6 meses en el número 1 mundial del tenis de más edad de la historia, este viernes en Rotterdam, al batir en cuartos de final al holandés Robin Hasse con parciales de 4-6, 6-1 y 6-1.

Federer regresa a la cima del tenis mundial más de cinco años después de la última ocasión en la que ocupó el número 1, en noviembre de 2012. 

A finales de enero amplió su récord de títulos de Grand Slam al ganar el Abierto de Australia al derrotar al croata Marin Cilic y llevar a 20 su número de grandes. Entonces quedó a un paso de la plaza de honor. 

For the first time in a long time, welcome back to the top @rogerfederer 🙌 pic.twitter.com/qjqmxwmSj5 — ATP World Tour (@ATPWorldTour) 16 de febrero de 2018

Federer, que recibió tras el partido un trofeo que consistía en un enorme número 1 con la leyenda de 'Número 1 de más edad de la historia', superará el lunes en la próxima clasificación de la ATP a su gran rival, Rafael Nadal. 

Con su victoria de este viernes Federer supera como número 1 de más edad al estadounidense Andre Agassi, que ocupó esta posición con 33 años y 131 días en 2003. La primera vez que el suizo fue número 1 mundial fue en febrero de 2004. Este viernes, 14 años después, regresa a la plaza de honor.

domingo, 1 de abril de 2018

Tecnologías a favor de la protección y la educación

Conozca alternativas digitales que pueden transformar la educación en el mundo. 


El reconocimiento facial podría remplazar el llamado a lista en las clases, pues con esta tecnología es posible saber quién asistió durante el año y graficar dinámicamente las asistencias. 

Si usted tuviera la opción de elegir, preferiría ¿llamar a lista y al escuchar su apellido o nombre diría ‘presente’ (como ha sucedido siempre) o que su profesor, a través de reconocimiento facial sepa quién asistió y quién no a la clase? Y si no tiene la opción de elegir, ¿qué pensaría de que su rostro o el de su hijo esté en un sistema que lo identifique?

Uno de los principales ejes de la transformación educativa en el mundo es el uso acertado de la tecnología, para lo cual es necesario no solo garantizar su implementación sino construir un entorno adecuado para su uso.

La educación no puede ser ajena a los avances y las trasformaciones digitales que buscan responder a las necesidades de los estudiantes. 

“Por medio de la implementación de la tecnología es posible formar personas que trabajan en los cambios que requiere su propio país, ya que es capaz de adaptarse a las exigencias de cada sector”, asegura Misael Gómez, director en Colombia de Ellucian, empresa de tecnología para la educación. “Eso quiere decir que las condiciones en las que crece un niño en América Latina no son iguales a las de uno en Europa, por lo que el impacto con la tecnología es diferente, y su implementación también debe serlo”, agregó. Reconocimiento facial

Una de las iniciativas que pretenden transformar el entorno educativo de un niño es la implementación de una cámara con reconocimiento facial en el salón de clases. La alternativa le permitiría al docente controlar la asistencia de los alumnos 

Las opciones en el mercado, por lo menos en Colombia, no son muy altas, pero Gómez sugiere que en el momento de implementar cualquier tecnología, “es necesario que haya un previo acuerdo entre padres, directivas y estudiantes, ya que son decisiones que no se toman a la ligera. Puesto que no todas las personas están de acuerdo con que su rostro o el de sus hijos habite en un sistema que lo identifique”. Seguridad parental

Probablemente uno de los aspectos más importantes para los padres en la elección de un colegio para sus hijos es la seguridad, pero no es suficiente con que las instalaciones físicas cumplan con este requisito. 

Es necesario tomar medidas de seguridad que garanticen que los dispositivos también lo están, ya que premeditar la situación puede disminuir los riesgos que habitan en internet. 

Por esto existen alternativas que se pueden usar en casa o en instituciones; por ejemplo, la aplicación Eset Parental Control, que permite examinar el contenido que el menor visita. Además, permite bloquear el contenido inapropiado que puede aparecer en el celular, tableta o computador del menor.

