lunes, 28 de diciembre de 2015

Cómo establecer el grado de aptitud intelectiva del niño

Cómo establecer el grado de aptitud intelectiva del niño

El ser humano piensa, actúa y aprende. Y el aprendizaje será fruto siempre de la relación entre pensamiento y acción. La actuación que puede tenerse después de cada aprendizaje es la que permitiría mediar una conducta inteligente. Dentro de la corriente factorial, un amplio número de tests que valoran no la inteligencia (factor «g»), sino conductas –mecánicas, perceptivas, psicolingüísticas, de memoria, musicales, etc.– para establecer el grado de aptitud intelectiva de una persona en un área determinada. Los ejemplos más significativos son:
PMA: Aptitudes Mentales Primarias
E PMA es un ejemplo clásico de los tests de análisis factorial. En él se consideran como aptitudes mentales primarias las cinco siguientes:
  • V – Capacidad de comprensión de ideas expresadas en palabras.
  • E – Concepción de objetos en dos y tres dimensiones.
  • R – Previsión y planificación en la resolución de problemas lógicos.
  • N – Manejo numérico rápido en problemas cuantitativos
  • F- Soltura para hablar y escribir
Existen 59 baremos para cada factor según el nivel cultural o escolar, la profesión, la edad y el sexo de cada persona.
ITPA: Aptitudes psicolingüísticas
El ITPA mide las habilidades psicolingüísticas de niños de 2 años y medio a 10 años y medio, pero es más un instrumento de diagnóstico de aptitudes y dificultades en el aprendizaje, que una herramienta clasificatoria, y es el más habitual cuando se sospecha algún problema de comprensión y expresión verbal en el niño. El ITPA trabaja en tres dimensiones cognitivas.
  • La primera son los sentidos de la vista y el oído, como canales de comunicación en una ruta de doble vía en la que el niño recibe y emite (mediante el lenguaje gestual y verbal).
  • La segunda dimensión es el proceso psicolingüístico en sus tres momentos básicos: el receptivo (comprender lo que se oye y se ve), el de asociación (relacionar la percepción con conceptos y símbolos adquiridos) y el expresivo (habilidad verbal y gestual).
  • La tercera dimensión es la organización de los niveles automático y representativo.
    • El primero establece hábitos de respuesta automática ante estímulos.
    • En el segundo se implican las representaciones simbólicas como ejercicio expresivo voluntario.
FROSTIG: Aptitudes perceptivas
El test de desarrollo de la percepción visual Frostig se aplica a niños de 3 a 9 años y evalúa su grado de madurez visual. En otras edades puede aplicarse también a individuos en los que se aprecien retrasos en su desarrollo perceptivo. Del mismo modo que un retraso en el lenguaje oral puede ser debido a dificultades auditivas en el niño, el retraso en el aprendizaje de la lectura puede ser un síntoma de deficiencias en las aptitudes perceptivas visuales, y el Frostig puede detectadas y ayudar a resolverlas.
MY: Test de memoria inmediata
Consta de cuatro niveles de aplicación, según los cursos escolares de ambos niveles de enseñanza. El MY evalúa la memoria inmediata —de tipo gráfico, de palabras, números y relatos— como aptitud independiente del resto de capacidades intelectivas. Obviamente, existen muchas otras variables —como la percepción auditiva y visual— que se consideran útiles en el rendimiento escolar, en procesos que exigen atención y comprensión.
dibujo
En una de las pruebas del MY, se pide a los niños que miren, durante un minuto, un dibujo lleno de elementos pertenecientes a un mismo tema, y que después escriban todo lo que recuerden.

McQUARRIE: Aptitudes mecánicas
El text McQuarrie evalúa habilidades de precisión y rapidez manual y consta de siete subtests: trazado, marcado, punteado, copiado, localizado, recuento y laberinto. Es aplicable a partir de los 10 años y no importa el tipo de formación cultural que tenga la persona a la que se le pasa. Típico test de los denominados de papel y lápiz, es también uno de los más utilizados para medir aptitudes mecánicas relacionadas con la inteligencia técnico-práctica. Los factores que intenta evaluar en sus pruebas son la rapidez de movimientos manuales controlados visualmente, y también la concepción espacial.
cubo
 SEASHORE

