jueves, 12 de julio de 2018

Los adolescentes y el control de sus emociones

Un estudio determinó que el entorno social influye en la regulación emocional de los menores. 



Los investigadores destacan la influencia de los padres en la autoregulación emocional de sus hijos. 

El 16 de mayo se dieron a conocer los resultados de un proyecto de tres años entre la Universidad del Norte (Uninorte), de Barranquilla, con participación de Colciencias e investigadores franceses, que buscó entender la regulación emocional de adolescentes entre 11 y 15 años y hacer comparaciones entre sus distintos entornos.

Colette Sabatier, experta en psicología del desarrollo e investigadora del estudio, planteó que los primeros tres años de la adolescencia se entienden como “un periodo muy sensible a la regulación emocional”, debido a cambios biológicos, sociales y cognitivos en las personas. 

Su investigación se centró en entender cómo los adolescentes en ese rango de edad manejan sentimientos como rabia, tristeza, miedo, según los círculos en los que se desenvuelven.

Otro aspecto que estudiaron fue la relación entre estos y sus padres, para entender cómo los últimos influenciaban el comportamiento e interacciones de los menores. “El rechazo de los padres está unido a la incapacidad para regular las emociones”, afirmó Sabatier.

Por su parte, Dayana Restrepo, investigadora y estudiante del doctorado en Psicología de la Uninorte, estudió las estrategias que 288 adolescentes barranquilleros emplean para lidiar con la rabia, la tristeza y la ansiedad.

Los resultados indican que no hay diferencias en la forma como hombres y mujeres afrontan sus emociones. “En cuanto a la edad, hay una crisis de control emocionalentre los 13 y los 15 años; eso da luces para plantear programas de intervención para padres y orientadores”, destacó la académica. 

Agregó que las condiciones de vulnerabilidad dificultan el control emocional. “Encontramos que aquellos niños que viven en condición de pobreza inhiben la expresión natural de emociones como la tristeza”. 

Según su criterio, estos hallazgos permitirán incluir la mirada local en el estudio internacional y hacer comparaciones con los jóvenes de países como Francia e India. 

Hay una crisis de control emocional entre los 13 y los 15 años. Además, los niños en condición de pobreza inhiben la expresión natural de emociones como la tristeza 

Consejos de autocontrol

Alberto Castro, decano de la División de Humanidades y Ciencias Sociales de la Universidad del Norte, señala que la autorregulación emocional implica que el joven aprenda a hacer momentos de pausa para reconocer sus estados afectivos.

“Se requiere un proceso pendular entre individualización y adaptación”, afirma. Es decir, que haya un equilibrio entre las necesidades individuales del joven y la aceptación del contexto en el que se desenvuelve. 

En este sentido, el decano destaca la importancia de que el joven llegue a acuerdos con su núcleo familiar. 

“La idea es que con cada pedido del joven los padres deberían solicitar un compromiso de su parte a cambio”, apunta. “Esto lo llevará a aprender a decidir y a tolerar la frustración, entre otras ventajas”.