Carreras universitarias

Los estudiantes de carreras universitarias pueden encontrar en la tecnología un espacio ávido de información y accesibilidad. Lo mismo sucede con la educación a distancia. Market Research Future calcula que el mercado global de educación en línea totalmente virtual va a aumentar un 24 por ciento al año entre 2017 y 2023. 

Colombia no está atrás en esta cifra, ya que la oferta de cursos 100 % en línea o que combinan la modalidad presencial con la interacción vía web aumenta cada año. Así, “la educación a distancia ha logrado revolucionar la forma de aprender y ha transportado el conocimiento de un aula a lugares como una casa, una oficina, hoteles y municipio alejados, logrando así llegar a cada más personas en el mundo”, afirmó Gómez. ¿Y las instituciones?

Los datos de 2016 del Centro Nacional para Estadísticas Educativas, en Estados Unidos, muestran que uno de cada cinco estudiantes reportan haber sufrido bullying. Otro estudio, de 2010, muestra que solo el 36 por ciento de los niños que fueron víctimas de este abuso llegaron a reportarlo. Aquí es donde regresamos a la posibilidad de instalar cámaras con el propósito de que la institución mantenga el control de lo que suceda entre los menores. 

De otro lado, la misma cámara que hace ‘llamado a lista’ permitiría grabar clases y por medio de inteligencia artificial, sería capaz de medir, por medio de gráficos, el interés de los alumnos por determinada clase o profesor. Realidad aumentada

Si se trata de sorprender a los estudiantes, sobre todo a los más pequeños, basta con implementar la realidad, un campo cada vez más explorado por compañías como Google, la cual lanza aplicaciones para sistema Android para explorara esta alternativa. 

Las posibilidades son diversas, según el propósito de los padres o la educación; con todo, lo ideal es que la tecnología sea parte de las clases, de la vida y de la seguridad de los menores.

sábado, 31 de marzo de 2018

Los millennials le ceden su espacio a los senior en las redes sociales

Un estudio sobre tendencias de consumo reveló que los llamados “senior” se están tomando las redes sociales como Facebook y Twitter, mientras que los millennials se pasan a las redes de contenidos “líquidos”. 


El más reciente estudio sobre tendencias de consumo de Llorente y Cuenca reveló que los millennials dejaron de dominar las redes sociales durante el 2017, una tendencia que también está obligando a las grandes marcas a modificar sus estrategias de publicidad.

En el lugar de los millenials, la generación senior es la que ahora se está tomando plataformas como Facebook, que utilizan principalmente para mantener contacto con viejos conocidos, y Twitter, donde buscan mayor visibilidad y se convierten en líderes de opinión.

De acuerdo con un informe reciente de Telefónica España, mientras el uso de la red en las personas de entre 65 y 74 creció 11% durante el último año, en el resto de la población lo hizo en 3%.

El fenómeno ha hecho también que el consumo de dispositivos móviles incremente de manera acelerada, solo en 2017 las compras de estas herramientas se duplicó, mientras que la interacción digital presentó un crecimiento en la mensajería instantánea de 182,5% durante el 2016.

Según el mismo estudio de Llorente y Cuenca, además el uso de adultos mayores de 65 años en las redes sociales pasó de 15% a 23% en el mismo año, un ritmo de crecimiento que hasta el momento sólo se había registrado en la generación millennial.

Por su parte, dicho grupo está migrando a otras aplicaciones o redes sociales como Instagram, Snapchat y las “stories” del mismo Facebook. La razón es que los jóvenes entre 12 años y 24 años prefieren aplicaciones con información más volátil, que desaparezca unos segundos después de ser enviados o visualizados.

En este segmento, además el 56% de los jóvenes entre los 13 años y 20 años utilizan “nicknames” neutros, que no los clasifiquen dentro del género femenino o masculino y que en muchas ocasiones ni siquiera se relacionan con sus nombres reales.

Por otro lado, el estudio reveló que el blockchain ya empieza a perfilarse como la herramienta que eliminará los intermediarios en las compras digitales. “Con sistemas de blockchain avanzados que posean buena usabilidad, el consumidor medio no necesitaría un banco para prestar o enviar dinero a cualquier persona, haría transacciones peer to peer instantáneas, seguras, y baratas”, señaló el estudio.  

