miércoles, 14 de julio de 2021

Cigarrillos electrónicos son prohibidos por EE.UU. de forma parcial

A fines de noviembre, el Congreso aprobó una ley que aumentó de 18 a 21 años la edad mínima para comprar productos de vapeo.


Un habitante de la ciudad de Nueva York camina mientras fuma un cigarrillo electrónico.

El gobierno de Donald Trump anunció este jueves la prohibición en Estados Unidos de la mayoría de los cartuchos aromatizados para cigarrillos electrónicos, sin llegar a la veda total con la que se había comprometido en septiembre.

La Administración de Drogas y Alimentos de Estados Unidos (FDA) anunció que a partir de febrero no se permitirá la venta de las recargas con aromas distintos a tabaco y mentol, salvo que hayan obtenido una autorización específica de las autoridades. El objetivo es prevenir el vapeo entre los más jóvenes, dijo el secretario de salud Alex Azar.

La industria del tabaco y del vapeo se movilizó todo el otoño boreal ejerciendo presión sobre Trump para que diera marcha atrás en su compromiso, advirtiéndole del costo potencial de empleos en el sector y de votos durante las próximas elecciones presidenciales. A fines de noviembre, el Congreso aprobó una ley que aumentó de 18 a 21 años la edad mínima para comprar productos de vapeo, texto que entrará en vigencia después del verano.

El compromiso anunciado el jueves por la FDA inicialmente dejará en el mercado cigarrillos electrónicos que no funcionan con este tipo de cartuchos y que se venden principalmente en tiendas especializadas, las "vape shops".

"Son los sistemas de cartuchos y cápsulas los que crearon el problema, eso es lo que atrae a los niños", dijo Azar en una conferencia telefónica. "Los niños en su mayoría no usan sistemas de tanque abierto". "Nuestro objetivo es ver si los cigarrillos electrónicos pueden servir como una salida para los fumadores adultos que son adictos a los cigarrillos combustibles (convencionales), creemos que es una posibilidad", dijo.

El mismo ministro había anunciado en septiembre, después de una reunión en la Oficina Oval con Trump, que se prohibirían todos los sabores, inclusive el mentol, para frenar el vapeo entre los jóvenes. Al final del verano, un pico de enfermedades pulmonares graves y en algunos casos fatales vinculadas al vapeo incrementó la preocupación general causada por el éxito de la empresa Juul entre los jóvenes.

Según la encuesta gubernamental sobre el tabaco de 2019, 27,5% de los estudiantes de nivel secundario dijo haber vapeado en los últimos 30 días, en comparación con 11,3% en 2016. Tras el anuncio este jueves se desató una gran presión de la industria del tabaco y del vapeo para que el gobierno retroceda, argumentando consecuencias electorales para el presidente, que buscará la reelección en noviembre. Trump había dicho que se contentaría con aumentar la edad legal de 18 a 21 años para comprar productos de vapeo.

"Nos ocuparemos de la industria", dijo el martes por la noche. A fines de diciembre, el Congreso estadounidense votó a favor de subir la edad legal del consumo a 21 años, lo que debería aplicarse para septiembre en todo Estados Unidos. Hasta ahora, solo 19 de los 50 estados han adoptado esa edad mínima.

Al hablar para un grupo antitabaco y funcionarios de salud, Matthew Myers, presidente de la campaña por Niños sin Tabaco, expresó preocupación por la nueva normativa. Según dijo, "crea una escapatoria gigante que beneficiará a las actuales compañías tabacaleras". Nancy Brown, directora ejecutiva y presidenta de la American Heart Association, lo calificó como "una gran victoria para la firma Juul, las tiendas de vapeo y el resto de la industria del cigarrillo sobre el interés" del país.

TIENDAS DE VAPEO, SALVADAS

El nuevo panorama regulatorio para el vapeo se está volviendo más claro tras años sin restricciones. Desde 2016, la FDA tenía autoridad sobre el vapeo y se requería una autorización para la venta de productos. Pero la agencia federal había decidido no aplicar esta regla, con la esperanza de que el vapeo fuera una solución para quienes quisieran dejar de fumar.

El Reino Unido ha adoptado esta posición. Ahora la FDA hará cumplir la prohibición, pero de manera selectiva. De aquí a febrero, los cartuchos aromatizados que no sean tabaco y mentol serán prohibidos.

Sus fabricantes podrán solicitar autorización si quieren distribuirlos. Para todos los demás productos, los fabricantes y distribuidores, incluidas las "tiendas de vapeo" que hacen mezclas, deben presentar una solicitud de autorización antes de mayo.

Mientras tanto, podrán continuar sus ventas hasta 12 meses después de la presentación de la solicitud. Todos tendrán que demostrar un interés de salud pública, y que sus productos no están dirigidos a los jóvenes.

Este esquema "debería tener un impacto mínimo en las tiendas de vapeo" que se centran en vapeadores de tanques y que controlan bien la edad de sus clientes, dijo Mitch Zeller, director del centro de tabaco de la FDA.

martes, 13 de julio de 2021

La increíble hazaña de buzo perdido en el mar y sus 3 días a la deriva

Jorge Morales sobrevivió a aguas infestadas por tiburones y medusas. Otros dos buzos fallecieron.

Acualquier lugar donde mirara solo podía ver agua. Mi vida pendía de un hilo. Llevaba tres días flotando en algún lugar del océano Pacífico sin ver el barco ni una roca de la isla.

Había organizado ese viaje unos seis meses atrás. Nunca había estado en Malpelo y soñaba con sumergirme debajo de esa roca, santuario de cientos de especies.

Volé el 26 de agosto del 2016 de Medellín hacia Cali y luego me fui a Buenaventura, donde abordé el barco María Patricia.

En el barco conocí a mis compañeros de travesía, todos buzos experimentados como yo. El bogotano Hernán Darío Rodríguez, la antioqueña Erika Vanessa Díaz, el caleño Carlos Enrique Jiménez, quien era el instructor, el estadounidense Peter Morse y Darío, otro buzo de quien no recuerdo su apellido.

Esa era la primera vez que viajaba a este lugar. Tenía una lista con las especies que podría ver en Malpelo, como langostas gigantes, tiburones ballena, entre otros cientos de peces.

El amor por el agua lo heredé de mi padre, con quien de niño iba a pescar cerca de Medellín, hasta que una noche, a mis 13 años, me tocó trasladarlo en un taxi luego de que unos sicarios lo balearan al momento cuando estaba entrando a nuestra casa. Su muerte cambió por completo mi vida.Llegamos a Malpelo

La primera parada fue la isla de Gorgona. Allí hicimos una inmersión sin dificultad y zarpamos a Malpelo.

Llegamos el domingo 28 de agosto. Desde el María Patricia vimos esa inmensa roca tras navegar algo más de 500 kilómetros.



La isla de Malpelo está ubicada en el Pacífico. Se llega tras navegar unos 500 kilómetros desde Buenaventura.

No había que esperar más. Era hora para vestir nuestros trajes y cargar los equipos. Las instrucciones de cada inmersión eran consensuadas y se nos decía al pie de la letra el recorrido que haríamos.

Al sumergirnos, el agua era extremadamente fría, el mar se movía bastante y se sentía picado. Siempre arrancábamos las seis personas.

Primero Erika, Hernán y Darío salían. Luego lo hacíamos Peter, Carlos y yo. Al día hacíamos tres inmersiones, cada una podría durar alrededor de 45 minutos.

Sumergirse en esas aguas cristalinas y clavar la mirada en los peces era sublime. Los días se pasaban entre la alimentación, la inmersión, el descanso y hablar de lo que veíamos y qué hacíamos en nuestras vidas.

Les conté que tenía 44 años, que por dos décadas había viajado a distintos lugares a bucear, que era una pasión que me ayudaba a conseguir tranquilidad y liberarme del estrés de mi profesión como administrador de empresas en Medellín.

Conversábamos durante las extensas horas de viaje en el barco y nos fuimos conociendo. Erika, por ejemplo, era una antioqueña que recién acababa de ser madre. Peter, Hernán y Carlos dedicaban parte de sus vidas a bucear. Todos teníamos en común el amor por el mar.