El Seashore evalúa aptitudes musicales de tono y memoria tonal, intensidad, sentido del tiempo y timbre. Es útil tanto para centros de enseñanza musical como para selección de personal en grupos musicales. Consta de seis tests grabados, y puede aplicarse colectivamente a partir de los 9 años.

domingo, 27 de diciembre de 2015

Cómo criar a nuestros hijos para que estén seguros de sí mismos

Cómo criar a nuestros hijos para que estén seguros de sí mismos

Son muchos los valores que los padres hemos de enseñar a nuestros hijos para que estos lleguen a ser personas adultas y maduras a medida que vayan creciendo. Sin embargo, nosotros no lo sabemos todo y, a veces, nos encontramos con dudas en el momento de darles la mejor educación.
La autonomía de los niños es algo en lo que debemos trabajar. Para ello, ellos van a tener que enfrentarse por sí solos a pequeñas situaciones de su vida cotidiana, de manera que se vayan preparando para las circunstancias que van a vivir de adultos. Por esta razón, hacer queéstos tengan un buen sentido de la responsabilidad y que sean personas equilibradas, dentro de la posibilidad de sus edades, es algo prioritario en su educación.

Maneras de fomentar la seguridad en los niños

La mejor manera de fomentar su seguridad es dejar que estos actúen, dentro de determinados parámetros, para solucionar sus propios problemas. Algunas de las mejores técnicas aconsejadas por los psicólogos infantiles son:
- Utilizar un lenguaje positivo y halagar sus avances: aunque nos pueda parecer poco a ojos de los adultos, cada pequeño logro que alcanzan supone un esfuerzo para ellos. Debemos alabar estas progresiones que realizan y usar siempre palabras positivas para darles ánimos.
- Ayudar en casa: los pequeños hacen lo que ven que hacen sus padres y es muy posible que en pocos años quieran colaborar con las tareas domésticas. No debemos decirles que 2”no”, debemos dejar que nos ayuden, aunque a veces pueda representar más trabajo para nosotros.
- Dales tiempo para ellos: los niños, más que los adultos, necesitan tiempo para estar con ellos solos y probar cosas de la vida. Esto no quiere decir que los dejemos aislados, pero sí debemos concederles tiempo para experimentar y probar cosas nuevas.
Seguridad: los padres somos las personas con las que nuestros hijos se sienten seguros y, si estamos a su lado cuando empiezan a experimentar cosas nuevas, les transmitiremos una buena sensación de seguridad para que sigan avanzando
- Cuidado con la sobreprotección: pese a que nosotros queremos defenderlos de todo, debemos entender que esto va en contra de su aprendizaje. No les podemos proteger más de la cuenta y debemos dejar que ellos se enfrenten a las situaciones de la vida adecuadas a su edad.

Con estos pequeños consejos y con nuestro  ejemplo, como siempre, veremos cómo nuestros pequeños hacen grandes avances en su vida para llegar a ser completamente autónomos.

sábado, 26 de diciembre de 2015

Cómo se comportan los jóvenes colombianos en redes sociales?

Un estudio reciente reveló que los adolescentes de entre 14 y 19 años pueden llegar a tener entre 6 y hasta 10 perfiles personales en internet. Definen su comportamiento como “volátil”.


La consultora FindaSense, se dio a la tarea de investigar un tema complejo: ¿qué hacen los adolescentes colombianos en redes sociales? La principal conclusión es que Instagram, la red de las imágenes resultó ser el revulsivo que los sacó del ostracismo, mientras que Tinder es el sitio preferido.

Los investigadores aseguran que los adolescentes colombianos “son coleccionistas de momentos, su memoria es Google y el fenómeno Instagram les ha hecho desarrollar una nueva ‘memoria anticipada’ debido a que se imaginan el resultado de la experiencia que viven, la foto, incluso antes de que suceda”.

Los jóvenes que pertenecen a la generación Z, nacieron y crecen con Internet, son nativos digitales. Toman decisiones importantes para su vida a partir de sus experiencias en línea. Por ejemplo, en el campo de la educación, un ámbito vital para el individuo, optan por el autoaprendizaje permanente haciendo uso de las infinitas herramientas que brinda la red.