Además de la eliminación de los intermediarios en las transacciones, las marcas en el mundo tienen varios retos adicionales. Uno de ellos, al cual ya se están enfrentado con innovación en sus presentaciones y publicidad, es la transparencia de la marca.

De acuerdo con el estudio, los millennials cada vez son más exigentes en cuanto a la adecuada comunicación de las empresas y marcas que fabrican sus productos preferidos. Cada día les piden a estos que sean más claros sobre el contenido o composición de los mismos, el efecto que tienen sobre el medio ambiente, su responsabilidad social e incluso el tratamiento que les dan a sus empleados.

Por esta razón, las marcas incluso se están adelantando a la regulación existente sobre, por ejemplo, las etiquetas en los empaques de los alimentos o la ropa que utilizan. Además, se asocian em mecanismos de cobranding para lograr una comunicación directa con sus potenciales consumidores.

Sin embargo, en Colombia las grandes empresas de alimentos señalaron que los consumidores todavía toman sus decisiones con base en el precio del producto ya que el mercado aún es demasiado irregular en este aspecto.

Un caso diferente es el de las empresas de servicios, que ya empezaron a notar el cambio de tendencias de sus consumidores y reportaron que muchos de ellos ya son más exigentes en cuanto a la experiencia que les ofrecen, por encima del precio del servicio.

viernes, 30 de marzo de 2018

Así es el 'Método Singapur' que usan los mejores estudiantes del mundo

Tiene adeptos y detractores. Utiliza objetos, fotografías y símbolos para resolver los problemas. 


Los padres pueden incentivar "conversaciones matemáticas en casa".

Los mejores estudiantes de matemáticas del mundo están en Singapur, o eso dice la prueba PISA.

No es raro entonces que el llamado "Método Singapur" (también conocido como "Mastery Approach", "Enfoque de Maestría") para la enseñanza de las matemáticas se haya expandido alrededor del mundo.

Tanto es así que Jeff Bezos, el hombre más rico del mundo y dueño de Amazon, decidió junto a su esposa que sus hijos aprendieran el modelo utilizado por los niños singapurenses.

"Hemos intentado todo tipo de cosas, como lecciones de mandarín o el programa de Singapur", le dijo MacKenzie Bezos a la revista Vogue.


El enfoque se utiliza en varios países.

El método ha sido destacado y al mismo tiempo duramente criticado por expertos en educación.

Algunos maestros han optado por usar algunos elementos del enfoque singapurense y mezclarlos con las tendencias occidentales que incluyen una visión más "libre y creativa".

En Estados Unidos, el Método Singapur ha sido una tendencia creciente y quienes lo promueven aseguran obtener excelentes resultados.

"Los planes de estudio para la enseñanza de matemáticas a nivel primario en varios países alrededor del mundo lo usan como modelo", le dijo a BBC Mundo Kevin Mahoney, profesor estadounidense que utiliza este enfoque en sus clases y trabaja en la formación de otros docentes.

¿Y por qué nos niños de Singapur tienen tan buenos resultados en la pruebas sobre habilidades matemáticas?

"Es una combinación entre el currículum, la pedagogía y la cultura", agrega Mahoney.Las claves del método

Desarrollado en la década de los 80, los profesores trabajan en equipos utilizando objetos y materiales concretos para en enseñar matemáticas.

La idea es centrarse en la resolución de problemas, entender el razonamiento lógico que hay detrás, más que la memorización del procedimiento para llegar a un resultado.


El foco es que el proceso de aprendizaje es más importante que el resultado.

Los alumnos aprenden a través del enfoque CPA: concreto, pictórico y abstracto.

Se habla de "maestría" en el sentido de buscar la resolución de problemas sin enfocarse en la idea de "aprender para un examen".

Las clases usan objetos, fotografías y símbolos para modelar problemas utilizando bloques de colores para representar todo tipo de ideas, como fracciones, por ejemplo.

Es común la incorporación de dibujos y diagramas y por eso se dice que es un enfoque muy visual y en algunas ocasiones también auditivo.

Yeap Ban Har, matemático considerado uno de los referentes mundiales de este modelo, ha dicho que los objetos le permiten a los niños explorar diferentes ideas cuando están aprendiendo un concepto.