Jorge Iván Morales, al momento de esta emergencia, tenía 44 años.

Pese a que las inmersiones eran complejas por el mar picado, la única dificultad había ocurrido con Darío, quien se lesionó para el tercer día en aguas de Malpelo.

Ese martes 30 de agosto, las corrientes fuertes le hicieron pasar un momento doloroso, cuando se estaba por montar al zodiac, un movimiento brusco del agua le hizo doblar su pie, por lo que no pudo realizar la inmersión del día siguiente, la cual ya sería la última.La última inmersión

A decir verdad, para este último trayecto ya estaba cansado y contemplé no realizarlo. Mi mente, para ese momento, quería estar de nuevo en casa, saludando a mis dos hijos en Medellín.

Hernán fue quien me convenció de realizar la inmersión. Quizá sería la última vez que bucearíamos en Malpelo y no se sabría cuándo habría posibilidad de retornar, teniendo en cuenta que llegar hasta aquí era lejos y difícil.

A las 3 de la tarde de ese miércoles 31 de agosto a la última inmersión saltamos del zodiac cinco buzos. El lanchero nos dejó un poco alejados del destino ante las dificultades que suponía el mar picado.

El lugar elegido para despedirnos de la isla era una zona llamada la Catedral, donde se atraviesa por debajo del agua parte de la roca del Malpelo.

El buceo planeado con Carlos, nuestro instructor, era lento, pues el cansancio en nuestros cuerpos por tantas jornadas ya se notaba.

Así las cosas, nos dividimos en dos grupos de apoyo para realizar la inmersión. Hernán, Carlos y Erika eran un equipo; Peter y yo, el otro.

Había mucha marea, se sentía una corriente muy fuerte. Al llegar a la Catedral vi langostas gigantes, eran especies inmensas y lindas. Me puse en primer lugar del grupo y mis compañeros pasaron delante de mí.


La isla es una de las más ricas en fauna y flora de todo el país

Empecé a ver burbujas, Peter estaba nadando mar adentro. No entendía su acción debido a que el plan era de buceo tranquilo, pensé que quería ver tiburones.

Uno tras otro siguieron a Peter. Me impulsé para alcanzarlos y no quedarme solo. Una corriente fuertísima nos arrastraba, nos revolcó y nos llevó a 110 pies de profundidad.

Empezamos a subir. Nos encontramos en la superficie tras 19 minutos de inmersión para comentar sobre la corriente que nos puso en aprietos.Rodeados por tiburones

Erika, pocos minutos después de que volviera la calma al grupo, sumergió su cabeza en el mar. Estábamos rodeados por tiburones, nos daban vueltas alrededor de nuestros cuerpos.

Sentí a Erika un poco angustiada. Luego, con Peter, el más avezado, decidimos nadar con los tiburones, pude contar más de 50 de ellos. Había de varias especies, entre ellos tiburón ballena, martillo y arrecife. Duramos jugando con ellos unos 10 minutos.


En esta área todos los tiburones están protegidos.

Al volver a la superficie, los dos estábamos solos e intentábamos hacer señas a la lancha para que nos recogieran, sin embargo, solo llevábamos 30 minutos y el plan contemplaba 45 minutos, por lo que el zodiac no estaba en el área para devolvernos al María Patricia.

La corriente nos iba alejando lentamente de Malpelo. Estábamos cada vez más distantes de la isla. Peter y yo empezamos a nadar mar adentro para acercarnos a la roca, pero una ola inmensa nos revolcó.

Luego del embate, mi primera impresión fue la de estar absolutamente solo en la mitad del mar. No veía por ningún lado a Peter. Paré de nadar, tenía miedo y soportaba las arremetidas del agua.

Tras algunos segundos, logré ver a Hernán, Erika y Carlos a unos 60 metros. Volví a lanzar mis brazadas desesperadas para acercarme a ellos y no quedarme solo.En la mitad del mar

Al primero que encontré fue a Hernán, a quien le manifesté que la corriente nos alejó del grupo y empezamos a dialogar qué debíamos hacer ante las circunstancias enrevesadas que teníamos. No sabíamos si era mejor que nos llevara la corriente o nadar contra ella.

-Erika y Carlos dijeron que nos quedáramos en la corriente, pero yo no quise, más bien me vine- dijo un agitado Hernán.

-Bueno listo, pero lo que tenemos que hacer es nadar, recortar la distancia hacia Malpelo, para que haya posibilidad de que nos encuentren- le contesté.

Así, el grupo de cinco buceadores quedó en segundos fraccionado en tres: Peter, solo; Erika y Carlos; Hernán y yo. Las aguas agitadas nos dividieron.

Mi deseo era llegar a Malpelo, nadábamos de espaldas para no soltar los tanques de oxígeno. Las primeras brazadas costaban mucho y nos separábamos, por lo que optamos por amarrarnos con cuerdas para permanecer juntos e intentar un nado sincronizado.

Duramos cerca de 90 minutos intentando llegar a Malpelo, pese a nuestros deseos de acercarnos, parecía que cada brazada nos alejaba más de la isla. Hacia las 5 de la tarde de ese miércoles ya estábamos solos los dos en la mitad del mar, sin rastro de alguno de los otros tres compañeros.La primera noche: animales furiosos

No había otras sensaciones diferentes al agobio, el desespero y la depresión. Malpelo se hacía inalcanzable.

Una llovizna leve empezó a caer en la zona. Cansados, abrimos nuestras bocas para beber lo que caía, pero de nuevo otra ola nos embistió. El agua salada se nos metió en la boca, nos dieron náuseas y vomitamos.

Al recuperarnos, empezamos a nadar. Todavía se veía algo de Malpelo, por lo que fijamos el rumbo de nuevo. Hernán alertó sobre algo que lo estaba picando, pensaba que se trataba de una excusa para no nadar más.

A los minutos, también sentí que me picaron, pero continúe nadando hasta que
empezó un ataque atroz de medusas.

Era dolorosísimo, sin piedad, no había manera de defendernos, parecían un enemigo invisible

La única zona del cuerpo que no cubrían nuestros trajes eran los rostros, estaban expuestos y fue ahí donde se ensañaron las medusas, que nos rozaban y quemaban decenas de veces y de manera fugaz.

Era dolorosísimo, sin piedad, no había manera de defendernos, parecían un enemigo invisible. A Hernán lo picaron muchas veces más y ya de noche, con pocas fuerzas y tras huir del ataque nadando, decidimos descansar un poco y quedamos flotando sin más qué hacer.

Pasó un buen tiempo desde que paramos de nadar. El turno de la desazón y el viacrucis interno me había llegado a mí con un ataque de hipotermia, tanto desgaste calórico por los intentos de llegar a la isla hacía mella en mi organismo. Sucumbí.

Sentía que me clavaban cientos de alfileres por mi cuerpo y estos calaban hasta hacerme tiritar los huesos. No podía coordinar movimientos ni hablar.

Hernán empezó a frotarme el pecho para darme calor. Era un acto de solidaridad y amor que me despertó del letargo. Su compañía me hizo entrar en conciencia y pude controlar la respiración y superar el trance.

Con todo el agotamiento, buscamos posiciones para descansar e intentar darnos calor. Nos tomamos de las manos para comunicarnos e hicimos una lista de situaciones a las cuales nos íbamos a enfrentar: hipotermia, cansancio, deshidratación, inanición y hasta demencia.

Entrada la madrugada pensamos en estrategias para evitar la deshidratación. Ya teníamos una mala experiencia intentando tomar agua lluvia, así que llegamos a la conclusión de que si íbamos a beber algo sería orines.

-Tocará directamente del pipí- bromeó Hernán.

-No, hermano, cómo se le ocurre, yo todavía no estoy tan mal- rematé en medio de una conversación amena para pasar el tiempo.

En todo caso, cualquier idea sería útil para nuestra supervivencia.Día dos: contemplar el suicidio

Al amanecer decidimos amarrar los implementos a nuestros cuerpos. Los computadores de buceo, las boyas marcadoras de superficie, el cuchillo, todo lo que nos pertenecía. En parte, flotábamos gracias a algunos de ellos, como las aletas.

