Los expertos explican de qué se trata, por qué se le llama así y por qué la gente se comporta de esa extraña manera bajo su influencia.
Siete jóvenes que consumieron sustancias alucinógenas convulsionaron producto de los efectos de la droga en Pereira.
En la noche del sábado, una parranda en Pereira se convirtió en un escenario digno de la serie The Walking Dead. Según el relato de algunos, el comportamiento de algunos jóvenes era parecido al de los zombis de la serie: se pegaban contra las paredes, se arrancaban el pelo, y caminaban con dificultad o quedaban paralizados. Según algunas denuncias les habrían echado en sus bebidas una droga zombi de la que se habla, no solo en Colombia, sino en otras partes de Estados Unidos y Europa. SEMANA consultó a Julián Quintero, un experto en el tema, para saber de qué se trata, y estas son las seis conclusiones más relevantes de dicha conversación.
1. No existe propiamente una droga zombi
Según el experto, no existe en el mundo ninguna sustancia psicoactiva cuyo uso o abuso esté relacionado con un comportamiento zombi. “Cuando se habla de droga zombi es el nombre que la cultura popular le da a unas manifestaciones del abuso de una droga que casi siempre están asociadas a convulsiones, situaciones de crisis y de pánico”, dice Quintero, director ejecutivo de Corporación ATS. El experto aclara que los zombis no existen, son producto de la ficción o hacen parte de algunas religiones, y por lo tanto no hay droga que genere ese tipo de condición, ni mucho menos canibalismo. Lo que sucede es que cuando se sobredosifican con algunas sustancias es posible que algunas personas tengan comportamientos similares a los zombis de la televisión.
2. Las sospechosas: Flakka, Spice y otros drogas sintéticas
Un grupo de drogas sintéticas, entre las cuales se encuentra la llamada Flakka, podría ser la causante de este comportamiento. Su nombre técnico es Alfa-PVP y es una sustancia en investigación. Es un estimulante del grupo químico de las catinonas, y viene de la familia de las fenelitelaminas. Según Quintero, se les conoce como ATS, por sus siglas en inglés, que traduce sustancia tipo anfetamínico. Spice, otra de estas drogas, es una marihuana sintética pero mucho más eficiente. Un cigarrillo de Spice es equivalente a 100 de marihuana.
3. El problema es la sobredosis
Se podría decir que esas dos drogas producen efectos superestimulantes que, cuando hay sobredosis, están asociados a convulsiones, comportamientos paranoides y a autolesiones. “No son tan diferentes. Cuando un estimulante, sea el que sea, tiene sobredosificiación, presenta estas manifestaciones”.
4. Es muy fácil sobredosificarse
Es tan mínima la cantidad normal para un adulto (5 a 10 miligramos) que llegar a la sobredosis con estas sustancias es muy fácil. Una dosis de 20 miligramos de PVP ya es alta. “Eso es la punta de una llave, pero en Colombia generalmente la gente para empezar se pone dos puntas de llave de cualquier polvo sin saber qué es”, dice Quintero. Cuenta que este es el país en donde más se consume por sesión, es decir aquí se abusa y una manera de hacerlo es cuando “una persona que usa cocaína hace las lineas más gruesas”, dice Quintero. Algunos las saben usar pero hay riesgo muy alto de que otros consuman más de lo debido.
5. Los síntomas de abuso son brutales
Estas son sustancias recreativas con efectos placenteros en dosis normales y muchos las usan bien. Producen euforia, excitación sexual y creatividad, entre otras cosas. Pero cuando hay sobredosis pueden generar disociación. “Es gente que tiene una desconexión entre el cuerpo y la mente, contracciones musculares muy fuertes y por eso se retuercen como se retuercen, sienten dolor o mucho calor y por eso se quieren quitar la ropa o intentan golpearse para contrarrestar esos efectos. Es propio de la reacción del cuerpo ante la sustancia como también de la reacción del individuo para contrarrestar esos efectos de la sustancia”.
6. Lo de Pereira no es Flakka
Según Quintero en Pereira aún no hay análisis de las muestras que consumieron los adolescentes. “Las autoridades dicen que podría ser LSD o 2CB por lo que dicen los jóvenes”, señala el experto.