viernes, 1 de diciembre de 2017

La estudiante que recibió beca de $1 millón de dólares por error

Una joven sudafricana empezó a llevar una vida de ciertos lujos y excesos cuando recibió en su cuenta de ahorros la desproporcionada suma. Ahora deberá reponer el dinero que se utilizó para gastarlo en sus ‘cositas’.

 

Todos hemos soñado con llevar la vida de un millonario. De usar la tarjeta débito para comprar lo que nos antoje y ver que pese a pasarla por el datáfono varias veces, tenemos lo suficiente para continuar gastando. Y claro, no está mal que con el salario tengamos el impulso de comprarnos un reloj, de ir a un restaurante delicioso y elegante, de tomarnos con los amigos algunos tragos en una fiesta. Para nada, si uno está trabajando pues se trata de vivir los momentos y recordar las cosas gratas el resto de la vida. 

Pero es gratificante cuando se trabajar para ganarse ese dinero. Ahora póngase a pensar ¿Qué haría usted con un millón de dólares en su cuenta de banco? Imagínese esa suma (algo más de $2.937 millones de saldo) y qué haría usted con ella. Lo honesto sería devolverla, pero ¿Está seguro que usted tiene la suficiente voluntad como para hacerlo? Imagínese que eso le hubiera pasado a sus 20 años. 

Precisamente, esto fue lo que ocurrió en Sudáfrica con una estudiante universitaria que por error recibió la suma de $1,08 millones de dólares, equivalentes a 14 millones de rands (moneda local), y a $3.171.960.000. La víctima de esta equivocación, Sibongile Mani, fue descubierta este miércoles 30 de agosto de 2017 por la Universidad Walter Sisulu, informó la prensa local.


En los extractos de la joven aparecieron los elevados gastos; al parecer utilizó unos $400.000 rands en solo 5 meses, equivalentes a unos $30.000 dólares o $90 millones de pesos. La estudiante los usó para ‘algunos gustos y cositas’ como por ejemplo joyas, relojes lujosos y otros objetos. Todo quedó descubierto cuando ella decidió publicar un extracto de su tarjeta por redes sociales como Facebook.


La universidad comenzó a sospechar después que “algunos estudiantes se quejaran de que la joven había comenzado a mantener un estilo de vida muy opulento”, indicó el portavoz del ‘alma mater’, Yonela Tukwayo. 

En su defensa, la afectada publicó en su cuenta de Facebook que reconocía los hechos, aunque afirmó que el dinero le llegó el 1 de junio y que lo devolvió el 13 de agosto, con excepción de lo que había gastado. Tukwayo responsabilizó del error a la empresa que se encarga de gestionar y transferir a los universitarios los fondos del Plan Nacional de Ayuda Financiera a los Estudiantes (Nsfas, siglas en inglés), que suelen cubrir los gastos de libros y comida. Para usar el dinero de esta ayuda, los estudiantes reciben una tarjeta llamada Intellicard y firman un convenio que determina los posibles usos de los fondos.


El tema no terminará ahí, pues la alumna de Walter Sisulu ahora está bajo la lupa de su institución, quien exigirá a la estudiante que devuelva el dinero que ha gastado hasta ahora: "La estudiante será responsable de pagar hasta el último céntimo que ha gastado, aunque tenga que hacerlo durante 20 años". 

La institución docente abrió una investigación para esclarecer por qué la estudiante no informó que había recibido la millonaria suma en su cuenta, aunque ella asegura haber informado del asunto "inmediatamente".

jueves, 30 de noviembre de 2017

La millenial que Harvard cree que es 'la próxima Einstein'

Sabrina Gonzalez Paterski es catalogada por la Universidad de Harvard como la nueva promesa del mundo de la ciencia. Construyó su propio avión a los 14 años, logró la nota más alta del MIT y Actualmente cursa su doctorado en gravedad cuántica.

 

Sabrina González Paterski es una joven de 23 años que a los nueve comenzó a construir su propio avión, diseñado por ella misma, y que tuvo la posibilidad de volar cuando cumplió 14. Sobre voló el lago Michigan, a su edad, ha logrado proezas que nadie más ha podido alcanzar.

Esta experiencia la documentó en un video que ella misma publicó en Youtube.

Es hija de una cubana y un estadounidense y la Universidad de Harvard, institución en donde estudia actualmente su doctorado centrado en la gravedad cuántica, la considera “la próxima Einstein”. En Harvard tiene toda la libertad académica para desarrollar su investigación, sin intervención de ningún personal del claustro.