Pese a que no sentíamos hambre, quizá por la adrenalina, sí sufríamos por el frío, el cansancio y, por supuesto, la sed.

Aunque los dos teníamos la meta clara de seguir nadando para acercarnos a Malpelo y sobrevivir, siempre se piensa en posibilidades en dado caso de que no resistiéramos más: contemplamos el suicidio.

-¡Llegará el momento en el cual vamos a sufrir!- apuntó Hernán.

-Y si nos matamos, ¿cómo hacemos?- pregunté.


Planteamos situaciones extremas como cortarnos la aorta, pero la muerte sería muy lenta; si es la femoral, habría mucha sangre y nos comerían los tiburones y ni por el putas querríamos eso.

También pensamos en hundirnos, con la narcosis ahogarnos y morir sin darnos cuenta; sin embargo, concluimos que esta opción generaría un dolor insuperable para las familias de no hallar nuestros cuerpos.

Pese a estas conversaciones álgidas, la conclusión era que juntos sobreviviríamos. Incluso rematábamos con momentos de chistes de Hernán, quien siempre buscaba algún momento para reír.

-Si me muero primero, cómame, córteme un pedazo del culo- dijo Hernán para bajar la tensión.

Era triste que, pese a nadar y nadar ya no veíamos a Malpelo, escasamente se apreciaba la punta del faro. Hice un protocolo mental para despedirme de mi familia, recé a Dios, caía desesperanzado y luego volvía a fortalecerme.

El paisaje para este momento no era sino agua y nubes. Metía en ocasiones la cabeza al agua para ver peces -vi marlins gigantes- mientras un frío inimaginable me consumía.


Dentro de su diversidad marina también es posible encontrar seis especies de peces endémicos asociados a coral y fondo rocoso.

En la noche había neblina y no se veía absolutamente nada. La esperanza era que amaneciera, pues sabíamos que a oscuras nadie nos iba a buscar.

Un ataque de medusas en la noche nos sorprendió y de nuevo el dolor en la cara nos hizo buscar soluciones. Así que envolvimos las boyas marcadoras en el cuello y la cara. También nos amarramos en posición fetal para intentar descansar algo. Nunca dormimos, no se podía.

En la madrugada uno no puede ver a los animales, pero se sienten, se escuchan y hasta llegan a empujar. El único ruego para esos momentos es que no se les dé por probarnos.

Para buscar calor no había nada mejor que los orines, cuando uno de los dos lo hacía era una bendición, pues el fluido nos calentaba, así fuera solo unos segundos.El rescate o la muerte

En la madrugada del viernes 2 de septiembre, mi pensamiento recurrente era que este día nos iban a rescatar. Pasé toda la mañana esperando que algo apareciera e infructuosamente agudizaba mis sentidos para percibir si llegaba el momento esperado.

Nuestra conversación giró en cómo estaría Peter, Carlos y Erika, en ella pensábamos mucho por su bebé. Orábamos para que la encontrarán.

La mañana fue pasando y, por primera vez en los tres días naufragando, salió el sol. Era un anhelo, pensamos que nos iba a calentar; sin embargo, lo que produjo fue más dolor.

Al estar dentro del agua, el sol no nos calentaba los cuerpos, pero si nuestros rostros que se quemaron con rapidez. También la piel se nos empezaba a reventar y los labios se resquebrajaban. Era un sufrimiento que se hacía insoportable.

Lo reconfortante era que las aguas no estaban tan agitadas y que quizá el buen clima servía para un posible rescate. Era hoy o nunca.

También nos adaptamos a la situación de sol, usamos una aleta de espaldar y la otra como gorra para cubrirnos. Durante todo el tiempo teníamos la careta puesta, de lo contrario el agua se nos metía en la nariz o también podríamos ahogarnos con rapidez.

La tarde llegó. Nos recostamos en nuestra posición fetal y ahí ocurrió.

-Hernán, escuchas el motor- le dije.

-Míralo, allá hay un punto. Allá viene- contestó.


Este es el avión patrullero marítimo de los Estados Unidos que divisó a Hernán y a Jorge Iván.

Era revitalizante ver algo diferente al agua y las nubes. Empezamos a hacer señas, desesperados, nos agitábamos. Estirábamos las manos como si con ellas alcanzáramos al avión que pasó cerca de nosotros. Luego la aeronave siguió de largo.

Pasamos de la euforia al desespero. Ver ese avión significaba felicidad, pero su desaparición fugaz en el cielo y notar cómo se convertía en un pequeño punto nos volcaba a una profunda tristeza.

Antes de que pasaran unos cinco minutos, de nuevo el avión pasó sobre nuestras cabezas, se inclinó y nos hicieron un saludo. Pero la aeronave volvió a irse. Eso nos desconcertaba.

Rompimos en llanto. La tercera vez que pasó el avión, un hombre se asomó por una puerta trasera y nos saludó. Esa fue nuestra felicidad más grande.


Jorge Morales y Hernán Rodríguez flotando en aguas de Malpelo.

Los minutos siguientes transcurrieron viendo al avión haciendo círculos en el cielo. Luego lanzaron un papel lejos de nosotros.

-Hernán, esta situación y ellos tirando papelitos- dije con preocupación.

Lo cierto es que cuando ese papel cayó al agua, de inmediato empezó a salir humo. Una maniobra para marcar el blanco, estrategia de la cual me enteré después y que sirve como señal para quienes están navegando en barco o lancha.

Otro paquete fue lanzado desde esa aeronave de guardacostas de Estados Unidos. Un paracaídas lo dirigió y al caer se trataba de una balsa. Hernán la agarró primero y la haló hacia nosotros.

Nos quitamos el tanque y todas las cosas. Nos subimos en la balsa, estaba al revés, pero no nos importó, estábamos agotados.

Nos quitamos los botines, teníamos los pies inflamados. Esperamos unos minutos y llegó el zodiac.

-Este 2 de septiembre del 2016 es su nueva fecha de nacimiento- nos dijeron los hombres de la Armada Nacional cuando nos vieron a las 5 de la tarde de ese día a 39 millas náuticas (72 kilómetros) de Malpelo.


Momento del rescate de Hernán y Jorge Iván.

La siguiente frase que nos dijeron fue que estadísticamente no había posibilidades de hallarnos con vida.

Durante todo el padecimiento, nosotros nos aferramos mucho a Dios. Fuimos fuertes cuando nuestras vidas pendían de un hilo, esa era la única opción que teníamos mientras esperábamos el milagro de un rescate que, por fin, se daba.

No habría sobrevivido en el mar si hubiese estado solo. Hernán fue un gran compañero, la vida nos puso juntos y los dos teníamos claro que nuestro objetivo era la supervivencia. Siempre nos apoyamos y nuestros cuerpos aguantaron con sus pocas reservas calóricas los embates del mar.

Pienso que también sobreviví por mi vida resiliente. De niño, tras la muerte de mi papá, me tocó luchar la vida e incluso vender arepas en la calle. Resistí a un accidente de tránsito en el cual volé por un abismo y supe perseverar cuando mi hija, apenas con dos años, fue operada a corazón abierto.Tras el rescate

Los rescatistas de la Armada Nacional nos llevaron al buque Punta Ardita. Allí nos hidrataron, nos dieron calmantes y medicamentos. También comimos algo, pero tragar era un suplicio, dolía mucho pasar los alimentos.

Preguntamos por nuestros compañeros. Conocimos que a Peter lo habían rescatado un día antes, él había logrado llegar cerca de la roca. El paradero de Carlos y Erika seguía siendo desconocido.


Hernán y Jorge Iván en el buque Punta Ardita momentos después del rescate.

El día siguiente no paré de llorar, pensaba en mis compañeros perdidos. En el buque, con más calma, veía en el espejo como mi piel se estaba pudriendo y los huecos que salieron en mis pies por nadar.

Eran sentimientos encontrados, miraba al mar y me daba duro saber que allí estaban mis compañeros. También pensé que sufrí mucho y que pude perder la vida.

