domingo, 14 de febrero de 2021

El hombre que busca imponer récord de 48 horas nadando el río Orinoco

Marco Antonio Mattar busca cruzar 100 veces este afluente.


Fotografía de sus hazañas en el 2020.

Marco Antonio Mattar es un deportista excepcional. Aunque muchas de las proezas que ha ejecutado en su carrera han sido nadando, en un perfil que le hizo EL TIEMPO el año pasado aseguró que no se considera a sí mismo como un nadador.

Fue noticia en marzo pasado debido a que atravesó el río Orínoco 30 veces. Esto sin reparar en el fuerte caudal del afluente, uno de los más intensos del mundo. Este diario reportó en su momento que Mattar logró recorrer cerca de 21.800 metros.

Ya lo había intentado varias veces y el hecho de que sus axilas resultaban quemadas hizo que su objetivo se truncara. Pero perseveró y acabó consiguiéndolo.

En ese entonces señaló que su meta en unos meses sería lograr cruzar el río 100 veces seguidas. Para ese momento podía parecer una cifra exagerada, una fantasía de un deportista que pecaba por exceso de optimismo.

Sin embargo, en este preciso instante, Mattar se encuentra en el agua y su intención, además de llegar al centenar de recorridos, es romper un Récord Guinness. La idea es que consiga pasar 48 horas seguidas nadando.

¿A qué horas podría lograrlo? La hazaña podría conseguirla esta misma noche, si sigue en las arrebatadas aguas del Orínoco sobre las 11 p.m.

En el departamento del Vichada ya es toda una celebridad. De hecho, el secretario de Gobierno de Puerto Carreño, Carlos Pardo, compartió un video en el que se observa cómo el deportista nada, literalmente, contra la corriente.

Lo que le ha sobrado al 'supermán del Orínoco' durante toda su vida es decisión, pues el año pasado le dijo a EL TIEMPO que la primera vez que cruzó ese afluente fue cuando tenía apenas 8 años, en 1978.

Y con el paso del tiempo, su ambición solo crece. “Llevo entrenando toda la vida para esto, quiero establecer 10 récord mundiales entre mis 50 y 70 años”, le explicó a este diario el año pasado.

sábado, 13 de febrero de 2021

Nadie es demasiado pequeño para marcar la diferencia’: Greta Thunber

La joven activista les recuerda a los jóvenes del mundo que ellos tienen el poder de cambiarlo todo.


Al nuevo presidente de EE. UU. “necesitamos presionarlo. No podemos relajarnos y pensar que todo irá bien”.

Greta Thunberg acaba de cumplir 18 años, aunque por su físico menudo y su rostro aniñado parece más joven aún. Hasta que habla. A partir de ese momento cuesta recordar que es todavía una adolescente, que vive en Suecia con sus padres, su hermana y un perro, y que tiene que rendir en la escuela como cualquier persona de su edad. Porque cuando habla, sus facciones cambian, endureciéndose, se vuelve asertiva y mira a los ojos. No duda. Exige.

“¡Debemos comenzar a tratar la crisis climática como una crisis y a tomar medidas para detenerla!”, dice durante esta entrevista. Y añade: “Lo peor es la negación, mirar para otro lado, minimizando o difundiendo falsas esperanzas con frases como ‘vamos a solucionarlo’, sin adoptar las medidas necesarias”.

Son las 16 horas del sábado en Estocolmo, pero es ya noche cerrada en la capital sueca (por el invierno). Ella aparece con la cara lavada, con la trenza que la caracteriza y un buzo negro con capucha. “Nunca debemos subestimar el poder de una persona, y especialmente el poder de los jóvenes. Los jóvenes tienen el poder de cambiarlo todo”, dirá con el correr de los minutos en una conversación en la que cargará contra lo que define como la “traición” de las generaciones mayores, pero en la que también mostrará un notable sentido común.

Todavía podemos cambiar esto, pero las acciones que se necesitan para afrontar el cambio climático aún están lejos de implementarse. ¡Debemos comenzar a tratar la crisis climática como una crisis.

Publicó un video al cumplirse los cinco años del Acuerdo de París, lamentando las promesas vacías de los líderes globales. ¿Se puede cambiar eso?