En 2010 se graduó de la academia de Matemáticas y Ciencias de Illinois, luego entró a una de las universidades más prestigiosas del mundo: El Instituto Tecnológico de Massachusetts, lugar en donde obtuvo la nota más alta de toda la historia de esa universidad.

Curiosamente, González tuvo que esperar unos meses para ser aceptada en el MIT, una situación por la que también pasaron sus profesores Aleen Haggerty y Earll Murman. Pero en cuanto vieron el vídeo en los que la joven explicaba cómo había construido su avión casero dijeron: “Nuestras bocas quedaron abiertas después de ver esos vídeos. Su potencial está fuera de las listas“.

Pero una vez en la universidad apareció su fascinación por la física: los agujeros negros, el espacio y el tiempo. Por eso los expertos académicos la comparan con científicos como Eistein o Hawking.

Se dedica a estudiar la "gravedad cuántica", en donde intenta comprender el vínculo entre la gravedad dentro del contexto de la física cuántica. Un descubrimiento que cambiará la forma en que los seres humanos entienden el universo.

miércoles, 29 de noviembre de 2017

Falta incluir a los jóvenes en las estrategias empresariales

La presidenta de la Cámara de Comercio de Cartagena habla de las estrategias que deben seguir las compañías para incluir a las nuevas generaciones.


María Claudia Páez, presidenta de la Cámara de Comercio de Cartagena.

Una de las principales incógnitas alrededor de los jóvenes es cómo incluirlos en discusiones de interés nacional y aún más cómo involucrarlos en estrategias empresariales. 

Para María Claudia Páez, presidenta de la Cámara de Comercio de Cartagena, al país le falta generar más políticas que piensen más en este segmento poblacional. En el marco de esa necesidad, la directiva habló sobre el segundo foro ‘Jóvenes protagonistas del Cambio’ en la Ciudad Amurallada. 

¿Qué busca la Cámara con este foro?

Una de las cosas que resaltamos es el hecho de que si queremos realmente tener un futuro promisorio hoy, tenemos que generar una estrategia de acompañamiento a los jóvenes. Lo que me he venido dando cuenta es que no hay una política desde el sector empresarial que esté enfocada en generar una masa crítica y un desarrollo que le sirva a ellos. Falta incluirlos más en esas estrategias. 

En la Cámara hemos organizado un plan para apuntarle a este segmento poblacional. Por eso, organizamos el primer foro y funcionó muy bien. De hecho, planeamos un evento para 600 personas para los dos días y llegaron 3.500. 

¿Qué esperan para la segunda versión?
Esta vez esperamos más de 1.500 muchachos y lo haremos a través de inscripciones. 
Además, vamos a montar toda una estrategia para mostrarles que sí valió la pena y que los estamos apoyando. Para esta versión solo hemos puesto el aviso en internet y ya tenemos 400 inscritos.

¿Cómo va a ser la agenda?

Es de gente joven que quiere trabajar pero también y emprender, pero también de los viejos, que también tienen algo que contarles: y es que para lograr lo que uno quiere debe, además, hacer cosas que no le gustan tanto; que hay que ser perseverantes. 

¿Cómo está el panorama de los jóvenes cartageneros?
Difícil. En diciembre aplicamos una encuesta, la hizo Cifras & Conceptos, con 30 preguntas. Una de las ellas nos marcó y nos mostró que hay que trabajar más. Allí, se les preguntó que en diez años dónde se ven viviendo y el 72% dijo que fuera de Cartagena. 
No están viendo en la ciudad una oportunidad de crecimiento, ni de trabajo. Y es que cuando alguien se queda porque quiere, su relación con el territorio es distinta a cuando se quedan porque les toca.

Entonces, ¿los que trabajan en Cartagena son de otros lugares?

Un ejemplo es que en la ciudad hay, más o menos, unos 5.000 tenderos y el 90% de ellos o son antioqueños o santadereanos. Es decir, no ven las oportunidades.

La ciudad está creciendo mucho y eso se ve en las cifras. Fue una de las que tuvo un mayor aumento del PIB al cierre del 2016, con un 11%. Además, entre el 2015 y el 2017, en la ciudad se crearon 7.000 nuevas habitaciones de hotel. 

Aún así, nadie se queda...