Sin duda, los adolescentes son uno de los targets más deseados por las marcas a lo largo de toda la región, pero al mismo tiempo el más desconocido. "Ellos son volátiles, impulsivos y evitan compartir con adultos. Pero, además, su presencia en el medio social es segmentada y difícil de seguir", afirma desde la firma consultora.

La encuesta, que se realizó en Latinoamérica,  dividió en dos grupos de 14 a 16 años y de 17 a 19 años. Entre las cifras más destacadas está que YouTube es la red social preferida en ambos grupos. Los chicos de 17-19 prefieren Facebook e Instagram. Mientras que el grupo de 14-16 se vuelcan por Snapchat, Askfm y Vine. 

En cuanto a las actividades que desarrollan durante la navegación, el estudio desagregó por redes. “Los adolescentes colombianos acuden a Facebook para usos muy puntuales: conocer personas y e integrar otras redes”, aseguran. En menor medida, la utilizan esta red para chatear.

La mayoría de los adolescentes colombianos le da un uso personal a Instagram. Usan esta plataforma, en mayor medida, para compartir fotografías y selfies. En segundo lugar, utilizan la red social para seguir a personalidades como influenciadores y celebridades, a efectos de conocer más sobre lo que hacen, y estar al pendiente de sus tendencias, estilos y propuestas. 

Los adolescentes colombianos se vinculan con Twitter de modo algo diferente al que lo hacen adolescentes de otros países de Latinoamérica. Para ellos, esta red no tiene que ver con hacer catarsis sino más con “estar enterados”.

En cuanto a temas musicales, YouTube es la preferida por los adolescentes. “Es la rockola en la web”, aseguran desde FindaSense. En segundo lugar eligen Spotify, mientras que el iTunes y las radios on line, ya quedaron muy atrás.

El fenómeno Tinder

Uno de los datos que más impactó a los investigadores es que Colombia es donde más se utiliza Tinder entre los jóvenes. La aplicación que funciona para conocer nuevas personas y tener encuentros casuales muestra que los adolecentes colombianos confían en internet para conocer gente nueva. Pero esto tiene sus riesgos.

Según Ruth Polchlopek, gerente general de Universia Colombia, “las nuevas generaciones han nacido en la era digital y por lo tanto, la influencia de Internet en sus vidas será cada vez más alta”. Pero no miden los riesgos. Los estudios demuestran que esta población es “muy confiada”, al momento de compartir información.

"El vínculo de confianza entre los usuarios y sus dispositivos puede llevar a olvidarse de la seguridad. Es difícil imaginar que algo que llevamos cerca de nosotros en todo momento y que encendemos para todo, pudiera convertirse en una amenaza. Pero sí puede, y sucede”, afirma Víctor Yablokov, de Kaspersky Lab.

Un estudio de la Universidad de la Sabana había indicado que, El 45 % de los jóvenes bogotanos se conecta para hablar con amigos, el 19% para jugar, el 13% para descargar música, el 12% para hacer trabajos, el 7% para buscar información, el 3% para conocer gente y el 1% para ver pornografía. Ese 4% sigue siendo la gran preocupación de las autoridades.

viernes, 25 de diciembre de 2015

Conozca de qué manera pueden los padres tener felices a sus hijos

Los papás deben, primero, encontrar su propia felicidad para transmitírsela y compartirla.

Compartir tiempo de calidad con los hijos permite no solo conocerlos, sino tener y recordar gratos momentos en familia.
Compartir tiempo de calidad con los hijos permite no solo conocerlos, sino tener y recordar gratos momentos en familia.

En todas las conferencias que dicto a padres de familia, al preguntarles qué quieren para sus hijos, todos al unísono gritan “que sean felices”. Pero, ¿a qué se refieren?
Quieren que sean independientes, responsables, exitosos. La verdad es que no lo saben. Lo único en lo que están de acuerdo es que la felicidad es su meta.

