Por curioso que parezca, ahí fue donde Ibrahim Jabary, un gurú de la tecnología, encontró una revolución en la educación, por lo que creó una empresa llamada Gamelearn, la cual le ofrece a otras compañías la opción de capacitar a su personal con juegos de video. Hasta el momento, más de 1.000 firmas lo han buscado para esto.
En Colombia, gracias a la mediación de Rincón Aguilar Consultores, Dinissan fue la primera en confiar en Jabary. A ellos les vendió la opción de formar en liderazgo y trabajo en equipo a los empleados de la ensambladora por medio de un juego parecido a ‘Los Sims’.
Como ellos, Jabary espera que más empresarios se unan en esta nueva era de capacitación, y para eso estará el 22 de marzo en el Hotel Rosales Plaza de Bogotá, explicando su modelo, el cual le explicó a LR.
¿Qué se puede aprender mientras se usa un videojuego?
Cualquier cosa se puede enseñar a través de un videojuego. Depende, evidentemente, del diseño del mismo. Hay videojuegos que se diseñan específicamente con el fin de educar en mente (serious games) y es ese diseño el que determina si son capaces o no de enseñar.
¿Cómo nace la teoría de aprender con videojuegos?
Los juegos son el principal instrumento educativo de los niños pequeños (y de los animales). Entendemos normas sociales, aprendemos a convivir y a tener valores como el compañerismo, la justicia o el respeto. Llevamos siglos aprendiendo a través del juego, no es una nueva teoría. Simplemente, ahora tenemos la posibilidad de diseñar y producir juegos mucho más sofisticados gracias a la tecnología. Por desgracia, a medida que crecemos, las estructuras educativas eliminan el juego como herramienta de aprendizaje y nos arrebatan la oportunidad de aprender mientras nos divertimos.
¿Qué decirles a quienes no creen posible este aprendizaje?
Durante los últimos años, se han realizado decenas de estudios científicos que han concluido que los videojuegos son una de las mejores herramientas de aprendizaje. Los resultados son contundentes: mejoran la concentración, incrementan el rendimiento, facilitan la absorción de contenidos y teorías, incrementan la retención de lo aprendido y potencian la motivación.
¿Qué profesionales pueden ser ejemplo de esta técnica?
Médicos cirujanos, pilotos de avión, militares, capitanes de barco y un largo etcétera. Llevan años utilizando simuladores y videojuegos para mejorar sus habilidades técnicas. Incluso, a nivel de habilidades personales. El caso de Gamelearn es un caso de éxito: con más de 1.000 empresas de todo el mundo, los resultados han sido los mejores en comparación con otros formatos de formación y capacitación. Un estudio reciente realizado por Traci Sitzmann identificó que gracias al videojuego, y en comparación con otras herramientas de aprendizaje, el alumno incrementa su autoconfianza 20%, mejora la retención de lo aprendido en 90%, eleva el conocimiento conceptual 11% e incrementa el número de tareas finalizadas 300%.
¿Qué títulos de juegos pueden servir de ejemplo?
Hay miles de videojuegos educativos. Con “Navieros”, Gamelearn enseña a negociar; con “Triskelion”, a gestionar el tiempo; con “Pacific”, a liderar equipos; y “2100” enseña servicio al cliente. Hay videojuegos para aprender a programar, decenas de ellos, como “CodeCombat”, por ejemplo. El propio “Minecraft”, que inicialmente no se diseñó con propósito pedagógico, se está utilizando para educar en escuelas y colegios.
¿Cuáles son las edades más apegadas a los videojuegos?
Al contrario de lo que pueda parecer, la edad media del videojugador en el mundo entero es de 37 años. Juegan tanto mujeres como hombres. Se empieza a jugar muy joven y de momento no sabemos cuándo se dejará de jugar, esperemos que no haya límite. Hoy en día, hasta existen videojuegos especialmente diseñados para tratar el Alzheimer.