No ven la oportunidad. Si uno revisa en el sector petroquímico, la mayoría de directivos de esa industria los salen a buscar a otras partes. En el turismo son pocos los gerentes de hotel que son cartageneros. Todo esto para decir que hay que pensar en los jóvenes para que vean un mejor futuro; queremos darles las herramientas. 

¿Cuál es la estrategia con las empresas para que incluyan a los jóvenes?

Estamos en un proceso de construcción. Ya hay varias empresas que están comenzando a pensar y están asistiendo a estos eventos para entender un poco de los jóvenes. 

Aquí tendremos que participar muchos, y, a través de la Cámara de Comercio de Cartagena, seguiremos insistiendo en el tema de los emprendimientos estratégicos. De hecho, uno de los que participa, es Andrés Barreto, que fue quien creó Grooveshark, una de las plataformas de música con más seguidores y solo tiene 28 años.

martes, 28 de noviembre de 2017

Que vivan las groserías!


No hay cosa más dolorosa que golpearse el pie y justo en el dedo chiquito, que ejerce como el GPS del cuerpo, va siempre buscando la punta de los muebles, la pata de la cama u otros objetos y nos obliga a lanzar toda clase de groserías : jue Q”·$%&/()=, que dolor tan x”!ñ´`+.-*.

Cuando somos niños, nos enseñan que decir groserías es mala educación, es inapropiado, sin embargo son la mejor catarsis para el dolor, liberan las emociones y nos permiten desahogarnos. Entonces concluimos que su represión es una concepción social instalada a lo largo del tiempo. Las groserías son más poderosas en la medida que les otorgamos ese poder. Si no se las censurara, serian palabras comunes y corrientes.

En un experimento, Richard Stephens, profesor de Psicología de la Universidad Keele y Harvard, les pidió a varias personas que le dieran una lista de palabras, incluidas groserías, que dirían si se pegaran en el dedo con un martillo. Después les pidió que hicieran una lista de palabras neutrales para describir una silla (por ejemplo, de madera). A continuación, les pidió que sumergieran una mano en agua helada tanto tiempo como aguantaran mientras repetían una palabra de alguna de las listas: una grosería o una palabra neutral. Los participantes que repitieron una grosería pudieron mantener la mano sumergida en el agua helada por casi 50 por ciento más tiempo que aquellos que repitieron una palabra neutral. No solo eso, decir groserías también hizo que los participantes no sintieran el dolor tan intensamente. Los investigadores concluyeron que decir groserías tiene el efecto de reducir la sensibilidad al dolor. ¿Quién diría que unas cuantas letras podrían ser tan calmantes? Así mismo, se probó que tienen más resistencia los deportistas que dicen groserías y obtienen mayor rendimiento. Ayuda de igual forma a lidiar con el estrés. Decir groserías es un mecanismo de defensa, es un método de supervivencia, es el gran amigo y compañero en los largos tiempos que permanecemos en el automóvil, debería ser un requisito para sacar la licencia de conducción.

En situaciones sociales, las malas palabras sirven como un método conectivo. Cada generación tiene su propia jerga, que incluye obscenidades. Cuando usas ese lenguaje, es casi como una contraseña que te da acceso a la gente en la misma frecuencia. Hay palabras que ya hacen parte del vocabulario popular: llegué tarde al evento y quede como un… culo. Los jóvenes utilizan la palabra “marica”, en todas las situaciones: ¿qué hubo, marica?, en lugar de ¿qué hubo, hombre? No hay celebración de un gol o una falta en el fútbol, que no tenga groserías. Además, muchas dependen del contexto en el que se digan y cómo se digan. Miremos un par de ejemplos mexicanos .



Chingada
Una palabra que es parte del mexicano y que tiene diversos significados. Imaginemos qué sería del mexicano sin su palabra favorita para expresarse, está presente en un montón (“chingo”) de expresiones que se usan a diario. Este término es tan importante que diversos autores han dedicado páginas para su análisis. De acuerdo con la RAE, chingar quiere decir importunar o molestar y proviene del caló čingarár, pelear. Pero en México quiere decir mucho más. Se cree que el origen de la chingada se remonta a épocas prehispánicas y tiene una estrecha relación con el náhuatl. El académico y escritor Darío Rubio dijo que esta palabra tiene su origen en el náhuatl; del sustantivo xinachtli que quiere decir “semilla de hortaliza”, lo que sería la definición etimológica para la palabra chingaste. Después, Octavio Paz retomó la idea de Rubio y el origen de la palabra del náhuatl. El origen es incierto, pero de seguro que la chingada es un término que está íntimamente ligado a la cultura mexicana.

