Conservar las especies y la fauna, generar fuentes de empleo e instrumentos de política pública ambiental, algunos de los objetivos.
Los Bancos de Hábitat (BH) son mecanismos de inversión ambiental que le permiten al sector privado, público y academia, generar articulaciones para lograr resultados en materia de conservación ambiental. Colombia los ha incorporado desde el año 2016.
Esta estrategia funciona bajo el principio de pago por resultados. En estos, las empresas pueden compensar la afectación ambiental generada por sus actividades productivas.
La empresa Terrasos, especializada en estructuración y operación de inversiones ambientales, y, la Escuela de Ciencias de la Universidad EAFIT, hablaron en el conversatorio ‘EAFIT Biodiversa’ sobre el rol del sector privado en la innovación de la conservación de la biodiversidad.
Allí se recalcó que las empresas, proyectos e instituciones que generan impacto en el ecosistema, deben cumplir requerimientos en el tema de licencias ambientales a través de acciones que generen resultados en reforestación.
La identificación de la problemática ambiental es el punto de partida. Allí, Terrasos buscó actores que quisieran tener un modelo diferente de inversión para hacerlas sostenibles en el tiempo y con buen retorno.
En este proceso, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) se convierte en aliado estratégico de la empresa en la puesta en marcha del modelo de negocio.
Además, empresas y proyectos como ISA Intercolombia y Concesión Pacífico 2, han apoyado el proceso por medio de sus inversiones. “Este mecanismo permitirá compensaciones articuladas que se mantengan en el tiempo y que sean efectivas” mencionó María Gómez, directora ambiental y predial de ISA.
LAS VENTAJAS
En la medida en que el Banco de Hábitat ya tiene un plan de manejo y un protocolo de seguimiento y monitoreo, las empresas ahorran hasta tres años de trabajo debido a que ya está creada la base sobre la cual pueden aportar.
“Le ahorramos tiempo y costos a las empresas que deben cumplir con obligaciones ambientales, cuyo negocio es otro como las vías o las redes hidroeléctricas” asegura Sarmiento.