sábado, 10 de octubre de 2020

Por qué sin bosques no se regula el clima y disminuye la producción de agua

En la Semana Mundial del Agua, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) instó a la reflexión sobre la conservación de los ecosistemas.

En la Semana Mundial del Agua, diversos actores resaltan sobre la importancia de preservar los bosques dada la conexión directa que existe entre la producción de agua y la regulación del clima. 

César Rey, ingeniero forestal y exdirector de Bosques del ministerio de Ambiente, dijo que cuando se pierden selvas como al noreste de Antioquia, la Serranía de San Lucas o la selva Amazónica, se despilfarran también servicios que brindan estos ecosistemas, como por ejemplo, acceder al agua. Además, son servicios que no son solo en lo local, sino de carácter planetario. 

Señaló que la pérdida de bosques en la Amazonia ronda cerca del 20 % del área total y eso genera que la capacidad de succión de agua, que viene del Océano Atlántico, sea menor y, en consecuencia, también se produzca una mayor intensidad en fenómenos climáticos como los huracanes.

"Si no logramos comprender las relaciones del planeta (incluida la nuestra con la naturaleza), pondremos en riesgo la misma producción de agua. Por ejemplo, los páramos, que tanto nos jactamos de decir que tenemos con el páramo más grande del mundo (Sumapaz), pues si la Amazonia no regula el agua, pues los páramos tampoco van a poder regular el agua porque no les va a llegar", sostuvo.


Agua y cambio climático: escasez de abundancia

Durante esta Semana Mundial del Agua, el BID desarrolla una serie de charlas en torno al recurso hídrico, sus principales amenazas y los retos de los diferentes Estados en torno a la protección de los ecosistemas que hacen posible el acceso a agua. 

La charla ‘Sin Amazonía, Sin Agua: Cambio climático en la selva tropical’ comenzó con una reflexión sobre el presente y el futuro de la Amazonía –la cuenca más grande del planeta–que bombea cerca del 20 % del agua de al Tierra.

"La Amazonía, que comparten 8 naciones en América del Sur es tan rica y ecológicamente diversa como compleja de gestionar", mencionaron lo panelistas.

Sergio Campos, Jefe de la División de Agua y Saneamiento del BID, inició la sesión con un llamado a explorar soluciones que "abran la puerta a la prosperidad y al mismo tiempo aseguren los recursos para el futuro".

“Las soluciones de infraestructura amigables con el medio ambiente deberían estar en el centro de los planes de recuperación de la economía una vez superada la pandemia. Con ello lograríamos dos objetivos: el poner a trabajar a amplios sectores de nuestra sociedad, y avanzar en la meta de mitigar el cambio climático y sus efectos en todas las esferas de nuestra vida”, dijo Campos.

Durante estos días, se esperan diversos conversatorios en torno al agua en América Latina y el Caribe, la región con mayor reservas del líquido, pero también con grandes retos en el mejoramiento de la calidad y el acceso, dos variables directamente relacionadas con la protección de sus ecosistemas.