Pendejo
El origen de esta palabra viene del latín pectinículus. Pecten-inis que quiere decir pubis y culus pequeño. Entonces “pendejo”, ahora usado como una grosería, en realidad se refiere al vello del pubis. Originalmente y aún en algunos países, “pendejo” era empleado para referirse a los adolescentes que se sentían adultos. La RAE incluye tanto el significado de pelo que nace en el pubis e ingles, así como hombre tonto, cobarde y adolescente. Actualmente esta palabra es empleada en México para referirse a alguien poco inteligente. Mientras que en otros países de Latinoamérica puede hacer referencia a alguien joven o simple la expresión: no me crea tan pendejo o bobo. Entonces, las groserías son la gran demostración de nuestras frustraciones, dolores y alegrías, nos hacen más felices y honestos, así que a tomarse la vida más relajada y a gozar…que hij”·$%&/(.

lunes, 27 de noviembre de 2017

Ministros y secretarios de educación deben tener formación en gestión educativa

En educación no se conversa, se manda mediante normas o lineamientos y se pretende que todos obedezcan. 

Los gobiernos nacionales y territoriales no pueden seguir improvisando con quienes dirigen el sector educativo. Para empezar el Congreso Nacional está en mora de fijar mediante norma requisitos y condiciones para ser ministro o secretario de educación de entidad territorial certificada.

No se entiende cómo en Colombia, cualquier profesional sin formación específica o experiencia puede ser ministro o secretario de educación, en un sector que incide en la vida de la mayoría de los colombianos. De manera directa más del 50% de la población del país están vinculado con el sector educativo: estudiantes, padres de familia, docentes, funcionarios y proveedores de productos y servicios de las instituciones escolares. 

26 años después de expedida la constitución del 91 y las leyes que en los años noventa reglamentaron su desarrollo (ley 30 de 1992 y ley 115 de 1994, entre otras), el país en el año 2017 enfrenta nuevos desafíos, que en ese momento no eran relevantes. Por ejemplo, en el caso de la educación, el país duplicó la matrícula y los recursos del sector. 

Además, la educación pasó de tener un problema, el acceso, a por lo menos tres problemas: acceso, permanencia y calidad. Estos conforman un concepto más integral del derecho a la educación. Ya no se trata sólo de ofrecer o conseguir un cupo escolar, también es necesario considerar las políticas que respondan a cómo alcanzar que los estudiantes permanezcan hasta la educación superior (bienestar, felicidad del estudiante y valoración social de la educación) y la calidad de la educación. 

Quien dirija el Ministerio de Educación Nacional, MEN, debe considerar que está al frente de una entidad que determina cómo gastar el 15.5% del presupuesto nacional y que las decisiones de política educativa tienen incidencia directa en la vida de la población en edad escolar (5 a 21 años) 14.581.926 de niños, adolescentes y jóvenes para el año 2016 (DANE) y de otros sectores de la población. 

También, quien oriente el MEN ayuda a incidir de alguna forma en la matrícula, permanencia y calidad de la educación. En total en el año 2016 el país matriculó 12.442.052 estudiantes desde el preescolar hasta la educación superior. 10.047.618 estudiantes en educación preescolar, básica y media, de ellos 8.086.9871 en el sector oficial y 1.960.631 en el sector privado, el MEN tiene responsabilidad directa sobre el 80,5% del total de la matrícula en estos niveles educativos. Así mismo, la matrícula para la educación superior fue de 2.394.434 estudiantes, 1.194.697 en instituciones de educación superior oficiales y 1.199.737 estudiantes en privadas.

El ministro y los secretarios de educación tienen la responsabilidad, con otros sectores (políticas multisectoriales), de pensar y actuar para vincular al sistema educativo a los más de 2 millones de niños y jóvenes (5 a 21 años) que no asisten a una institución educativa; no es una tarea fácil, allí están quienes habitan en el sector rural y los más pobres del sector urbano. 

De otra parte, el Ministerio de Educación ha certificado 95 entidades territoriales (32 departamentos, 5 distritos y 58 municipios). Entidades que dirigen los secretarios de educación, quienes son responsables de administrar y operar la educación preescolar, básica y media. Ellos gastan 20.5 billones de pesos anuales que provienen del sistema general de participaciones, SGP, y más de 3 billones de recursos propios en el pago de nóminas y otros gastos que garantizan el funcionamiento del sistema educativo oficial. 

