Así es como el avión se proyecta en el video de la compañía.
Casi 33 millones de dólares han sido invertidos en la investigación para la creación de este avión.
Cada vez es mayor la frecuencia con la que el ser humano encuentra maneras de transportarse velozmente. Actualmente, incluso se está dando la creación de un avión que podría viajar a nueve veces la velocidad del sonido.
Se trata del ‘Stargazer’ de la compañía ‘Venus Aerospace’, el cual vienen desarrollando desde el 2020. Para lograr crear esta aeronave hipersónica han recaudado, según explica la compañía en un comunicado oficial, alrededor de 33 millones de dólares -más de 131 mil millones de pesos colombianos- principalmente brindados e invertidos por entidades privadas, pero también por gubernamentales.
Para que la investigación avance como debería, la aeronave está siendo construida por un equipo de veteranos aeroespaciales, militares y personal de investigación con el objetivo de desarrollar de manera correcta un vehículo que, hasta cierto punto, desafíe los límites de alta velocidad.¿Cómo funcionaría?
Un motor de cohete de última generación con cero emisiones
En una idea general, el avión tendría una capacidad bastante limitada, con alrededor de 12 personas además de la tripulación. Lo cual vendría siendo similar a un avión privado, teniendo en cuenta que un vuelo comercial puede contar con hasta casi 400 pasajeros, dependiendo del tamaño de la aeronave y la aerolínea.
Debido a la velocidad que propone alcanzar, el avión tendría que llegar a una gran altura -alrededor de 170 mil pies o 52 mil metros- que también permitiría que los pasajeros, en algún momento del vuelo, pudieran ver la curvatura del planeta sin haber salido de este.
Teniendo en cuenta las características, el diario argentino ‘La Nación’ propone que, con ese tipo de velocidad, se podría llegar de Los Ángeles a Tokio -un vuelo que usualmente tarda 11 horas y media- en una hora.
Según el comunicado oficial, uno de los objetivos principales durante la creación de esta aeronave ha sido fortalecer tres aspectos fundamentales para que, eventualmente, funcione: “un motor de cohete de última generación con cero emisiones, una forma de aeronave innovadora y refrigeración de vanguardia que permita que el avión espacial despegue de los puertos espaciales existentes”.
En ese sentido, el avión funcionaría de tal manera que en un comienzo despegaría con los motores convencionales y cuando ya estuviera alejado de las ciudades y a una altura pertinente pasaría a impulsarse con los “cohetes”, los cuales le permitirían tal velocidad.¿Qué tan cerca está el proyecto?
A pesar de que desde el 2020 se está trabajando en la aeronave, de acuerdo con lo que se comenta en el comunicado, es probable que las primeras pruebas que se realicen lleguen hasta aproximadamente el 2025.
Adicional a dicho tiempo, también se estima que tardará alrededor de cinco años para que se pruebe que la aeronave es segura de usar para los seres humanos.Proyectos similares
Últimamente, el hombre se ha encargado no solo de conocer el exterior del mundo enviando robots exploradores a Marte, por ejemplo, sino también de facilitar la movilidad dentro de la Tierra.
Durante el 2021, la empresa china Boom Supersonic habló sobre el Overture, un avión comercial de poca capacidad -alrededor de 70 pasajeros- que por un precio fijo de 100 dólares -casi 400 mil pesos colombianos- promete hacer viajes a una velocidad tal que recorte a la mitad el tiempo que es conocido por el público.
Además y por lo que mencionó anteriormente Blake School, CEO de la empresa, al medio ‘CNN’, esta aeronave también tendrá muy presente el cuidado del medio ambiente, pues la idea es que los motores sean sostenibles de una manera ecológica.
Sin embargo, al igual que la propuesta de ‘Venus Aerospace’, este avión no comenzaría sus primeros vuelos sino hasta aproximadamente el 2026.Concorde
Aunque la propuesta de un avión supersónico parezca muy nueva, en 1976 Reino Unido y Francia se unieron para construir el ‘Concorde’, un avión supersónico que llegó a recortar los tiempos de vuelo entre algunos destinos hasta a mitad de tiempo.
Su construcción se dio a través de dos empresas fabricantes, una de cada país, la British Aircraft Corporation y Aérospatiale. Al final, se entregaron siete aviones a dos de las aerolíneas principales de estos países: Air France y British Airways.
Los Concorde volaban, por ejemplo, entre París y Nueva York en un tiempo de 3 horas y media, mientras que en un vuelo comercial normal podría llegar a tardar hasta ocho horas.
Sin embargo, algo que se le criticó mucho a este tipo de aeronaves y a sus constructores fue su alto consumo de combustible, debido a las repercusiones que esto causaba en el medio ambiente.
A pesar de ser un gran avance en la aeronáutica, el vuelo del Concorde llegó a su fin en el 2003 después de que en julio del 2000 una de sus aeronaves tuviera un grave accidente al salir de París, Francia, y estrellarse en Gonesse, muy cerca a la capital francesa.
En este incidente murieron cien pasajeros y nueve miembros de la tripulación.
A pesar de ser el único accidente que presentaron este tipo de aviones, fue suficiente para que pasaran un poco más de 15 años hasta que se volviera a mencionar la posibilidad de crear una aeronave supersónica.