miércoles, 22 de febrero de 2023

Cómo evitar que su perro sufra demencia y cómo identificarla


Sin importar la raza, los perros llegan a la madurez cuando cumplen alrededor un año y medio.

Mucho cuidado, pues puede afectar a perros de cualquier raza y que estén en una avanzada edad.

Sí, los perros también pueden sufrir demencia. Un artículo publicado por investigadores del Dog Aging Project (Proyecto de Envejecimiento Canino) explicaba que la demencia o la disfunción cognitiva canina, era un padecimiento muy común en caninos mayores de 10 años.

Especialmente entre los 12 y 15 años, edades en donde también es complicado poder reconocer los síntomas, sin confundirlos con tan sólo ‘cuestiones de la edad’.

Pero no se preocupe. Acá le traemos todo lo que debe saber para comprender un poco más esta enfermedad y cómo identificarla en su mascota.
¿Qué es la demencia en perros?


La mayoría de los perros que tienen demencia, son diagnosticados entre los 10 y 15 años. Pero también han habido casos donde se presenta a los 6 años de edad.

La organización explica que es un desorden cognitivo que suele causar síntomas similares al Alzheimer en los humanos. Esto sucede cuando el cerebro comienza a envejecer, afectando ciertos comportamientos, la memoria, el aprendizaje y la comprensión.

Según el estudio realizado, el 50 por ciento de los caninos suelen sufrir esta enfermedad después de los 12 años.

Esta enfermedad es crónica y degenerativa. Se produce por la disminución de neuronas y neurotransmisores, lo que produce una degeneración de las estructuras del sistema nervioso central.
¿Cuáles son los síntomas?


Dependiendo de la raza, los perros tiene entre 125 y 300 millones de glándulas olfativas. Estimularlas puede ayudar en la prevención de la demencia.

Según un artículo del departamento de Ciencias Clínicas Veterinarias, de la Universidad de Santiago de Compostelano en España, no existe un examen puntual que pueda diagnosticar la demencia en perros. Se pueden realizar pruebas y 'tests' que ayuden a su diagnóstico, pero a su vez es fundamental entender primero los síntomas. Esta por ejemplo, es una lista de de la sintomatología que puede llegar a presentar:

1. Desorientación: puede identificarlo si se queda mirando a un punto fijo mucho rato o si se pierde camino a casa.

2. Trastornos en la alimentación: es cuando su apetito cambia repentinamente o no quiere comer.

3. Apego inusual: significa que puede llegar a desarrollar un apego distinto al que normalmente ha tenido. Se puede identificar sí al estar lejos de usted, tiene temblores, llora o presenta síntomas de ansiedad.

4. Incontinencia.

5. Acicalamiento excesivo, disminuido o ausente.

6. Irritabilidad excesiva o desconocimiento de personas y lugares que frecuenta.

7. Desconocimiento de comandos familiares: esto sucede cuando no reconoce su nombre u órdenes que comúnmente se le dan.

Aún así, si su mascota presenta este tipo de síntomas, puede que no tenga demencia sino otro tipo de enfermedad. Por esto, es importante que un médico veterinario sea quien dé el diagnóstico final. Pero recuerde: si usted cree que su perro tiene demencia, acuda a su veterinario de confianza.

¿Qué pasaría en el caso de que su perro tuviera demencia?


Muchas de las dietas que recomiendan para un perro adulto, tienen vitaminas C y E.

Lo primero que el veterinario debe hacer, es determinar en qué estado está su mascota. La organización “Veterinarios por animales”, explica en su página web que desconocen las causas del porqué sucede esto, pero existen diferentes tratamientos que pueden ayudarlo a tener un mejor estilo de vida.

El primero es de carácter farmacológico. Lo más probable es que los medicamentos que le sean prescritos tengan efectos calmantes y que le ayuden en su día a día. De manera adicional, estos pueden incluir algunos suplementos como vitaminas C y E.

También hay casos en donde se recetan ácidos grasos, como lo es el Omega 3.

Por otro lado están las recomendaciones asociadas con la rutina. Generalmente están asociadas a un cambio en su alimentación y ejercicio.
¿Cómo se puede prevenir?


Esta enfermedad tiene un curso progresivo y no tiene cura.

Hay un dicho que dice que prevenir es vivir. Y en efecto, puede que su mascota tenga una mejor calidad de vida si es constantemente cuidado en todo sentido. “Veterinarios por animales” y “Proyecto de Envejecimiento Canino” también explican que no basta con una buena alimentación o ejercicio físico. El cerebro también debe estimularse, y es por ello que le traemos algunas recomendaciones para evitar este tipo de enfermedades.


Adicionalmente se recomienda un constante control médico.


1. Establezca rutinas para aumentar la seguridad del perro, haciendo su vida más predecible.

2. Evite exponer a sus mascotas a situaciones de gran estrés.

3. Sí pierde interés en la comida sin tener demencia, cambie a un alimento húmedo y con vitaminas.

4. Considere suplementos vitamínicos que ayuden a complementar su dieta.

Pero lo más importante es que estimule sus cinco sentidos. Esto es importante hacerlo antes de que padezcan demencia, pues ayudará a fortalecer sus neuronas. Puede hacerlo por medio de juegos que impliquen estímulos visuales, auditivos, olfativos y táctiles.

Por ejemplo, puede ayudarlo con algunos ejercicios de equilibrio, como lo es caminar en baldosas con diferentes texturas o caminar en espacios estrechos.

El estudio también invita a darle mucho cariño y a no abandonar a los perros mayores que siempre serán una gran compañía. Puede que cuidarlos sea un gran reto, pero siempre estarán agradecidos de lo que pueda hacer por ellos.