Las entidades certificadas, a través de los secretarios de educación son responsables del funcionamiento de los colegios y de las plantas de personal (seleccionan, nombran, encargan, trasladan y retiran) y de la nómina de los 314.947 docentes oficiales, más los 26.858 administrativos de los colegios oficiales financiados con el SGP. 

Otra responsabilidad de ministros y secretarios, quizás la más importante, es que ellos están obligados a tener, además de una gestión de excelencia, un liderazgo participativo y trasformador con quienes trabajan en el sector educativo, para lograrlo se requiere conocimiento y experiencia. Por ejemplo, un docente está muy poco dispuesto a escuchar a alguien que no conoce o improvisa un discurso sobre la educación, sin ningún criterio. Lo normal en Colombia es que los ministros y secretaros de educación tarden un año y más conociendo el sector, para luego empezar a tomar decisiones más o menos informadas.

He mencionado las grandísimas responsabilidades de ministros y secretarios de educación, sin proponer una sola función relacionada con los proyectos educativos institucionales, los planes de estudios, el currículo, los proyectos pedagógicos, la formación de docentes y las facultades de educación. 

En el año 2015 estudiaban 186.765 estudiantes programas de educación y se graduaron de pregrado 36.174. En los últimos 5 años Bogotá, el MEN y otras secretarías de educación han financiado más de 10.000 maestrías en educación, esta tendencia se mantendrá en los próximos años, los docentes para ascender ahora requieren de maestría. Por lo anterior, ahora es posible proponer que los ministros y los secretarios de educación deberían tener, por ley, formación en educación a nivel de maestría y experiencia relacionado con el sector educativo, de por lo menos 5 años. Para no continuar con la improvisación en la gestión del sector educativo. 

El próximo presidente de los colombianos debería reconocer que directivos, investigadores, docentes y el personal administrativo de la educación superior, media, básica y prescolar demandan un mínimo respeto de los gobiernos nacionales y territoriales en la designación de quienes dirijan el sector educativo, para hechos tan elementales como el simple dialogo entre actores, que hoy no existe. En educación no se conversa, se manda mediante normas o lineamientos y se pretende que todos obedezcan.

domingo, 26 de noviembre de 2017

10 consejos para prevenir el acoso de sus hijos en redes sociales

Un artículo publicado por el Externado reveló que en Colombia se reportan 24 casos de acoso sexual vía internet a menores por día y que se están multiplicando las plataformas para establecer contactos con extraños. Algunas medidas que puede tomar. 


Los padres tienen que estar conectados 

Para guiar la forma en que sus hijos se desenvuelven en el mundo digital, los padres de los niños, niñas y adolescentes tienen que conocer las herramientas que están a su disposición. Las principales plataformas como Facebook, Instagram, Twitter entre otras tienen controles de seguridad parental que pueden ser usados relativamente sencillamente por cualquier usuario digital. A través de estas se puede limitar el acceso de los niños a páginas maliciosas o bloquear contenidos peligrosos. El Mintic, estima en su guía de semana santa para padres que “solo de esta manera podremos conocer cuáles son los sitios web que frecuentan los niños y evitar a tiempo visitas y contacto en portales indebidos”. Pero para eso, los adultos tienen que aprender a manejar unas bases de informática necesarias para comprender el mundo digital.
Usar un lenguaje adecuado para el diálogo

En consonancia, hablar un mismo idioma es un primer paso fundamental para establecer un diálogo claro y sin rodeos con ellos. El investigador del Externado, Andrés Felipe Contreras detalla: “se les debe poner al tanto sobre la participación anónima o el uso de pseudónimos de gente que puede llegar a tener intenciones ocultas y maliciosas con ellos. Que el respeto a la privacidad, intimidad y buen nombre de terceras personas debe prevalecer, y que, en cualquier caso, frente a cualquier amenaza o posible riesgo detectado directamente por ellos, siempre contaran con un adulto para brindarles apoyo.” Al igual que con la educación sexual, la claridad en el diálogo con los niños es un paso fundamental para asegurar una navegación segura en la web.

