Aunque los hábitos de su animal de compañía sean hogareños, pueden adquirir infecciones a través de ectoparásitos como las pulgas
Las mascotas son para muchos hogares una pieza fundamental de la familia. Una muestra de ello es que desde el 2019, el Dane incluyó dentro de la medición de la canasta familiar a este segmento, pues el mercado de animales de compañía tuvo un crecimiento exponencial durante los últimos años.
Por esto es clave tener la lupa puesta en la salud de las mascotas, ya que que existen más de 200 enfermedades zoonóticas (transmisibles de animales a humanos) y 60% de las patologías infecciosas son transmitidas de esta manera, según explicó Gabriel García, gerente técnico de la Unidad de Animales de Compañía de MSD Salud Animal en Colombia.
Cuando se desparasita a una mascota no solo debe hacerse de manera interna sino también externa, lo que permite cuidar de la salud del animal y de los miembros de la familia, pues influyen diversos factores como el lugar de residencia y las diferentes actividades que realiza en su diario vivir.
Lo primero que debe tener en cuenta es que estos factores, que incluyen el calor y la humedad, tienen repercusiones en la salud de la mascota e influyen en el contagio de pulgas, garrapatas u otros parásitos.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), entre 70% y 80% de los perros tienen infestación de estos parásitos. El amplio ciclo de vida que tienen pulgas y garrapatas y los lugares donde se encuentran principalmente (pastos altos, arbustos y árboles), hace que sean fáciles de adquirir para cualquier animal de compañía, sobre todo cuando sale de su hogar a realizar actividades de ocio y tiene encuentros con otros caninos o gatos que no han sido desparasitados externamente.
Incluso cuando las mascotas no salen de casa, los ectoparásitos pueden ser transportados por el humano al interior del hogar a través de las prendas de vestir e infectar a los animales de compañía.
Cifras de MSD Salud Animal muestran que 27% de los responsables de mascotas no saben que su perro tiene garrapatas y 37% nunca consultan al médico veterinario sobre esta problemática. Por esto, la entidad recomienda fomentar la medicina preventiva que incluye la desparasitación externa e interna del animal, con un esquema de vacunación actualizado.
Otra manera de enfrentar a los parásitos puede ser la fumigación y la limpieza constante del hogar de la mascota, para prevenir la aparición de plagas y la infestación por garrapatas y pulgas. Los ciclos de vida de estos organismos no pueden ser cortados con fumigación cuando los parásitos no han llegado a su vida adulta, por lo que el tratamiento de desparasitación es clave para lograr este efecto.
Unas consideraciones finales a tener en cuenta es que se deben adquirir los medicamentos para las mascotas en sitios autorizados y que el cepillado de los animales de compañía es fundamental para combatir a las pulgas y garrapatas que se camuflan en el pelaje, por lo que la periodicidad debe ser de al menos tres días a la semana, que permitiría eliminar el pelo muerto.