Esta es una buena meta, ya que no solo es importante sino necesaria para un buen vivir.
¿Qué necesitamos?
Lo primero que necesitamos para la felicidad de los hijos es tener padres felices. Los padres que no lo son difícilmente criarán hijos felices. Todos los estudios científicos demuestran que hay una correlación directa entre padres deprimidos e infelices e hijos difíciles. Vamos a ver qué pueden hacer los adultos, padres de familia, para mantenerse contentos y así transmitir felicidad a sus hijos.
Tener un grupo de amigos o de familiares da tranquilidad, sentido de pertenencia y, obviamente, lleva a la felicidad. Todos necesitamos a nuestro lado personas optimistas, divertidas, con las que conectamos fácilmente y sabemos que estaremos apoyados por ellos siempre.
Quererse y cuidarse a uno mismo es otra variable que lleva a la felicidad. Uno de los focos de tranquilidad es el contacto con el cuerpo y con nosotros mismos. Necesitamos cuidar nuestro cuerpo de la mejor manera posible, haciendo ejercicio y manteniéndolo sano y saludable, con comida nutritiva y libre de toxinas.
Otra característica de los padres felices es que saben manejar y resolver cualquier problema que se les presente, sin dejarse hundir por este. No dejan asuntos sin resolver e intentan poner fin a todo aquello que represente un conflicto en su vida.
Los padres felices también sacan tiempo especial para la vida en pareja, sin niños.
Este es uno de los favores más grandes que les pueden hacer a sus hijos, ya que una pareja feliz, compenetrada y empática forma hijos más felices e independientes.

La pareja necesita pasar tiempo de calidad juntos. Me preocupa que hoy en día los padres piensan que tienen que estar todo el día con los hijos, porque si no lo hacen se sienten culpables. Lo importante es encontrar un balance en el que todos tengan sus espacios. Claro que es importante estar con los hijos, pero también en pareja y dedicarse tiempo de calidad. Al darle prioridad a la pareja, están cuidado a sus hijos.
Otras variables que también caracterizan a los padres felices son: tener paz interior, tener la certeza de que se hizo todo lo posible para cumplir con el deber, ser positivo; es decir, buscar y sacar lo mejor de cada situación. Buscar tener buenas relaciones afectivas, ponerse metas realistas y amables, intentar sentir y expresar la gratitud, aprender a vivir el momento, intentar hacer lo que más le gusta, es decir, tener un hobbie.
Además, situaciones cotidianas, que parecen sencillas, pero son muy enriquecedoras: dormir bien, tener un significado y propósito de vida, alguna creencia religiosa o espiritual, buscar que sus trabajos sean una pasión, no solo un deber. Tener expectativas realistas, no sueños casi imposibles de realizar, trabajar en aquellos obstáculos de la felicidad, identificarlos y superarlos.
Hacer ejercicio de manera frecuente también contribuye a mayor cantidad de neurotransmisores en el cerebro, lo cual lleva a un estado anímico positivo. Igualmente pasa cuando la persona es altruista y ayuda a otros. Se produce más serotonina, que es el neurotransmisor del bienestar.
Como ven, los pilares de la felicidad en la familia son, sin duda, los padres.
El amor: el motor
Además de todo lo dicho anteriormente, es importante que se cree un vínculo afectivo fuerte entre padres e hijos. Este vínculo se construye día a día, no solo dándole cosas materiales sino tiempo y atención afectuosa. Compartir con los hijos las experiencias diarias es lo que fortalece este vínculo. Una buena manera de afianzar estos lazos entre padres e hijos es compartiendo rutinas establecidas; hábitos para dormir, para comer, para hacer ejercicio, para hacer las tareas, etc.
Conocer los talentos y debilidades de los niños también es una pieza fundamental para su felicidad posterior. Como padres, si conocemos bien a nuestros hijos, sabemos cuánto y qué se les puede exigir, y lo que no es apropiado para ellos. Esto nos lleva a tener una buena disciplina en el hogar, otro pilar importantísimo en la felicidad de nuestros hijos. La disciplina apacigua temores y, por lo tanto, es una gran aliada del bienestar familiar y personal. Los temores tan frecuentes en la infancia son ladrones de la felicidad.
Como ven, papás, ustedes tienen un papel crucial en el desarrollo de la felicidad de sus hijos. Pero, primero, tienen que construir la propia, para después multiplicarla en la familia.
En la cotidianidad...
Existen momentos de calidad que los padres pueden compartir en el día a día, junto a sus hijos:
Jugar en casa, hacerles cosquillas, salir al parque, armar una coreografía o una obra de teatro.
Hacer algún tipo de deporte juntos, como montar en bicicleta, nadar, patinar, etc.
Dialogar diariamente sobre los gustos, los retos y las vivencias de los niños; puede ser en la cena o antes de dormir. Salir de viaje, ir a cine, cocinar en casa.

jueves, 24 de diciembre de 2015

CELEBRACIÓN DEL NACIMIENTO DE JESÚS

Érase una vez un hombre que no creía en Dios y no tenía reparos en decir lo que pensaba de la religión y las festividades religiosas, como la Navidad.  Su mujer, en cambio, era creyente a pesar de los comentarios desdeñosos de su marido.

