La tecnología al servicio de la educación está evolucionando constantemente, por lo que cada vez vemos nuevas aplicaciones para el aprendizaje. Las innovaciones tecnológicas nos proveen de muchas experiencias y posibilidades que eran solo deseos para las generaciones de estudiantes del pasado.
The Next Web hizo una lista de las cinco tendencias tecnológicas para la educación de 2017, entre las que están la realidad virtual y el uso de videojuegos. Hoy te contaremos sobre estas cinco aplicaciones para la educación. Además, te diremos cuáles son las dos tendencias en educación para los próximos años.
1.Realidad Virtual
No hay duda de que la realidad virtual se está colando en muchos aspectos cotidianos. Más allá de los videojuegos, esta tecnología está llegando fuertemente a la salud, al entrenamiento deportivo, a la publicidad y también en la educación. Básicamente, el VR nos brinda un elemento visual que hace el aprendizaje mucho más interactivo. Podemos ver sobre lo que estamos leyendo y esto representa un cambio impresionante.
¿Te acuerdas del capítulo de ‘Los Simpsons’ (de hace 24 años) en que Lisa se imagina una escuela con cascos de realidad virtual para aprender cómo fueron las guerras del pasado en clase de historia?
Bueno, esa ilusión futurista de Lisa ya es tan real como la presidencia de Donald Trump. Uno de los puntos a favor de esta herramienta es que ya hemos llegado a un punto en que tenemos múltiples soluciones económicas de VR, como el Google Cardboard, por ejemplo. La realidad virtual nos permite un aprendizaje más sútil y llamativo para las generaciones multimedia. Los libros y las fotos ya no son los únicos aliados de los maestros.
2. Educación móvil
En la vida tan agitada que tenemos es muy difícil adquirir nuevas habilidades y conocimientos. Nos pasamos el día entre el transporte público, nuestros lugares de estudio o trabajo, y la casa. Por esto, las aplicaciones móviles nos ayudan a aprender en el camino. Tenemos todo un universo de información a disposición de nuestros dedos (y de un buen plan de datos móviles).
Tenemos la posibilidad de decidir cuándo estudiar y cómo hacerlo. Además, no hay límites para este aprendizaje. Incluso los conocimientos prácticos, como aprender a programar o tomar fotos, pueden ser dictados con herramientas de transmisión en línea de pantallas de computador, por ejemplo.
3. Videojuegos para aprender
Agregar elementos de videojuegos a la educación tiene múltiples beneficios. Los estudiantes tienen la sensación de estar en ambiente progresivo y además ofrecen interactividad, incluso con materiales tangibles. No obstante, es un poco difícil encontrar ideas de juegos que sean adecuados. Es decir, debe existir un equilibrio entre la diversión y la practicidad de un videojuego.
Los videojuegos para la educación están creciendo en el mercado y sus márgenes de ingreso son cada vez mayores, según una investigación de M2 Research. Además, sus usos van más allá de los colegios o las universidades. Las empresas están adaptando videojuegos para capacitar a sus empleados, por ejemplo.
4. Lluvia de sitios de aprendizaje online
Cada vez hay más y más sitios que ofrecen cursos online y esto nos facilita la tarea de encontrar un programa que se adapte a nuestras necesidades. El aprendizaje online es una tendencia de hace varios años, pero hoy más de nunca, encontramos múltiples ofertas de distintas especialidades y también cursos dictados por prestigiosas universidades de todas partes del mundo.
La educación online está disponible 24/7 y es más conveniente que cualquier tipo de aprendizaje que jamás haya existido. Si no sabes el idioma de un curso, puedes ponerle subtítulos a las clases. Si no tienes tiempo en el día, puedes tomar tu clase por la noche, o enviar sus tareas en la mañana. Todo es online y la mayoría son gratis.
5. La creatividad es la madre de la educación
El movimiento conocido como ‘hacedores’, motiva a los estudiantes a construir y crear nuevas cosas basados en sus ideas y su creatividad. Y para eso existen plataformas como Arduino, donde las personas pueden crear circuitos eléctricos con libertad, en línea, y sin ningún conocimiento previo. Este tipos de herramientas hace del aprendizaje una labor más activa y además incentiva a los potenciales inventores a seguir sus sueños.
Lo que se viene
6. Inteligencia artificial
Sí, es predecible. La inteligencia artificial está en todo. Pero la educación es una de esas áreas en las que se suele ser más conservador a la hora de aplicar nuevas tecnologías. Es por eso que aún no vemos muy claro cómo usar la AI en aulas de clase, físicas o virtuales.
Pero la AI tiene mucho que ofrecer, según TeachThought. Algunos posibles usos, que seguramente veremos en los próximos años pueden incluir calificación automática de exámenes y tareas, adaptación personalizada de software educativos y tutorías personalizadas.
7. Implementación completa
Algunas tecnologías, como almacenamiento en la nube, tabletas para colegios, videojuegos educativos o asignaturas en línea; serán, en el futuro, la regla y no la excepción. Ya no serán tendencias extravagantes, sino la forma convencional de hacer las cosas.
¿Pasará como en Los Simpson que el director Skinner mandó a destruir todos los libros de papel ante un sistema de tabletas en la primaria de Springfield? Quizá no. Pero definitivamente vamos a ver a la tecnología como un viejo compañero de estudios, y no como un niño nuevo.