Qué tener en cuenta a la hora de armar su equipo para jugar con más rendimiento.
La mayoría de los gamer profesionales ensamblan su propio PC, así logran mejor desempeño, rendimiento y hasta ahorros.
De acuerdo con recomendaciones de expertos de Kingston, se debe considerar el hardware y demás necesidades técnicas, definir cada pieza con base en su presupuesto, personalizar y, por último, conocer a fondo el funcionamiento del ensamble.
Ensamblando una PC Lo primero que se requiere es investigar y buscar los componentes específicos, para tener la información correcta. Ensamblar la PC exige varias horas de trabajo y otro tanto más, por si se presentan otros problemas.
Aunque hoy es más fácil, ya que se pueden hallar artículos útiles e información en línea para guiarse a través del proceso.
Luego sigue la etapa de personalización. Con una PC preensamblada, el usuario se limita a los diseños y piezas que están disponibles. Si ensambla su equipo elija qué partes quiere en el sistema y diseñar así la PC para sus necesidades. El ensamblaje brinda más libertad para ajustar la construcción según sus preferencias y gustos específicos.
Por ejemplo, la cantidad exacta de memoria que necesitará para jugar estará determinada por el tipo de juegos que practique y si necesita de otras aplicaciones al mismo tiempo.
Para una PC gamer de gama alta, la cantidad óptima de RAM recomendada es de 16GB. Si va a ejecutar muchos programas en segundo plano, es posible que deba subir a 32 o 64GB.
Una de las grandes ventajas de ensamblar su propia PC gamer es que se adapta a cualquier presupuesto y, de hecho, genera ahorros. “Al elegir tus propias piezas, puedes comparar costos para encontrar los mejores precios y evitar el pago de piezas caras que no necesitas”, sostiene Kingston.
Mejora el juego
Para mejorar la experiencia de juego se debe partir del sistema operativo, SSD, CPU, tarjeta gráfica, etc., ya que también tendrán un impacto en el juego. Busque opciones para configurar el almacenamiento y la memoria de su equipo.