Establecer horarios y tiempos de uso

El tiempo que los niños y adolescentes pasen conectados en sus dispositivos no puede ser ilimitado. Acrecienta el riesgo de tener contactos peligrosos y los “desconecta” de la realidad, según palabras del Sitio Web oficial del Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (Mintic). Por eso el establecimiento de horarios claros para el uso de la red es una buena manera de controlar sus relaciones con el mundo virtual y se puede aprovechar para establecer tiempo de convivencia necesario a la creación de lazos de confianza.

Minimizar el número de dispositivos disponibles y las redes sociales 

Entre mayor sea el número de dispositivos a los que tienen acceso los niños mayor será el riesgo de que los usen de forma inadecuada para su edad. Por eso, según explica Felipe Contreras. “tener un solo computador en el que los niños puedan consultar su red social (de escritorio y en la residencia del menor por ejemplo), permite a los responsables de su cuidado, centralizar la labor de control y facilitar la vigilancia sobre el contenido visto y compartido y las conversaciones en las que participe el niños.” Además de que la creación de diversas plataformas o mensajerías de diálogo que escapan a los controles que existen en las grandes redes sociales también es un factor de riesgo que se debe cuidar en permanencia.

Cuidar la información publicada

Las fotografías y los datos personales que comparten pueden ser un insumo para potenciales agresores. En teoría, en atención al al Children’s Online Privacy Protection Act (“COPPA”), las plataformas como Facebook no pueden almacenar información de personas menores de 13 años, pero es sencillo rodear esas barreras de seguridad con perfiles anónimos. Por eso, el Mintic recomienda cuidar los contenidos que pueden parecer inocentes pero que son un insumo para potenciales agresores. En su página dice:”no comparta imágenes de sus niños en situaciones que puedan ser sacadas de contexto. Muchos padres comparten en sus redes sociales fotos de sus hijos pequeños desnudos, mientras los bañan o disfrutan de unas vacaciones en clima cálido. Los pedófilos y abusadores buscan fotos que puedan utilizar en sus bases de imágenes”. Mientras que el Externado advierte que es mejor no evidenciar sus datos personales (colegio, lugar de residencia, edad) en la red.

Interactuar con el Estado y las entidades educativas que también tienen una responsabilidad

Aunque son los primeros llamados a garantizar la seguridad de sus hijos, los padres no están solo en esta tarea. De acuerdo con el memorándum de Montevideo firmado en 2009 por Colombia para garantizar la protección de niños en internet, las instituciones educativas y el Estado también tienen la obligación de participar en la generación de programas que disminuyan en su riesgo. Por eso los padres tienen que establecer un diálogo continuo con esas instituciones para generar una sinergia que provea una protección integral a sus hijos. Así, según Felipe Contreras, estos deben “fijar programas y políticas públicas en este sentido y proveer información más allá de lo sustancial y necesario, (además de) fortalecer las capacidades de los progenitores, sobre los eventuales riesgos a que se enfrentan los menores en Internet.”

Crear un perfil y asociarlo al de su hijo

A través de su perfil, los padres podrán enterarse de las principales actividades y comunicaciones de sus hijos sin necesidad de invadir continuamente su espacio. Además, permitirá a los padres revisar también el perfil de los amigos de los niños y verificar que se trate de personas reales con intenciones adecuadas.

Haga una lista de actividades no relacionadas con actividades informáticas

Según el Mintic, compartir tiempo de calidad por fuera de las redes sociales es una buena forma de crear lazos de confianza que faciliten la inclusión posterior de los padres en el mundo digital. En su portal, indica: “realicemos una lista de actividades en las que la tecnología no sea la protagonista: ir al parque, montar en bicicleta, salir a caminar, jugar juegos de mesa, entre otros. Esta es una muy buena opción para hacer otro tipo de planes y que compartamos tiempo de calidad con nuestros hijos.
Cuidar el paso de las redes a la realidad

En el intervalo en el que se conectan el mundo físico y el digital es cuando suceden los fenómenos más graves de acoso a niños. Por ello, es preciso tener en cuenta que además del monitoreo de las redes de los niños, los padres tienen que tratar de establecer quiénes son las personas que conocen a través de las plataformas digitales y acompañarlos en ese trayecto para asegurarse de que sean realmente sujetos con intenciones adecuadas.

10.¡ Denuncie!