"Más que aprender operaciones, el modelo apunta a 'pensar como un matemático'", escribió Andreas Schleicher, director de educación de la OCDE y coordinador de la prueba PISA.



Los estudiantes de Singapur lideran la prueba PISA de matemáticas en el mundo.

Se trata de enseñar menos temas con mayor profundidad. En teoría, todos los estudiantes avanzan a un ritmo similar, porque los profesores esperan a que todos los niños aprendan un concepto particular, antes de avanzar al próximo.

Estudios realizados por el Instituto de Educación UCL y la Universidad de Cambridge encontraron que con este enfoque mejora la velocidad de aprendizaje de las habilidades matemáticas.

Pero tampoco se trata de una panacea.

"No hay evidencia de que sea el mejor enfoque. Hay alguna evidencia limitada de que sería un poco más efectivo que el status quo en algunos países occidentales como Inglaterra. Pero los efectos parecen ser relativamente pequeños. Y todavía no sabemos sobre su impacto en el largo plazo", le dijo a BBC Mundo John Jerrim, investigador del Instituto de Educación de University College London (UCL).Singapur en tu propia casa

En el mundo occidental, algunos elementos de este enfoque han sido incorporados en otras metodologías de enseñanza en la escuela y también en la casa.

Por ejemplo, se le recomienda a los padres que estimulen a sus hijos a conversar sobre cómo llegaron a un resultado, a comentar el proceso, los errores, los aciertos y las ideas que al niño se le ocurrieron en el camino.

La idea es que lo verbalicen usando frases completas, haciendo dibujos o construyendo modelos con cualquier material doméstico. Y el papel de los padres es que reconozcan el esfuerzo que los niños pusieron en tratar de llegar a la solución, más que en decir la respuesta correcta.

Otra forma sencilla de aplicar el Modelo Singapur es transformar las cosas de la vida diaria en conversaciones matemáticas. Por ejemplo, ¿cuántos autos estacionados quedarán en la calle si los vecinos se van o si guardamos estos juguetes en una caja?

Entre las sugerencias del enfoque, también está la práctica de mirar un mismo objeto desde distintos puntos de vista o llegar al mismo destino usando diferentes caminos."La clase igualitaria"

En Asia, particularmente en China, se utiliza el método Maestría de Shangái, que tiene algunos puntos en común con el Método Singapur.

Las clases giran en torno a un concepto matemático específico antes de avanzar hacia ideas más complejas siguiendo una progresión lineal.

Los niños no son agrupados según sus habilidades intelectuales. Todos los chicos estudian al mismo tiempo el principio básico que deben aprender en la clase y ninguno da el siguiente paso hasta que todos sus compañeros lo hayan aprendido.


El método utiliza objetos, fotografías y símbolos.

En cambio, en otros países las clases son consideradas buenas cuando incluyen una gran cantidad de contenidos o cuando los alumnos aventajados avanzan a un ritmo mucho más rápido que el resto para aprovechar su potencial.

Los críticos dicen que esta idea asiática de una clase más igualitaria desincentiva a los alumnos más capaces.

Pero la reiteración en voz alta de las respuestas, los asientos en líneas mirando hacia adelante y la falta de interacción entre los niños han hecho que muchos pedagogos critiquen el método por tradicionalista, despersonalizado y con el foco en conseguir resultados en los test de medición internacional.

La discusión es intensa, considerando que la educación actualmente está girando hacia desarrollar habilidades como el pensamiento crítico y creativo, el trabajo en equipo para resolver desafíos cotidianos y el desarrollo de habilidades sociales en ambientes más libres e interactivos.

Y el otro punto debatido es que en varios países asiáticos los padres pagan clases particulares después del colegio para que los niños tengan mejores calificaciones en los exámenes, en contraste con las prácticas en Finlandia, por ejemplo, donde hay más énfasis en el juego que en el trabajo de clase en la primera infancia.

Eso no ocurre en Singapur, pero efectivamente los padres -que tienen los recursos económicos para hacerlo- les pagan a tutores privados.

Más allá de las diferencias culturales y las políticas públicas de los distintos países, efectivamente algunos elementos del Método Singapur han traspasado las fronteras y se han ido incorporando en otros sistemas educativos, aunque no sean similares.