miércoles, 27 de octubre de 2021

Drogas sintéticas son gran amenaza para las décadas que vienen: EE.UU.

Brian Morales, funcionario del Departamento de Estado, aseguró que deben eliminarse las barreras para el acceso a los tratamientos.

Brian Morales, funcionario del Departamento de Estado de Estados Unidos en la división de Antinarcóticos.

El jefe de la división del área de antinarcóticos de la oficina de asuntos antinarcóticos y aplicación de la ley del Departamento de Estado de los Estados Unidos, Brian Morales, advirtió que el consumo de sustancias estupefacientes sintéticas se está potencializando.

En diálogo con RCN Radio, el experto precisó que cada semana se produce una nueva sustancia sintética en el mundo y agregó que su consumo representará un gran riesgo para las próximas generaciones.

"Las drogas sintéticas son sumamente fáciles de producir, no pensamos que van a reemplazar las plantas, pero las van a potenciar. Estamos viendo mezclas de sustancias (...) Hay más de 850 drogas sintéticas en el mercado hoy en día y cada semana se produce una nueva sustancia sintética psicoactiva", dijo.

Morales señaló que también es necesario modificar los controles al acceso de drogas sintéticas, al considerar que "se trafica a través de correos, se vende a través de 'criptomonedas', a través de diferentes aplicaciones en la web".

En ese sentido, destacó que "hay una serie de retos y desafíos que tenemos que enfrentar como una sociedad de países, de una forma más dinámica y más innovadora".

Brian Morales advirtió que frente a las acciones para disminuir el consumo, "todas las drogas tienen riesgo porque cuando miramos el punto de adicción hay muchos 'policonsumidores', entonces hay que enfocarse en el individuo y no en la droga".

Sin embargo, señaló que "la que más nos preocupa en Estados Unidos es el fentanilo, que tiene una potencia increíble porque puede producir sobredosis".

De otro lado, el experto dijo que uno de los temas más preocupantes en la actualidad, es el aumento del consumo de estupefacientes en Estados Unidos, Europa y Colombia.

Afirmó que existe una enorme preocupación, porque el consumo de sustancias alucinógenas se ha convertido en una enfermedad crónica que requiere un tratamiento biopsicosocial.

“La humanidad ha consumido drogas por más de 5 mil años. Solamente en los últimos 70 años entendemos que la adicción es una enfermedad crónica como la diabetes, la hipertensión, el asma (...) La ciencia nos tiene que guiar en nuestras estrategias y políticas públicas que diseñamos para enfrentar esta lucha”, destacó.

Agregó que “es importante también fortalecer los servicios de una expansión de los tratamientos y los programas de producción, pensando en ayudar a eliminar las barreras para que las personas necesitadas puedan tener acceso a más servicios”.

Destacó que la adicción tiene que tratarse con un tratamiento especial en la que intervienen diferentes profesionales de la salud.

“Vemos que el tema de la adicción requiere tratamiento que es biopsicosocial y espiritual también. Es una enfermedad compleja que requiere tratamiento médico, biológico, psicológico, social y un cambio en el ambiente del contexto del individuo", agregó.

Destacó que la mejor forma de prevenir el consumo de drogas es ofreciéndole a estas personas una atención integral. “Hay que darles el servicio de tratamiento, integrarlos a la comunidad (...) La mejor forma es darles esas herramientas para que busquen trabajo y se reintegren a la sociedad”, dijo.

El experto aseguró que se ha dado un gran cambio en la forma de ver el consumo de sustancias alucinógenas, también como una enfermedad de salud mental.

“Se ha tenido un gran cambio tanto en Estados Unidos como en otros países. Con nosotros empezó en los tribunales de droga (...) en el año 2016 en una reunión de las Naciones Unidas (ONU) en donde los estados miembros reconocieron este problema como una dificultad de salud mental y es ahí cuando los gobiernos se comprometen a buscar alternativas al encarcelamiento, teniendo siempre una mirada de salud pública”, manifestó.