domingo, 17 de junio de 2018

Fobia social e ideación suicida, trastornos que atacan la niñez

Bogotá Cómo Vamos lideró un diálogo que evidenció los problemas que activan trastornos mentales. 

Trastornos que atacan a la niñezHoy en día la tecnología ha generado diversos trastornos que afectan a la juventud en distintos aspectos, así se alteran sus relaciones sociales y pueden llevar a problemas, desde el una fobia hasta una ideación suicida. 


“Mi hijo llega del colegio, tira la maleta y como desesperado comienza a buscar su tableta o se las ingenia para entrar a YouTube a ver videos. Si no se le presta el celular, arma pataletas. Tiene seis años”, “Mi hija consumió drogas en el colegio desde los ocho años. Estudia en un colegio público. Hoy, a los 13 años, ya está en rehabilitación”, “Mi niña escribe cartas en las que dice que se quiere morir, que nada en la vida le importa, que odia a la gente”, “Mi hijo no tiene amigos, no es capaz de hablar con sus compañeros”. Estos son los relatos de algunas madres de niños y jóvenes de Bogotá.

Este tipo de comportamientos develan solo algunos de los trastornos que está sufriendo la juventud capitalina. Según la Encuesta Nacional de Salud Mental 2015, que entrevistó a 16.147 personas de varias regiones del país, 5 de cada 100 niños y 7 de cada 100 adolescentes en el país sufren de algún trastorno mental. 

Los más comunes siempre han sido el de déficit de atención e hiperactividad (TDAH), la ansiedad por situaciones como la separación de los padres, la depresión o la bipolaridad, entre otros, pero últimamente preocupa que trastornos como la fobia social y la ideación suicida sean cada vez más frecuentes. 

Lo que pasa es que el mundo se está incomunicando, la gente no se habla, los niños no conversan en el recreo. Eso es grave 

“Lo que pasa es que el mundo se está incomunicando, la gente no se habla, los niños no conversan en el recreo. Eso es grave”, dijo Carlos Gómez Restrepo, decano de la facultad de Medicina de la Universidad Javeriana. Para él, la exposición de los niños con la tecnología está mostrando las primeras consecuencias. 

Él fue uno de los expertos que participó en la Unidad de Análisis sobre salud mental en la capital, organizada por el programa Bogotá Cómo Vamos, Así vamos en salud, el Instituto de Salud Púbica de la Universidad Javeriana y el grupo de Salud Pública de la Universidad de los Andes, conscientes de la necesidad de comenzar a estructurar políticas públicas más efectivas. 

En la conversación sobresalieron problemas graves a los que se están enfrentando los niños y jóvenes de la ciudad que terminan siendo un caldo de cultivo que degenera en trastornos mentales como la fobia social . “Por ejemplo, muchos menores de 12 a 17 años se están quedado desescolarizados. A las niñas las dejan en casa cuidando de sus hermanos y a los niños los ponen a trabajar. En ese tipo de situaciones es donde hay que intervenir para evitar”, dijo Restrepo. 

Otra consecuencia de ese aislamiento social es el suicidio. Aunque para Restrepo este aún no es un problema de salud pública en el país, si se compara la situación con la de otras naciones, para la Secretaría de Salud de Bogotá esta conducta sí es un motivo de preocupación local. 

Hoy esta tiene una prevalencia equivalente al 4,1 por ciento, es decir, 85.000 jóvenes entre los 18 y 28 años de edad la han experimentado, según los resultados del estudio ‘Tamiz descriptivo de eventos prioritarios en salud mental en Bogotá’ del año 2017, realizado por la Secretaría de Salud y la Organización Panamericana de la Salud, desde donde también se desprenden otros datos. 

Entre las entidades territoriales con más casos de suicidios consumados durante el 2017 están Antioquia, con el 16,4 %, seguida de Bogotá con 12,5 % y Valle del Cauca con 9,4 %. “La ideación suicida es muy común en los jóvenes de Bogotá, y lo peor es que la situación tiende a ser más frecuente en unas localidades específicas”, dijo Patricia Arce, subsecretaria de Salud Pública de Bogotá. Se refiere a Ciudad Bolívar, Bosa, Kennedy y Usme, donde también confluyen problemas como el consumo de drogas. 
Según el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses (INMLCF), para el año 2016, Bogotá presentó una tasa de 4,46 suicidios por cada 100.000 habitantes. 