Una nochebuena en que estaba nevando, la esposa se disponía a llevar a los hijos al oficio navideño de la iglesia de la localidad agrícola donde vivían.  Le pidió al marido que los acompañara, pero él se negó.

-    ¡Qué tonterías! -arguyó-.  ¿Por qué Dios se iba a rebajar a descender a la tierra adoptando la forma de hombre? ¡Qué ridiculez!

Los niños y la esposa se marcharon y él se quedó en casa.

Un rato después, los vientos empezaron a soplar con mayor intensidad y se desató una ventisca.  Observando por la ventana, todo lo que aquel hombre veía era una cegadora tormenta de nieve, y decidió relajarse sentado ante la chimenea.  Al cabo de un rato, oyó un fuerte golpe; algo había golpeado la ventana. Luego, oyó un segundo golpe fuerte. Miró hacia afuera, pero no logró ver a más de unos pocos metros de distancia. Cuando empezó amainar la nevada, se aventuró a salir para averiguar qué había golpeado la ventana.

En un campo cercano descubrió una bandada de gansos salvajes.  Por lo visto iban camino al sur para pasar allí el invierno, y se vieron sorprendidos por la tormenta de nieve y no pudieron seguir. Perdidos, terminaron en aquella finca sin alimento ni abrigo. Daban aletazos y volaban bajo en círculos por el campo, cegados por la borrasca, sin seguir un rumbo fijo. El agricultor dedujo que un par de aquellas aves habían chocado con su ventana.  Sintió lástima de los gansos y quiso ayudarlos.  Sería ideal que se quedaran en el granero, pensó.  Ahí estarán al abrigo y a salvo durante la noche mientras pasa la tormenta.

Se Dirigió al establo y abrió las puertas de par en par. Luego, observó y aguardó, con la esperanza de que las aves advirtieran que estaba abierto y entraran.  Los gansos, no obstante, se limitaron a revolotear dando vueltas. No parecía que se hubieran dado cuenta siquiera de la existencia del granero y de lo que podría significar en sus circunstancias.  El hombre intentó llamar la atención de las aves, pero sólo consiguió asustarlas y que se alejaran más.

Entró a la casa y salió con algo de pan. Lo fue partiendo en pedazos y dejando un rastro hasta el establo. Sin embargo, los gansos no entendieron.  El hombre empezó a sentir frustración. Corrió tras ellos tratando de ahuyentarlos en dirección al granero, pero lo único que consiguió fue asustarlos más y que se dispersaran en todas direcciones menos hacia el granero. Por mucho que lo intentaba, no conseguía que entraran al granero, donde estarían abrigados y seguros.

-    ¿Por qué no me seguirán? -exclamó- ¿Es que no se dan cuenta de que ese es el único sitio donde podrán sobrevivir a la nevasca?

Reflexionando por unos instantes, cayó en la cuenta de que las aves no seguirían a un ser humano.  Si yo fuera uno de ellos, entonces sí que podría salvarlos, dijo pensando en voz alta.  Seguidamente, se le ocurrió una idea. Entró al establo, agarró un ganso doméstico de su propiedad y lo llevó en brazos, paseándolo entre sus congéneres salvajes. A continuación, lo soltó.  Su ganso voló entre los demás y se fue directamente al interior del establo. Una por una, las otras aves lo siguieron hasta que todas estuvieron a salvo.

El campesino se quedó en silencio por un momento, mientras las palabras que había pronunciado hacía unos instantes aún le resonaban en la cabeza:

-    Si yo fuera uno de ellos, ¡entonces sí que podría salvarlos!

Reflexionó luego en lo que le había dicho a su mujer aquel día:

-    ¿Por qué Dios iba a querer ser como nosotros? ¡Qué ridiculez!