A los tres días del rescate hablé con mis hijos y supe la lucha de mi hermana, Sabrina, quien fue la que buscó ayuda de la Armada Nacional para el rescate.


Hernán (de camisa blanca) y Jorge Iván (camiseta azul) fueron retornados a Buenaventura. En sus rostros y cuellos se ven las marcas dejadas por las medusas.

Llegué a Medellín luego de otros tres días, en mi casa me enteré por las noticias del hallazgo del cuerpo de Erika.
La confirmación de su deceso fue un golpe muy duro. Todavía se me caen las lágrimas al recordarlo, pero en mi cabeza pedía a Dios para que encontraran los cuerpos y le diera descanso a la familia. Aún anhelo lo mismo para Carlos, nuestro guía, cuyo cuerpo nunca apareció.

La recuperación fue de unos tres meses. Me dolía cepillarme la boca y solo pude volverme a calzar zapatos dos meses después, pues tenía llagas en ellos. Durante ese tiempo pasaba casi todos los días con gripa debido a que mis defensas eran bajísimas.

Todos naufragamos permanentemente de una u otra manera, la vida nos da señas de cambio y apenas estoy volviendo

Era impactante ver todo mi cuerpo lleno de granos con pus. Aunque la verdadera crisis fue mental, no podía dormir ni concentrarme. Entre en modo supervivencia, así que pensaba que todo lo que ocurría a mi alrededor era peligroso.

No olvidaré a los hombres de la Armada Nacional que me rescataron ni a mis compañeros, en especial a Hernán.

Nunca he pensado las razones por las cuales Hernán, Peter y yo sobrevivimos mientras que Erika y Carlos, no. Lo que sí se me venía a la cabeza es por qué me pasó a mí, pregunta que ya cambié y ahora la formulo: ¿para qué me pasó eso?

Tuve que recuperar mi empresa de textiles y he cambiado mi estilo de vida. Sé que mi empresa es para generar felicidad, más que para ganar dinero.

Todos naufragamos permanentemente de una u otra manera, la vida nos da señas de cambio y apenas estoy volviendo.*Esta historia fue publicada originalmente el 11 de agosto de 2020.

lunes, 12 de julio de 2021

Una explicación alternativa a la expansión acelerada del universo



Científicos colombianos proponen a la energía oscura como una opción viable para entender el cosmos.

El modelo estandar es el conjunto de leyes físicas que rigen al universo y la mejor receta que tenemos para entenderlo.

Dentro de este modelo, una de las mayores certezas de los cosmólogos -los científicos dedicados a entender el origen y evolución del universo a gran escala-, está el hecho de que el universo se expande de manera cada vez más rápida.

A esta conclusión, denominada expansión acelerada del universo, los cosmólogos llegaron luego de observar que un tipo de supernovas conocidas como Ia se veían más tenues de lo que esperaba.

Para justificar esta explicación, los cosmólogos han incluido dentro de las ecuaciones del modelo estándar la denominada constante cosmológica, una especie de ‘comodín’ que sirve para explicar cómo es posible que cuerpos como las galaxias se repelan entre sí, como si entre ellas existiera una fuerza opuesta a la gravedad.

Ahora, un estudio adelantado por investigadores colombianos ofrece una explicación a la expansión acelerada del universo con la cual se puede prescindir de la constante cosmológica. El estudio fue liderado por Luz Ángela García, PhD en astrofísica e investigadora de la Universidad ECCI.

García explica que el modelo basado en la constante cosmológica resulta inconveniente porque, como lo dice su nombre, su energía permanece constante, inalterada, aún en medio de la permanente evolución del cosmos, y "no podemos explicar de donde proviene dicha energía".

“Nuestro objetivo era encontrar una alternativa que diera cuenta de este cambio”, asegura García, quien trabajó con los profesores Leonardo Castañeda y Juan Manuel Tejeiro, de la Universidad Nacional.

Ellos estudiaron tres conjuntos de datos: la distancia entre supernovas (explosiones de estrellas cuya emisión de luz da una idea de la distancia que las separa), la radiación de fondo de microondas (descrita por los científicos como la luz fósil de Big Bang, pues fue la primera que se emitió en el origen del universo) y la distribución a gran escala de las galaxias.

Luego de someter sus datos a varios modelos matemáticos, los investigadores encontraron que es posible dar cuenta de la expansión acelerada del universo en la época actual, ya no a partir de la constante cosmológica, sino de una sustancia enigmática que fascina a los científicos: la energía oscura.

Se trata de un ingrediente que aún no ha sido detectado observacionalmente, pero que, se cree, puede representar el 70 por ciento de todo cuanto existe. Su principal característica es que se comporta de manera opuesta a la gravedad, no atrayendo, sino repeliendo los cuerpos.

“Según nuestra propuesta, la energía oscura puede evolucionar en el tiempo y tener un rol más activo en la dinámica cósmica, sin romper con los eventos y principios cosmológicos, que están bien establecidos", aseguró la experta.

De acuerdo con García, su trabajo, publicado en la revista New Astronomy, no es el primer modelo cosmológico que propone a la energía oscura como alternativa a la constante cosmológica. De hecho, dice, “existen varios de estos modelos que ofrecen diferentes atributos y descripciones matemáticas”.

“Lo relevante de nuestro proyecto es que nos muestra una nueva gama de posibilidades para la exploración y estudio de la energía oscura”, señala la científica. García añade que son muchas las preguntas que se abren ahora, y que su objetivo será responderlas.

“Queremos saber si nuestro modelo es válido en otras edades del universo, si es aplicable a diferentes escenarios y detecciones astronómicas y, en últimas, si es equivalente a la constante cosmológica.

domingo, 11 de julio de 2021

Maple Bear le apunta a abrir 10 colegios en el país bajo el modelo de franquicias

El costo para inaugurar un plantel de esta red canadiense está sobre US$350.000, y esperan llegar a ciudades como Bogotá, Medellín, Cali y Bucaramanga

De acuerdo con los últimos resultados de la prueba Saber 11 2020, de los cinco mejores colegios del país tres corresponden a enseñanza bilingüe, lo anterior, sin duda, ratifica el interés de muchos padres de elegir planteles de este perfil para sus hijos.

En busca de suplir esas necesidades en el mercado, enfocadas en una segunda lengua a costos más accesibles, la red de colegios canadienses Maple Bear, que pertenece al Grupo SEB, espera abrir 10 colegios en los próximos tres años en Colombia bajo la modalidad de franquicia , que tiene un costo de US$350.000.


De esta manera, la compañía espera llegar a tener entre 2.000 y 3.000 estudiantes.

La red de colegios ha manifestado que estima para 2025 consolidar entre 100 y 110 planteles en la América Latina y poco más de 20.000 alumnos distribuidos entre Argentina, Colombia, Guatemala, México, Perú, Panamá y Paraguay.

Mateo Cuadras, director de expansión internacional de Maple Bear Latinoamérica, explicó que, con base en estudios que han realizado se han dado cuenta de la clara demanda de este tipo de enseñanza en la región, y en especial en países como Colombia, por lo que esperan llegar a varias ciudades principales.

“En Bogotá sabemos que hay una oferta escasa de educación internacional y de educación bilingüe. Por eso en la capital de Colombia buscamos contar con más de un colegio. Así mismo, esperamos abrir espacios en Medellín, Cali, Bucaramanga, y Barranquilla. También estamos analizando otro tipo de ciudades como Cartagena, Valledupar y Pereira”, expresó Cuadras.

En cuanto a la metodología de estudio, el ejecutivo explicó que los colegios de la red Maple Bear manejan un modelo de enseñanza que replica 100% la educación que se imparte en escuelas públicas de Canadá y se educa a los estudiantes bajo tres pilares fundamentales que son: el bilingüismo, la adaptación del currículo de estudio canadiense a los países donde está el colegio, además de potencializar la capacidad de los estudiantes a través de estimular la curiosidad.

“Esta es una metodología que se enfoca en el aprendizaje de los alumnos. Por eso vemos cómo es importante potencializar la lectura. La formación de los profesores a través de entrenamientos impartidos por profesores canadienses también es importante. En cuanto a las aulas, son salones que cuentan con diferentes centros de aprendizaje con varios recursos que ayudan a la educación de los menores”, resaltó.

