Carlos Bermúdez, de la Normal de Caldas, capacitó a sus compañeros en creación de blogs. Estar al día en tecnologías de la información, reto para los maestros de hoy.
El aula de clase con el maestro frente al tablero, tendrán que esperar. Llevar la educación a enseñar en profundidad para comprender el mundo global y actuar con solidaridad es otra reflexión.
Entre profesores y directivos hay consenso: la educación cambiará. Los recursos virtuales son el medio. El aula de clase con el maestro frente al tablero, tendrán que esperar. Llevar la educación a enseñar en profundidad para comprender el mundo global y actuar con solidaridad es otra reflexión.
El covid-19 demuestra que Colombia tiene un reto en materia de virtualidad. El Ministerio de Educación puso a disposición plataformas educativas y cada colegio usa aplicaciones básicas como Whatsapp, Facebook y Youtube para comunicarse con sus estudiantes.
Estas herramientas producen confianza en Francis Rodrigo Otero, rector del Instituto Manizales y quien adelanta doctorado en Educación. Afirma que es necesario modernizar las escuelas y entender que la conectividad se convirtió en un elemento de primera necesidad. Resalta que todavía hay familias desconectadas y sin conocimientos tecnológicos, quienes necesitan más acompañamiento en esta contingencia.
"Las escuelas, por muy imperfectas que sean, desempeñan una función igualadora en la sociedad y cuando se cierran las desigualdades se agravan", aseguró la subdirectora general de Educación de la Unesco, Stefania Giannini. Los alumnos de familias desfavorecidas tienen menos oportunidades educativas fuera de la escuela y además muchos niños se quedan sin acceso a comida gratuita o subvencionada, explica Giannini.
Cambiar el chip
El reto para la educación es positivo, afirma Estella Pulgarín , orientadora del Colegio de Cristo y doctora en Pensamiento Complejo. Para ella la comunidad educativa debe flexibilizarse y romper paradigmas.
Cree que después de esta crisis la virtualidad será una parte importante de la educación, pero no toda.
Resalta que la escuela deberá generar espacios de encuentro físico para ser integrales. Por ejemplo, para el desarrollo motriz de los niños, de las habilidades sociales y el aprendizaje de las artes.
Según los últimos datos de la Unesco, 102 países mantienen interrumpido su sistema educativo y otros 11 tienen cierres locales para frenar el avance del virus.
Nuevas costumbres
“Hay una brecha entre la disponibilidad del material tecnológico y el uso adecuado de ellas”, dice Ángel Andrés López, profesor de la maestría en Pedagogía de la Universidad Católica de Manizales.
Resalta que el país no estaba acostumbrado a este método de educación. Como la emergencia sanitaria los obligó, el Ministerio debe flexibilizar el proceso de adaptación.
Resalta que, en el caso de la Facultad de Educación de su Universidad, tienen ventajas, pues ya trabajaron programas de modalidad a distancia. Situación que ocurre en otras universidades del país. Los vulnerables son la educación preescolar, básica y media.
Profundidad
Otra reflexión es que a la academia, igual que a los gobiernos, empresas y otros sectores, los cogió por sorpresa la pandemia y por consiguiente limitó la reacción, a pesar de los avances en ciencia, investigación y tecnología.
Silvio Cardona es doctor en Educación y posdoctor en ciencia de la complejidad e investigación transdisciplinar. "La academia tiene un papel fundamental en pasar de la racionalidad simple, es decir de la pregunta y respuesta, al conocimiento profundo".
Considera el profesor de la Universidad Católica que la sociedad de hoy debe comprender y contextualizar las dinámicas del mundo global, entender que lo que pasa en China impacta a Manizales y viceversa. "Hay que trabajar en previsibilidad".
La mitad de los alumnos del mundo no puede asistir por la pandemia del coronavirus a la escuela o a la universidad, lo que supone 850 millones de estudiantes, una cifra que se ha doblado en cuatro días, indicó ayer la Unesco. En Caldas son cerca de 150 mil alumnos perjudicados en colegios.