lunes, 9 de noviembre de 2020

Niño que abandonó su perro por el maltrato de su padre, le envía cartas y monedas para galleticas

El pequeño en cada escrito le promete que cuando crezca volverá por él.


Una verdadera lección de amor y fidelidad ha dado un pequeño en México quien, pese a que tuvo que abandonar a su mascota, no se olvida de ella y se las ingenia para seguirle enviando muestras de cariño, bajo la promesa de que al crecer regresará por su perro.

Se trata de un pequeño quien, en marzo de este año, en medio de la contingencia mundial que se vivía por la pandemia de coronavirus, tuvo que dejar a su perro en un albergue, asegurando que lo hacía para salvarlo del maltrato de su padre.

La historia se conoció luego de que el refugio para animales llamado Pergatuzoo publicara en su página de Facebook la carta encontrada junto al cachorro abandonado en la puerta del albergue.

En el conmovedor escrito el pequeño decía a los encargados del refugio que les entregaba a su perro Simón porque su papá lo maltrataba. El niño expresaba que "llora mucho porque no hay comida" y les pedía a los cuidadores que por favor no le fueran a pegar más. 

Además, les hacía una solicitud especial “no se lo lleven, cuando yo crezca vengo por Simón” y como una muestra de colaboración para que su pequeño amigo no sufriera, el niño adjuntó en la carta unas monedas diciendo “te dejo mis ahorros para sus tortillas”.


Cinco meses después de que se viralizara esta conmovedora historia, el refugió publicó en redes sociales el avance de Simón y contó que el niño aún continúa en contacto con su mascota, la cual no fue puesta en adopción para que cuando su dueño crezca pueda recuperarla.

A través de redes también se conoció que, aunque el niño no ha podido ir a ver a su perro, ente otras razones por el aislamiento obligatorio, se las ha ingeniado para hacerle llegar cartas en las que expresa el amor por su mascota y le sigue prometiendo que al crecer se lo llevará a vivir con él.

En una reciente carta publicada, el niño le cuenta a Simón que se enteró que lo llevaron al veterinario y envía nuevamente monedas de sus ahorros para que le sigan comprando tortillas y golosinas.


La fundación que recogió al animalito difundió inicialmente la carta y la foto de Simón con la intención de ubicar al niño para asegurarle que su perro no sería dado en adopción y que ellos se harían cargo de sus cuidados mientras él crece y puede volver a estar con él.

También expresaron en redes sociales que permitirían al niño ir a visitar a su mascota cada vez que pueda hacerlo.

Los meses han pasado y el perrito ha crecido feliz bajo los cuidados de los animalistas y la fidelidad de su dueño.