Para abrir un colegio Maple Bear, si bien una persona requiere de cerca de US$350.000, se deberá tener en cuenta la ubicación geográfica y otra serie de factores.

En el proceso, la empresa apoya a los franquiciados con la selección de la ubicación, el análisis socioeconómico de la zona, análisis arquitectónico, licencias y permisos. Igualmente, realiza el reclutamiento, seguimiento y capacitación continua del equipo de docentes, y se encarga de las evaluaciones periódicas de calidad por parte de expertos de Canadá.

sábado, 10 de julio de 2021


'Soy doctora en matemáticas y no sé dividir con tres cifras'
Esto pinta algo o no

La matemática Clara Grima habla sobre la belleza de la matemática y los peligros de ser "anumérico".

Clara Grima recuerda el momento exacto en que decidió ya no solo investigar y ser docente universitaria de matemáticas, sino también hacer divulgación científica.

Era 2011 y su hijo pequeño, Ventura, que entonces tenía 6 años, le preguntó qué era el símbolo que tenía en su camiseta: "¿Eso es una mesa o una portería de fútbol?".

No era ni una cosa ni la otra. Se trataba de un número: pi.

La conversación terminó con Ventura concluyendo que "el infinito es un invento de los matemáticos para cuando se cansan de contar".

"Lo bonito de la matemática es pensar, es hacer una cosa que las máquinas no saben hacer", dice Grima a BBC Mundo.

Desde aquel entonces, la española no solo se dedica a escribir investigaciones, sino también libros de divulgación para niños y adultos.

Su último libro, "¡Que las matemáticas te acompañen!" (Ariel, 2018), muestra una variedad de situaciones cotidianas donde es posible encontrar las matemáticas, desde las vacunas hasta Facebook.

Antes del Hay Festival Cartagena 2020, Grima habló con BBC Mundo sobre las matemáticas como un juego cuyas reglas a veces se inventan y a veces aparecen en los lugares más inesperados.

En "¡Qué las matemáticas te acompañen!" dices (y demuestras) que las matemáticas son un juego, que solo hay que "aprender las reglas y jugar". ¿Por qué crees que esta noción lúdica no es la más extendida?

Por mucho que me duela, debo admitir que la matemática sigue teniendo esa leyenda negra o esa mala fama que no le corresponde.

Soy investigadora y profesora universitaria desde 1995 y empecé a divulgar a partir de 2011, cuando por culpa o gracias a mis hijos -depende de cuán cansada esté, cuál expresión uso- empecé a hablar de matemáticas con niños.

Así conocí niños de 5 o 6 años que me decían: "A mí no me gusta la matemática". Y yo siempre respondo lo mismo digo: "¿Tú qué sabes si no lo has probado?".

Entonces me di cuenta que los niños aprenden a odiar las matemáticas antes de estudiar matemáticas, porque está en el ambiente, en la sociedad. Es simpático o guay jactarse o presumir de que no se dominan las matemáticas. Lo hacen algunos famosos en la televisión o algunos youtubers. Y esto va calando.

Pero este no es tu caso: a ti siempre te gustaron las matemáticas y hasta dices que te han "moldeado"...

Pues sí, las matemáticas me encantan desde pequeñita. Para mí eran un juego, eran como un misterio. Me acuerdo perfectamente de la primera vez que resolví una ecuación del tipo x+2=4. Recuerdo estar dando gritos en la clase: "¡Qué chulo! ¡He descubierto algo!".

Pero la verdad es que quería ser filósofa porque también me gusta escribir. Y fue precisamente mi profesor de filosofía el que me dijo que estudiara matemáticas porque lo hacía bien y porque conseguiría trabajo antes. Y desgraciadamente tenía toda la razón.

Lo primero que me dieron las matemáticas fueron una cura de humildad: mi orgullo y mi ego fueron arrastrados por el fango de una manera cruel, porque no era tan buena como creía.

Luego descubrí la belleza de las matemáticas y aprendí una forma diferente de ver el mundo que me apasionó.


Ya a nivel personal, haciendo mi tesis doctoral, descubrí los grafos y al cabo de poco tiempo me casé con mi director de tesis. Luego nacieron mis hijos y ellos mismos, con su conversación, volvieron a darle un vuelco a mi vida y empecé la divulgación.

Ahora doy charlas y tengo libros, con lo cual aquello de ser escritora a lo que en algún sentido renuncié por ser matemática ha vuelto de otra manera. No escribo novelas ni ensayos filosóficos, pero escribo sobre matemáticas.

Como investigadora trabajas en teoría de grafos, algo que recién mencionabas y que aparece en muchos capítulos de "¡Qué las matemáticas te acompañen!". ¿Podrías explicar de forma simple qué es un grafo?

Un grafo es un objeto matemático que está formado por dos conjuntos de elementos: un conjunto son unos puntitos, que pueden representar personas u objetos, y el otro conjunto son rayitas o líneas, que unen a estos puntitos de dos en dos.

Podemos poner como ejemplo Facebook. Pues cada uno de los usuarios seríamos un puntito y dos usuarios que somos amigos en Facebook apareceríamos unidos con una rayita. Eso nos daría un dibujo: eso es un grafo.

En este caso es un grafo muy grande, porque Facebook tiene en el orden de 1.600 millones de usuarios.

Pero hay grafos más chicos. Por ejemplo, en la charla en (el Hay de) Cartagena, pues cada punto sería cada una de las personas que asisten y unimos con aristas, o sea con rayitas, a dos de ellos si se conocían de antes. Esto te da una imagen de las relaciones sociales en ese lugar.

En el libro usas los grafos para explicar desde la serie Game of Thrones hasta campañas de vacunación. ¿Por qué, si es una teoría tan útil, no se suele enseñar en la educación básica?

Yo me llegué a hacer licenciada en matemáticas sin haber visto un grafo.

Pero cuando empecé a divulgar, muy rápidamente empecé a hablar de grafos un poco por defecto profesional. Y me di cuenta que es una herramienta muy útil, que permite modelar problemas de matemáticas de una forma muy eficiente y resolverlos sin los tediosos cálculos a los que obligan a los niños a hacer todo el rato.

Lo que prima en la resolución de problemas usando grafos es el instinto y la lógica, no la capacidad para hacer cálculos que, francamente, es aburrido y no sirve para nada. Lo hace mejor la máquina.

Para mí, la lavadora lava mejor, un coche va a una velocidad que yo no voy a conseguir nunca y una calculadora, calcula mucho más rápido que yo.

Soy doctora en matemáticas y no sé dividir con tres cifras ni sé calcular a mano una raíz cuadrada.

Lo bonito de la matemática es pensar, es hacer una cosa que las máquinas no saben hacer.

También sueles usar el concepto de persona"anumérica". ¿Qué significa y qué peligros conlleva?

El término "anumerismo" lo acuñó Douglas Hofstadter y lo popularizó John Allen Paulos con su libro "El hombre anumérico"

Lo que viene a significar es un analfabetismo de conceptos básicos en matemáticas -no saber calcular un tanto por ciento, no entender una gráfica-, lo que tiene varios niveles de peligro.

Por ejemplo, en España es tradición comprar la Lotería de Navidad. Hay gente que hace colas para comprar en una determinado lugar porque creen que tienen más probabilidad de ganar ahí. Ese es un claro caso de anumerismo que se da todos los años en este país. Pero bueno, solo pierdes tu tiempo, no afecta tu vida.

Pero si te engañan en el banco con algún producto financiero o para acceder a algún puesto de trabajo, la cosa ya empieza a ser más grave.

https://twitter.com/ClaraGrima/status/1003596977899261952

¿Y qué hay del "espejismo de la mayoría" y cómo esto se ha agravado con las redes sociales?

Es una forma un poco más compleja de ser anumérico.

Es lo que llaman "la burbuja", que sucede cuando estás en un cierto grupo social, que puede ser real o virtual. Lo que pasa es que ahora las redes sociales tienen una potencia de transmisión de noticias falsas o de bulos muy grande.