De pronto, todo empezó a cobrar sentido.  Entendió que eso era precisamente lo que había hecho Dios. Podía decirse que nosotros éramos como aquellos gansos: estábamos ciegos, perdidos y a punto de perecer. Dios se hizo hombre como nosotros a fin de indicarnos el camino y por consiguiente, salvarnos. El agricultor llegó a la conclusión de que ese había sido ni más ni menos el objeto de la Navidad.

Cuando amainaron los vientos y cesó la cegadora nevasca, su alma quedó en quietud y meditó en tan maravillosa idea.  De pronto, comprendió el sentido de la Navidad y por qué había venido Jesús a la Tierra.  Junto con aquella tormenta pasajera, se disiparon años de incredulidad.  Hincándose de rodillas en la nieve, elevó su primera plegaria:

-    "¡Gracias, Señor, por venir en forma humana a sacarme de la tormenta!"

miércoles, 23 de diciembre de 2015

Seguir unas normas, aquello que tanto molesta a los adolescentes

Seguir unas normas, aquello que tanto molesta a los adolescentes

Las normas familiares suelen ser fuente de problemas durante la etapa de la adolescencia, en la que los jóvenes rechazan muchas cosas que habían adquirido o aceptado con anterioridad. Su necesidad de «ser» vistos, escuchados, y de ser reconocidos en la sociedad les lleva a una oposición continua, con posturas en ocasiones de indisciplina y rebeldía a todo lo impuesto. En realidad quieren afirmarse como personas, desapareciendo estas conductas al ir tomando responsabilidades. En cambio, pueden ser muy dóciles con las normas del grupo de amigos, a los que siguen con una gran lealtad, o a las instituciones a las que se adhieren en razón a un ideal social como vía de identificación.
¿Por qué rechazan lo establecido?
La necesidad de rechazar lo establecido no es un aspecto negativo en el adolescente, sino una vía para reafirmarse como persona. Su identidad personal es precaria, y ello les lleva al intento, a veces doloroso, de buscar salidas propias con las que sentirse queridos y valorados, fuera del ambiente familiar donde hasta el momento han sido protegidos. Sus cambios psicológicos e intelectuales les llevan a cuestionarse si los modelos que representan sus padres pueden seguir constituyendo el ideal. Pierden la admiración por ellos, pasando a una actitud completamente contraria en la que son desvalorizados, para poder diferenciarse de ellos. Sin embargo, necesitan agarrarse a otros ideales para subsistir, y los suelen encontrar en los grupos de amigos, en el amor, etc. El psicólogo social Deutsch dice que todos los grupos de adolescentes tienen dos objetivos principales: servir de vehículo a la rebelión y ofrecer de alguna manera un refugio contra la angustia. Son vías transitorias, propias de esta etapa, que les ayudarán en el futuro a reafirmarse en el lugar que les corresponde como adultos.
¿Cuáles son los problemas más frecuentes?

El adolescente es un chico insatisfecho con un componente importante de malestar. Se siente incomprendido por los padres y la sociedad en general, a quienes acusa de la causa de todos sus males. Su fragilidad y turbulencia interior le ocasionan enfrentamientos constantes con el mundo que le rodea o bien un retraimiento consigo mismo que lo aísla de la realidad. Sus demandas son ya «exigencias», exige tener más libertad de horarios, poder ir con los amigos y amigas que le plazca, etc. Desea dar salida a sus impulsos de forma inmediata y conseguirlo todo al instante. Su encuentro con el otro sexo suele ser romántico y difícil, puesto que hay un sentimiento de inseguridad e infravaloración de su propio cuerpo que desea reafirmar con el descubrimiento del otro sexo. Hay que tener mucho cuidado en este momento, ya que los adolescentes viven las normas y prohibiciones de los padres como ataques de los que tienen que defenderse. Es conveniente no intentar resolver los problemas por la vía de la disputa continua y no desvalorizar todo lo que hace.

martes, 22 de diciembre de 2015

Las tácticas de grandes intelectuales para aprender

¿Cuáles eran esos hábitos que personas como Einstein o Newton tenían y que los ayudaban a aprender y entender mejor las cosas?