El Externado indicia: “el código penal colombiano, modificado en lo pertinente por leyes como la 679 de 2001 (…) prevé, más allá de las consecuencias generales de la omisión de denuncia (artículo 441), un artículo dedicado especialmente a sancionar las personas que, teniendo conocimiento de actividades en las que participe un NNA que afecten su integridad personal y desarrollo sexual (verbigracia, pornografía en redes sociales) no hagan la respectiva denuncia. 

Con cada depredador sexual fuera de las calles y lejos de Internet, ofrecemos una red más segura a nuestros niños” asegura.

Para ello está a disposición de todos los colombianos la página del CAI virtual de la Policía en la que se pueden realizar todo tipo de denuncias relacionadas con agresiones en la web.

sábado, 25 de noviembre de 2017

Para salvar el sofá de las garras de su gato

Afilarse las uñas es un comportamiento natural de los felinos, hay que darles opciones para hacerlo. 


El gato puede ser dueño y señor del sofá mientras no lo rasguñe. Para eso están los rascaderos. 

Muchos dueños de gatos sufren porque a su mascota le encantó el sofá y lo tiene vuelto nada con sus rasguños. Consultamos con Paola Cardona, veterinaria especialista en felinos y etóloga sobre este comportamiento.

¿Por qué les gusta a los gatos rasguñar?

Es una forma de marcar territorio que les viene de suvida natural, silvestre, cuando rasguñaban los árboles para dejar señal visual y olfativa y así decirles a otros animales que ese era su espacio. En las almohadillas de sus patas tienen unas glándulas que producen feromonas, que dejan un olor como marca.

También lo hacen para afilar sus uñas y tenerlas en buen estado para trepar, defenderse o cazar. Y otra función muy importante es que así hacen un ejercicio de estiramiento de músculos, tendones y articulaciones que les permite liberar energía, los tranquiliza y genera bienestar. 

Si están rasguñando en exceso, es un signo de ansiedad, tensión o estrés. 

¿Por escogen un mueble en particular?

Eligen la mejor opción para expresar estos comportamientos. Ellos buscan algo firme, alto y con un superficie similar a ese árbol de su vida natural. Si sus dueños no les ofrecen una mejor opción, ellos eligen un mueble.

¿Cuál sería entonces una mejor opción? 

Algo que sea firme, con suficiente altura para que se pueda estirar hacia arriba y de un material que le guste al gato. Lo más común son los rascadores en cabuya, pero puede ser un tronco de madera natural. Debe haber uno apenas llegue el gato a la casa para que se acostumbre a él desde el principio. Si ya eligió un sofá, hacer un rascador y forrarlo con esa tela.

¿Cómo asegurarnos que lo usen?

Es clave la ubicación del rascadero: hay que ponerlo en sitios centrales de la casa, no escondidos. Si ya ha elegido un mueble, hay que ponerlo al lado de este. Si la casa es grande o de dos pisos, conviene tener varios rascadores en distintos puntos. También se puede estimular su uso consintiéndolo y jugando allí con él. Y si se quiere, se le puede untar hierba gatera, que es de la familia de la menta, porque le produce una sensación placentera, que los hace volver ahí.

¿Se le puede enseñar al gato a que no se arrime a los muebles? ¿Si se le regaña entiende? 

Como dije, hay que ofrecerle desde el principio otra opción con los rascadores. También se puede bloquear ese mueble que ha estado rondando tapándolo con una cobija, papel aluminio o cinta pegante gruesa puesta al revés, que se le pegue las patas y desestimular el comportamiento. No es conveniente regañarlo porque no entiende, para el gato rasguñar es algo natural, se sentirían atacados. 

¿Hay que cortarle las uñas?

Se pueden cortar un poco para evitar que se enreden con telas o cosas, o que nos rasguñen sin querer. Hay que hacerlo desde pequeños para que se acostumbren. Nunca hay que arrancarles las uñas, esto es considerado maltrato.


* Si el rascadero o tronco les permite además mirar por la ventana, mucho mejor. 

* Hay gatos que les gusta rasguñar superficies horizontales. En este caso hay que 
buscar un rascador horizontal, los más populares son en cartón.

* Si al gato le gusta rasguñar un tapete, haga un rascador y fórrelo con este material.
*Si tiene un mueble muy dañado por el gato y piensa retapizarlo, tenga en cuenta que materiales como la gamuza, el terciopelo o la microfibra no les llama mucho la atención. 

* Si el rascador está muy dañado, traiga el nuevo antes de botarlo y estimule su uso para que se acostumbre a usarlo antes de botar el otro.