El problema es que es muy difícil salir de este anumerismo y nos afecta a todos. Salir de tu burbuja de información es un esfuerzo personal que tenemos que hacer cada uno.

Y luego, por otra parte, lo que nos enseña es que tenemos que ser empáticos. Es muy fácil decir que un grupo al que tú no pertenece toma decisiones estúpidas. Pero es que a lo mejor no lo ven porque están afectados por ese espejismo.

Por eso la mejor forma de conseguir que una persona salga de su burbuja es con datos y con la empatía.

¿Cuál es la pregunta matemática que más te hacen los niños?

Cuando digo que soy investigadora de matemáticas, me dicen: "Pero, ¿qué tienes que descubrir? Si ya se sabe que 2+2 es 4". Pues, muchas cosas, porque la matemática va más allá de la aritmética.

De hecho, falta cada vez más porque cada descubrimiento que se hace es como una puerta que se abre y lo que hay detrás de la puerta es un pasillo enorme, casi infinito, lleno de puertas cerradas, que hay que volver a abrir, porque el conocimiento se expande.


¿Eso quiere decir que, en el debate de si las matemáticas se descubren o se inventan, apoyas la primera opción?

Yo creo que mitad y mitad.

Hay una parte de la matemática que evidentemente es fruto de la abstracción de la mente humana y que es inventada.

Por ejemplo, cogemos unos números, unos grafos o unas funciones, que son los objetos con los que vamos a jugar, y nos inventamos las reglas del juego, que puede ser cómo se forman, cómo se multiplican, cómo se dividen... Luego, a partir de esas reglas y jugando, descubrimos qué propiedades tiene.

Y luego hay una parte de las matemáticas que las descubrimos mirando a la naturaleza.

Antes se pensaba que la única geometría que existía era la geometría euclídea, la que vemos todos, donde dos rectas paralelas no se van a cortar nunca. Pues un día alguien pensó: "Vamos a inventar una geometría que no sea así, donde las rectas paralelas, al final, se encuentran".

Lo que parecía en aquel momento una abstracción de la mente y una matemática inventada, luego llega (Albert) Einstein y nos explica el espacio tiempo, y resulta ser que el universo viene a dar la razón: era una matemática que estaba escondida.

De hecho, en 2018 fui parte de un grupo de investigación que descubrimos una forma geométrica que no se había visto, que se llama escutoide, y que tuvo un impacto brutal.

Fue una colaboración con biólogos celulares, que nos llamaron porque querían saber cómo describir la forma que tenían las células de los epitelios, que son los tejidos que recubren todos nuestros órganos. Cuando empezamos a describir la forma geométrica, nos dimos cuenta que era una forma que no existía.

Yo me puedo inventar una forma geométrica, pero esta no lo hemos inventado sino que, mirando a las células epiteliales, hemos descubierto que era una forma que se repite en todas ellas.

Así que muchas veces nos inventamos las matemáticas y otras veces las descubrimos mirando el universo. O, en este caso particular, mirando las glándulas salivares de la mosca de la fruta, que es menos romántico.

Este artículo es parte de la versión digital del Hay Festival Cartagena, un encuentro de escritores y pensadores que se realiza en esa ciudad colombiana entre el 30 de enero y el 2 de febrero de 2020.

viernes, 9 de julio de 2021



El misterio de cuán grande es realmente nuestro universo
Esto pinta algo o no

La respuesta podría revelar si todo lo que creíamos saber sobre física está bien o está mal.

Comencemos diciendo que el universo es grande. Se estima que si miramos en cualquier dirección sus regiones visibles más lejanas se encuentran a unos 46.000 millones de años luz de distancia.

Eso supone tener un diámetro de 540 sextillones de millas (o 54 seguido de 22 ceros).

Pero esta es realmente nuestra mejor suposición: nadie sabe exactamente qué tan grande es realmente el universo.

Esto se debe a que solo podemos ver hasta donde la luz (o más exactamente la radiación de microondas arrojada por el Big Bang) ha viajado desde su origen.

Desde que el universo comenzó a existir hace aproximadamente 13.800 millones de años, se ha estado expandiendo.

Pero debido a que tampoco conocemos su edad precisa, resulta complicado precisar hasta qué punto se extiende más allá de los límites de lo que podemos ver.

Sin embargo, una propiedad que los astrónomos han intentado utilizar para resolver esto es un número conocido como la constante de Hubble.

"Es una medida de qué tan rápido se está expandiendo el universo en el momento actual", dice Wendy Freedman, astrofísica de la Universidad de Chicago que ha pasado su carrera midiéndolo.

"La constante de Hubble establece la escala del universo, tanto su tamaño como su edad", añade.

Hay que pensar en el universo como un globo que se infla.

Como puntos en su superficie, a medida que las estrellas y las galaxias se separan entre sí más rápidamente, mayor es la distancia entre ellas.

Desde nuestra perspectiva, esto significa es que cuanto más lejos está una galaxia de nosotros, más rápido se aleja.

Desafortunadamente, cuanto más miden los astrónomos este número, más parece desafiar las predicciones basadas en nuestra comprensión del universo.

¿Qué está mal?

Un método para medirlo directamente nos da un cierto valor, mientras que otra medición, que se basa en nuestra comprensión de otros parámetros sobre el universo, dice algo diferente.

O las medidas son incorrectas o hay algo defectuoso en la forma en que pensamos que funciona nuestro universo.

Pero los científicos creen ahora que están más cerca de encontrar una respuesta en gran parte gracias a nuevos experimentos y observaciones destinadas a descubrir exactamente qué es realmente la constante de Hubble.

"A lo que nos enfrentamos como cosmólogos es un desafío de ingeniería: ¿cómo medimos esta cantidad de la manera más precisa y exacta posible?", dice Rachael Beaton, astrónoma que trabaja en la Universidad de Princeton.

Para enfrentar este desafío, dice, no solo se requiere conseguir los datos para medir, sino también verificar las mediciones de tantas formas como sea posible.

"Desde mi perspectiva como científico, esto es más como armar un rompecabezas que estar dentro de un misterio al estilo de Agatha Christie".

La primera medición de la constante de Hubble realizada en 1929 por el astrónomo que le da nombre, Edwin Hubble, la colocó en 500 km por segundo por megaparsec (km/s/Mpc).

El pársec o parsec es una unidad de longitud utilizada en astronomía equivalente a 3,26 millones de años luz.

Ese valor calculado por el científico significa que por cada megaparsec más lejos de la Tierra que miras, las galaxias que ves se alejan de nosotros 500 km/s más rápido que las que están a un megaparsec más cerca.

Más de un siglo después de la primera estimación de Hubble de la tasa de expansión cósmica, ese número se ha revisado a la baja una y otra vez.

Las estimaciones de hoy lo sitúan entre 67 y 74 km/s/Mpc.

Parte del problema es que la constante de Hubble puede ser diferente dependiendo de cómo se mida.Tira y afloja cósmico

La mayoría de las descripciones de la discrepancia de la constante de Hubble dicen que hay dos formas de medir su valor.

Una observa qué tan rápido se alejan de nosotros las galaxias cercanas, mientras que la segunda usa el fondo cósmico de microondas (CMB), la primera luz que escapó después del Big Bang.

Todavía hoy podemos ver esta luz, pero debido a que las partes distantes del universo se alejan de nosotros, la luz se ha estirado en ondas de radio.

Estas señales de radio, descubiertas por primera vez en la década de 1960 por accidente, nos dan la idea más temprana posible de cómo era el universo.

Dos fuerzas en competencia, la atracción de la gravedad y el empuje hacia afuera de la radiación, jugaron un tira y afloja cósmico con el universo en su infancia.

Esto creó perturbaciones que aún se pueden ver dentro del fondo cósmico de microondas como pequeñas diferencias de temperatura.

Usando estas perturbaciones, es posible medir qué tan rápido se expandía el universo poco después del Big Bang y esto se puede aplicar al Modelo Estándar de Cosmología para deducir la tasa de expansión actual.