Las tácticas de grandes intelectuales para aprender 
Las tácticas de grandes intelectuales para aprender


El aprendizaje no es el mismo ni va al mismo ritmo. Quizá por eso usted sentía que tenía más afinidades con ciertos profesores o materias que otros o que le era más fácil distraerse en otros asuntos y eso no significaba que fuera malo o que tuviera “déficit de atención”, sólo que tenía otros mecanismos para aprender.

Por eso, no está de más conocer cómo los grandes genios de la historia mundial hacían para desarrollar sus habilidades intelectuales de aprendizaje y creación, con las que lograron inventos y planteamientos trascendentales.

Newton

Reconocido por su trabajo y constancia en el estudio de la fuerza de gravedad, Inc. señala que uno de ´sus hábitos más destacados de aprendizaje era la forma como leía libros, tenía una técnica de doblar las esquinas de las páginas. Pero no lo hacía como cualquiera lo hace (ya sea hacia arriba o hacia abajo), se aseguraba de que la esquina siempre señalara, exactamente, una palabra o una oración particular del texto.

Además, era de quienes hacia toma de notas extensas en las mismas páginas del libro y la mayoría de veces ocupaba todo el espacio en blanco que tenían las hojas. A esto se le sumaba otro dato curioso: creaba índices y listas de contenidos particulares: por orden alfabético y por temas y señalaba, después de cada uno, la página correspondiente; un hábito que se complementaba con el hecho de doblar las esquinas de las páginas.

Por último, se destacaba que los libros de Newton parecían como si hubiesen sobrevivido a una guerra: la mayoría estaban ultrajados y en un estado deplorable. Y no porque fuera algo que él hiciera con intención, sino porque usaba los libros como herramientas de trabajo de las que sacaba el máximo provecho.

Einstein

En el mundo este gran científico alcanzó a tener la fama de ser la persona más inteligente, durante su infancia y juventud muchas personas le dijeron que nunca tendría éxito en nada y que era un chico bastante distraído. Pero con el paso del tiempo demostró que no se necesitaba tener unas características como las de los demás chicos inteligentes para destacarse.

La Universidad de Pittsburg hizo un estudio de la forma de aprendizaje de este genio y encontró que tenía un principio clave: “no escuche las palabras, fije su atención en los hechos”. Esto implicaba que no tenía que prestar mucha atención a la teoría sino que, a partir del campo de estudio, se concentrara en suceso específicos y sacara de ellos la mayor cantidad de conclusiones. De esa observación misma era de donde obtenía su inspiración.

Otro texto bastante conocido era una carta que le envió a su hijo en el que lo alentaba a seguir estudiando piano y, a la vez, le confesaba su secreto para aprender las cosas: lo que quiera aprender, simplemente hágalo con placer cuantas veces quiera y, con ello, su propia mente lo asumirá fácilmente.

Da Vinci

Su talento para las artes y las ciencias se desarrolló basado en una sola característica propia de su personalidad: la curiosidad. Esta era la clave de su éxito intelectual porque, a partir de ella, lograba tener en su cabeza todas las características del mundo como lo percibía. Una publicación de Michael Novak caracteriza cómo era esta curiosidad, cómo la aplicaba y cómo, a través de los sentidos, lograba inspirarse a estudiar cada una de las situaciones que percibía.

Esa misma curiosidad que cultivaba entorno a lo que a él le llamaba la atención, fue lo mismo que llevó a que experimentara y registrara todo lo nuevo que encontraba. Pero, sin duda, la experiencia y el estar en trabajo de campo, fue la clave fundamental que usó para aprender todo lo que supo.

Aristóteles

Uno de los filósofos más famosos de la historia, se destacó en sus métodos de aprendizaje por aplicar la lógica en cada uno de los campos de conocimiento en los que se iniciaba, complementada con el lenguaje. Esto, lo que implicaba, era desarrollar la capacidad de tener dos conocimientos y buscar la forma de relacionarlos entre sí, a partir de la realidad.

Pero además, se caracterizó por la autodeterminación, lo que lo llevaba a obtener mejores resultados de sus procesos de aprendizaje y darles sentido a las tareas o conocimientos que adquiría. Un artículo de The Guardian destaca cómo estas habilidades, llevadas a los campos académicos, hacían que sus estudiantes desarrollaran una curiosidad personal por las cosas que los rodeaban y, con ello, tenían una motivación propia a querer saber cada vez más y más del funcionamiento de las mismas.