El alcohol y las drogas

Arce se detuvo en su intervención para hablar de la relación que hay entre los trastornos mentales y el consumo de droga y alcohol de los jóvenes. El 9,9 % presenta uno o dos síntomas de consumo de alcohol y el 4,6 %, 3 o más síntomas. “Se presenta en mayor proporción en hombres entre los 18 y 28 años y en los estratos socioeconómicos 3 y 4”. 

También preocupa que entre niños y jóvenes se evidencie el uso de inhalantes como el pegante u otras sustancias. 

En esto también coincidió el doctor Luis Jorge Hernández del grupo de Salud Pública de la Universidad de los Andes. “En Bogotá aumentó en 30 % el consumo de drogas, y lo más grave es que este comienza en el colegio o en la universidad, incluso mucho antes de los 15 años”.

El experto fue crítico de los programas de salud de Distrito por el impacto real que estos generaron. “Las entidades no tienen capacidad de respuesta; los Centros de Atención Médica a Drogodependientes (Camad) no tuvieron una línea base. La verdad es que no se están modificando contextos. Hay actividades, pero no resultados”. 

Pero la Secretaría dice que avanza en la implementación de un modelo de atención en salud para trastornos mentales, consumo de SPA y violencias así como en proyectos de atención psicosocial en el posconflicto. “También trabajamos en una estrategia de rehabilitación basada en comunidad en salud mental en la ciudad”, dijo Arce. 

Todos los asistentes coincidieron en que los problemas de salud metal deben atenderse cerca de los hogares, donde se mueven la comunidad y que los traumas y enfermedades deben subsanarse con tratamientos continuos que garanticen resultados a largo plazo. 
Soledad, un riesgo para los adultos

Ansiedad, depresión, abuso de alcohol y conducta suicida son los cuatro principales problemas de salud mental que afectan a los bogotanos. En el primero de los casos, el 32,2 por ciento presenta 1 o 2 síntomas asociados; el 12,2 %, 3 o 4 y el 9 %, 5 o más. 
Este trastorno es más frecuente en las mujeres, en las personas de 60 a 69 años y en las personas de estratos socioeconómicos 1 y 2.

A este le sigue la depresión, otra enfermedad tan ignorada como sus pacientes. El 32,8 por ciento presenta síntomas asociados; 7 %, 4 o 6 y el 2,6 %, 7 o más. “De cada 10 citas en el país, dos son posibles trastornos mentales. Hay que mejorar la atención en todos los casos. No estamos nada bien”, dijo Carlos Gómez Restrepo, quien añadió que la soledad puede ser uno de los factores que inciden en esta situación. 

De cada 10 citas en el país, dos son posibles trastornos mentales. Hay que mejorar la atención en todos los casos. No estamos nada bien 

El abuso de alcohol sigue estando asociado por los expertos con muchos trastornos mentales. El 9,9 % presenta 1 o 2 síntomas de consumo de alcohol y el 4,6 %, 3 o más síntomas. “Se da en mayor proporción en hombres entre los 18 y 28 años y en estratos socioeconómicos 3 y 4”, dijo Patricia Arce, subsecretaria de Salud Pública. 

La experta añadió que también otras situaciones sociales que inciden para que los problemas de salud mental se incrementen. Uno de ellos es la violencia intrafamiliar. “Según los datos del estudio en el 2016 se registraron 19.930 casos, de los cuales el 64 por ciento corresponde a violencia de pareja, el 18 % a violencia contra niños y adolescentes, el 16 por ciento a violencia entre familiares y el 2 % a violencia contra el adulto mayor”.Las mujeres son las principales víctimas, en especial de la violencia de pareja, en la que de cada 10 casos, 7 ellas son las afectadas.