Este Modelo Estándar es una de las mejores explicaciones que tenemos de cómo comenzó el Universo, de qué está hecho y qué vemos a nuestro alrededor hoy.

Pero hay un problema.Divergencias

Cuando los astrónomos intentan medir la constante de Hubble observando cómo las galaxias cercanas se alejan de nosotros, obtienen una cifra diferente.

"Si el modelo [estándar] es correcto, entonces los dos valores, lo que mides hoy localmente y el valor que infieres de las primeras observaciones estarían en línea", dice Freedman. "Y no lo hacen".

Cuando el satélite Planck de la Agencia Espacial Europea (ESA) midió las discrepancias en el CMB, primero en 2014 y luego nuevamente en 2018, el valor que obtuvo para la constante de Hubble es de 67,4 km/s/Mpc.

Pero esto es alrededor de un 9% menos que el valor que los astrónomos como Freedman han medido al observar galaxias cercanas.

Otras mediciones del CMB en 2020 utilizando el Telescopio de Cosmología de Atacama se correlacionaron con los datos del satélite Planck.

"Esto ayuda a descartar que hubo un problema sistemático con un par de fuentes de Planck", dice Beaton.

Si las mediciones de CMB eran correctas, solo dejaba dos posibilidades: o las técnicas que utilizan luz de galaxias cercanas estaban apagadas o el Modelo Estándar de Cosmología debe cambiarse.Estrella cefeida

La técnica utilizada por Freedman y sus colegas aprovecha un tipo específico de estrella llamada cefeida variable.

Descubiertas hace unos 100 años por una astrónoma llamada Henrietta Leavitt, estas estrellas cambian su brillo, haciéndolo cada vez más débil y luego más brillante durante días o semanas.

Leavitt descubrió que cuanto más brillante es la estrella, más tiempo tarda en iluminarse, luego se atenúa y luego vuelve a brillar.

Ahora, los astrónomos pueden saber exactamente qué tan brillante es realmente una estrella al estudiar estos pulsos de brillo.

Al medir qué tan brillante nos parece en la Tierra y saber que la luz se atenúa en función de la distancia, proporciona una forma precisa de medir la distancia a las estrellas.

Freedman y su equipo fueron los primeros en usar variables cefeidas en galaxias vecinas a la nuestra para medir la constante de Hubble utilizando datos del telescopio espacial Hubble.

En 2001, lo midieron a 72 km/s/Mpc.

Desde entonces, el valor del estudio de las galaxias locales ha rondado el mismo punto.

Utilizando el mismo tipo de estrellas, otro equipo utilizó el telescopio espacial Hubble en 2019 para llegar a una cifra de 74 km/s/Mpc.

Luego, solo unos meses después, otro grupo de astrofísicos utilizó una técnica diferente que involucraba la luz proveniente de los cuásares para obtener un valor de 73 km/s/Mpc.

Si estas medidas son correctas, entonces se puede pensar que el universo podría crecer más rápido de lo que permiten las teorías del Modelo Estándar de Cosmología.

Podría significar que este modelo, y con él nuestro mejor intento de describir la naturaleza fundamental del universo, debe actualizarse.

En la actualidad, la respuesta no es segura, pero si resulta ser así, las implicaciones podrían ser profundas.

"Podría indicarnos que a nuestro modelo estándar le falta algo", dice Freedman.

"Todavía no sabemos la razón por la que esto está sucediendo, pero es una oportunidad para avanzar hacía un descubrimiento".Dos consecuencias principales

Si el Modelo Estándar está equivocado, una de las primera cosas que podría significar es que nuestros modelos de de que está compuesto el universo, las cantidades relativas de materia bariónica o "normal", materia oscura, energía oscura y radiación, no son del todo correctas.

Además, si el universo se expande realmente más rápido de lo que pensamos, podría ser mucho más joven que los 13.800 millones de años que actualmente se piensa que tiene.

Una explicación alternativa para la discrepancia es que la parte del universo en la que vivimos es de alguna manera diferente o especial en comparación con el resto del universo, y esa diferencia está distorsionando las medidas.

"Está lejos de ser una analogía perfecta, pero puedes pensar en cómo se modifica la velocidad o la aceleración de tu automóvil si subes o bajas una colina, incluso si estás aplicando la misma presión al pedal del acelerador", dice Beaton.

"Creo que es poco probable que sea la causa última de la discrepancia en la constante de Hubble que vemos, pero también creo que es importante no ignorar el trabajo realizado en esos resultados".

Pero los astrónomos creen que están más cerca de determinar cuál es la constante de Hubble y cuál de las medidas es correcta.

"Lo que es emocionante es que creo que realmente resolveremos esto en un plazo bastante corto, ya sea en un año, dos o tres", dice Freedman.

"Hay tantas cosas que se avecinan en el futuro y que van a mejorar la precisión con la que podemos hacer estas mediciones que creo que llegaremos al fondo de esto".

Una de esas cosas es el observatorio espacial Gaia de la ESA, que se lanzó en 2013 y ha estado midiendo las posiciones de alrededor de 1.000 millones de estrellas con un alto grado de precisión.

Los científicos están lo usando para calcular las distancias a las estrellas con una técnica llamada paralaje.

A medida que este observatorio espacial orbita alrededor del Sol, su punto de vista en el espacio cambia, al igual que si cierras un ojo y miras un objeto, y luego miras con el otro ojo, el objeto parece estar en un lugar ligeramente diferente.Telescopio espacial James Webb

Entonces, al estudiar objetos en diferentes épocas del año durante su órbita, Gaia permitirá a los científicos calcular con precisión qué tan rápido se alejan las estrellas de nuestro propio Sistema Solar.

Otra instalación que ayudará a responder la pregunta de cuál es el valor de la constante de Hubble es el telescopio espacial James Webb, que se lanzará a fines de 2021.

Al estudiar las longitudes de onda infrarrojas, permitirá mejores mediciones que no serán oscurecidas por el polvo que hay entre nosotros y las estrellas.

Sin embargo, si descubren que la diferencia en la constante de Hubble persiste, será el momento de desarrollar una nueva física.

Y aunque se han ofrecido muchas teorías para explicar la diferencia, nada encaja del todo con lo que vemos a nuestro alrededor.

Cada teoría potencial tiene una desventaja.

Por ejemplo, podría ser que hubiera otro tipo de radiación en el universo temprano, pero hemos medido el CMB con tanta precisión que no parece probable.

Otra opción es que la energía oscura podría cambiar con el tiempo.

"Parecía una prometedora línea de estudio a seguir, pero ahora existen otras limitaciones sobre cuánto podría cambiar la energía oscura en función del tiempo", dice Freedman.

"Tendría que hacerlo de una manera realmente artificial y eso no parece muy prometedor".

Una alternativa es que había energía oscura presente en el universo temprano que simplemente desapareció, pero no hay una razón obvia por la que haría esto.

Todo esto ha obligado a los científicos a lanzar nuevas ideas que podrían explicar lo que está sucediendo.

"La gente está trabajando muy duro y es emocionante", agrega Freedman.

"El hecho de que nadie se haya dado cuenta de cuál es [la explicación] todavía no significa que no surgirá una buena idea", dice.

Después de todo, dependiendo de lo que revelen estos nuevos telescopios, Beaton y Freedman podrían encontrarse en medio de un misterio digno de una novela de Agatha Christie.

*Abigail Beall es periodista científica independiente y autora de "El arte de la astronomía urbana".


jueves, 8 de julio de 2021

Cherie Pridham, la mujer que rompió las barreras del ciclismo mundial


Por primera vez, una dama es directora técnica de un equipo World Tour. Ella habló con EL TIEMPO.

Las mujeres en el ciclismo ganan cada vez más terreno. En un deporte en el que los hombres son mayoría ellas se abren camino, algo que a estas alturas de la vida no es mirado como algo extraño; al contrario, esa lucha de igualdad ha sido respaldada en todo el planeta.

En el ciclismo varias han sido las mujeres que se han destacado: Alfonsina Strada fue la primera dama en competir contra los hombres, lo hizo en el Giro de Italia y en el Giro de Lombardía.

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Y si vemos la historia colombiana, María Luisa Calle ha podido obtener grandes victorias y también se ha visto frente a frente con los varones.

Cherie Pridham es una de esas mujeres que ayudan a la causa y este año se ha convertido en la primera dama en formar parte de un grupo de directores técnicos de una escuadra del World Tour, la máxima categoría, tras llegar al Israel Start-Up Nation.

Pridham nació el 22 de mayo de 1971. Es británica y siempre quiso dedicarse al ciclismo. Fue profesional durante un tiempo, pero no obtuvo triunfos importantes. Tantas horas de entrenamiento, preparación y competencia le enseñaron que lo mejor era transmitir esos conocimientos, ayudarles a los jóvenes.

Lo importante es reconocer que no debe haber una diferencia si en estos trabajos hay mujeres u hombres

“No me gusta verme como la única mujer entrenadora dentro de un equipo de ciclismo del World Tour, pero bueno, sí lo soy. El trato hacia mí es el mismo que el de mis colegas, sin importar que sea mujer. Lo importante es reconocer que no debe haber una diferencia si en estos trabajos hay mujeres u hombres”, le contó Pridham a EL TIEMPO.

Durante 15 años montó en bicicleta, compitió, pero en el 2006 fue atropellada por un vehículo, nunca se supo quién ocasionó el accidente y se retiró.

Pridham dio un buen paso cinco años después. Optó por formar su propio equipo, el Raleigh, en el que también fue su directora y orientó a varias figuras que llegaron a ser campeones mundiales, pero eso se acabó, su carrera como DT fue rápida, casi que a 100 kilómetros por otra logró subir como la espuma y tuvo que despedirse de su escuadra.

“Desde que fui ciclista soñé con tener mi propio equipo. Tuve que terminar mi carrera muy temprano y ahí comencé a preparar jóvenes y tener el equipo femenino. Intenté crear mi equipo y mi representación de ciclistas, pero hemos tenido muchos problemas para poder realizarlo”, contó.

Sabe de su responsabilidad, pero no le da miedo. Las capacidades que ha demostrado a través de sus años le dan esa fortaleza para asumir el cargo. Tampoco le huye a la responsabilidad y entiende que si bien está rodeada de hombres tiene todas las capacidades para desempeñar de la mejor manera su labor y entiende que por ser la primera mujer DT los ojos del mundo estarán encima.

Chris Froome


“Llegar al Israel es un gran paso para cualquier persona que sueña con estar en una gran estructura en el ciclismo mundial. Siento una responsabilidad, sí, sí la tengo, porque todos los días me llegan mensajes de mujeres en los que me dicen “bien hecho”, “felicitaciones”, “amamos tu trabajo y cómo te esmeras por hacerlo bien”. Entonces hay que trabajar por ellas y mostrar esas habilidades que podemos tener las mujeres en este deporte”, declaró.

Y agregó: “Uno debe hacer el trabajo de la manera más sencilla y normal, sin pensar en ese tipo de barreras que puedan existir entre hombres y mujeres. Siempre habrá responsabilidades en las que algunos se cuestionarán si una mujer las puede hacer, pero yo no pienso en que soy muy y por eso no podría hacerlo. Dentro del ciclismo es lo mismo para ti como para mí, así seas tú hombre o yo mujer”.

Dirigir al mejor del mundo

Cherie Pridham llegó al Israel, un equipo que este año contará con el mejor ciclista del mundo del último tiempo: su compatriota, Chris Froome, algo que para ella es fascinante, que la llena de grandes retos. Estar al lado de Froome no tiene nombre.

Admira su talento, el poder que tiene como ciclista, respeta sus victorias y cree que con la unión familiar de grupo los objetivos se cumplirán. No ha estado con él en una concentración.

El cuatro veces campeón del Tour de Francia estaba en California (EE. UU.), mientras los demás integrantes del Israel se reunían a comienzos de este año en España, pero ya ha tenido la ocasión de trabajar con los planes de él.

“Es una gran oportunidad tenerlo de cerca. Es especial, pero no es diferente a ninguno de nosotros o de los otros ciclistas. Siempre está atento a escuchar recomendaciones y a intercambiar conceptos. Se le entrega su programa especial de entrenamiento, lo recibe de gran manera y lo disfruta”, precisó Pridham, quien señaló que primero está el trabajo, el cumplir los objetivos, que enorgullecerse por laborar con él.

Para ella, Froome es un campeón, un superdotado y con un ciclista de este calibre siempre hay que mantener la opción abierta de victorias.

Cherie Pridham

Conoce a fondo lo del accidente, sus secuelas, lo que le ha costado recuperarse, pero es clara al contar que no se puede descartar y que con un buen trabajo puede conseguir sus metas.

Pridham le admira la perseverancia, que nunca se ha dado por vencido y entiende que desde el equipo lo están ayudando a reencontrarse con su mejor forma y todos los trabajos que se han hecho con él lo que buscan es que recupere la confianza, su condición y si eso se consigue no tiene dudas de que Froome pedaleará hacia su gran meta.

“Me ha causado gran impresión. Tiene una gran disposición para entrenar y aprender. No solo es que por su nombre ya todo lo sepa, sino que siempre se va adaptando a diferentes conocimientos que va recibiendo. Él sabe, además, cómo debemos entrenar, lo que debemos dormir, el trabajo nutricional. Eso es algo esencial para los jóvenes corredores que tenemos en nuestro equipo y que sueñan con ser como Froome”, precisó.
Egan y Nairo

Los colombianos

Pero su labor en el Israel no es solo estar pendiente de sus ciclistas, delinear los entrenamientos, ir a las careras a trazar las estrategias, conocer los recorridos, analizar las opciones de triunfos de acuerdo con las condiciones de sus dirigidos, también lo es observar a los rivales, saber en qué están y cómo vencerlos.

Y dos de los que ella tiene señalados en su computador son los colombianos Egan Bernal y Nairo Quintana, a quienes conoce de lejos, nunca los ha entrenado, pero de los que sabe el palmarés, sus debilidades y de sus fortalezas.

No tengo dudas de que Bernal volverá a su máximo nivel y recobrará esas cualidades que todos los conocimos desde antes que ganara el Tour

La lesión de Egan lo hizo sufrir mucho, pero es joven y en mi carrera he visto que los ciclistas colombianos tienen un gran talento. Siempre estoy atenta a sus corredores y los tengo en mi radar. No tengo dudas de que Bernal volverá a su máximo nivel y recobrará esas cualidades que todos los conocimos desde antes que ganara el Tour”, precisó sobre el pedalista de Cundinamarca.

“El hecho de que en su país se produzcan talentos importantes en el ciclismo no debe generar una presión por ganar de manera inmediata. Nairo está en un equipo de menor categoría, de menor presión, pero él es un ganador. No puedo decir qué puede ganar, pero sí aseguro que aún dará espectáculo”, comentó sobre el ciclista boyacense, que hace parte del Arkea Samsic.

Pridham es una persona que sabe su oficio y que Egan hace parte de ese grupo de jóvenes ciclistas que vienen arrasando con las victorias, al lado de Tadej Pogacar y Remco Evenepoel, por eso es una persona indicada para hablar sobre si con sus edades puede responder a las exigencias de reeditar esas victorias.
Egan Bernal, ciclista colombiano.

Asegura que cada ciclista es diferente y que hay que entender que el deporte es dinámico y van apareciendo nuevos retos. Gente como Egan, Pogacar y Eevenepoel tienen talento, marcan la diferencia y lo importante para ella es conocer muy bien a cada grupo e intentar que ellos se integren y adapten a todo, porque hay un equipo detrás que los apoya y les da su vida por ellos. En esa labor en busca de que puedan volver a ganar un agrande, Pridham dice que en esa labor hay que contar con el trabajo de los médicos, los nutricionistas, el psicólogo, una labor multifuncional e interdisciplinaria.

Cherie Pridham es clara, no se pone con cuentos. Es mujer, lo sabe, pero eso no quiere decir que sea inferior a los demás. Se ha sentido como en casa en el Israel. Cuenta que se pone presión porque quiere ayudar a su grupo a ganar una gran carrera.