Sí, claro, podemos cambiarlo. Tenemos los medios para cambiar básicamente todo. Todavía podemos cambiar esto, pero no si continuamos por la misma senda que hasta ahora. Se cumplieron cinco años desde que se firmó el Acuerdo de París y hemos visto algunos cambios durante este tiempo, han pasado muchas cosas y las leyes han cambiado, pero las acciones que realmente se necesitan para afrontar el cambio climático aún están lejos de implementarse. ¡Debemos comenzar a tratar la crisis climática como una crisis y a tomar medidas para detenerla! Si no, solo seguiremos hablando de futuros tan hipotéticos como distantes. Bonitas promesas que en realidad no significan nada porque en realidad no se cumplen. Por eso tenemos que realmente presionar a las personas en el poder para que hagan algo.Los líderes de la Unión Europea acordaron en diciembre reducir las emisiones de gases de efecto invernadero para 2030 en, como mínimo, el 55 %. Es una buena noticia, ¿no?

Sí, y es muy lamentable. No está lo suficientemente cerca de donde debemos estar para estar alineados con los Acuerdos de París o con las metas para limitar el calentamiento global a 1,5 °C o menos. He hablado con esos líderes y ellos dicen que tenemos que avanzar despacio, paso a paso y llevar al público lentamente. Pero incluso si esa reducción del 55 % fuera suficiente –lo que no es así–, tampoco es que el objetivo de reducción de emisiones sea realmente del 55 %, porque incluye muchas lagunas y excepciones. Para empezar, fija la línea de base, de medición, en 1990. Así que en realidad no será el 55 % por medir a partir de 2010, como debe estar, según la ONU. Y tampoco incluye un índice de consumo o transporte y aviación internacional. Por el contrario, incluye la posibilidad de sumideros y redes de carbono y mucho más. Entonces, ese 55 % que anunciaron no es tal cosa y deja afuera los aspectos de ‘equidad’, que es la parte más esencial del Acuerdo de París.

¿Podría esta pandemia funcionar como una llamada de atención, mostrándonos que si no actuamos rápido y juntos podríamos padecer otros y más serios traspiés?

Por supuesto, habrá cosas que podamos aprender de esta pandemia. Y muchos hablan de la oportunidad de cambiar las cosas. Pero no deberíamos verlo como una oportunidad. Será una elección. En este momento estamos en una encrucijada y tendremos que elegir qué puerta abriremos.¿Podemos ejercer más presión contra los tomadores de decisiones?

Sí, claro, eso es lo que tenemos que hacer, porque tenemos la suerte de vivir en democracias, y en democracia la gente es la que tiene el poder. Entonces, si queremos cambiar, debemos exigir ese cambio. ¡Quienes están en el poder no actúan sin una presión real de la gente! Así que depende un poco de nosotros.

Biden es un gran cambio con respecto a cómo era antes. Y sí, algo puede cambiar, pero la presión debe estar ahí. Necesitamos presionarlo. No podemos relajarnos y pensar que todo irá bien.

¿Cree que algo va a cambiar con Joe Biden en la Casa Blanca?

Definitivamente. Se trata de un gran cambio con respecto a cómo era antes. Y sí, algo puede cambiar, pero la presión debe estar ahí. Necesitamos presionarlo. No podemos relajarnos y pensar que todo irá bien. Tenemos que seguir presionando, tal vez incluso más que antes.

¿Cuál es su mensaje para los jóvenes de América Latina que leerán esta entrevista?

Que nadie es demasiado pequeño para marcar la diferencia y nunca debemos subestimar el poder de una persona, y especialmente el poder de los jóvenes. Los jóvenes tienen el potencial de cambiarlo todo. Si vamos juntos y decidimos que vamos a hacer que suceda el cambio, podemos lograr ese cambio. Tenemos ese poder. A lo largo de la historia lo hemos visto. Así que ahora tenemos que trabajar juntos a través de las fronteras y presionar internacionalmente a nuestros líderes mundiales. Necesitamos entender dónde estamos y entender la traición de las generaciones mayores y las personas en el poder.¿Cómo lidia con la hipocresía, las palabras vacías y las promesas incumplidas?

No me molestan. Quiero decir, así es como funciona el mundo. He estado en tantas reuniones y todo es: ‘No puedo hacer esto por mi cuenta’, ‘Tenemos que movernos lentamente y llegar a un compromiso’... y así sucesivamente. Cuando empecé no sabía cómo funcionaba. Tampoco es que estuviera esperando que el mundo, de repente, dijera: ‘¡Oh, no! ¡Reduciremos nuestras emisiones!’. Eso no sucederá. Por eso debemos aumentar la presión y debemos concientizar a la gente para que eso suceda.

Nosotros, los jóvenes, sentimos que debemos hacer algo para compensar la inacción de los demás. Entonces, si alguien desea ayudarme, involúcrese.

¿Y cómo lidia con la presión? ¿Cómo lleva esto de interactuar con jefes de Estado, medios, redes sociales y más?

No lo sé. Es solo que no me lo tomo muy en serio (sonríe). Si no, me volvería paranoica. Suelo pensar: ‘Está bien, lo estoy haciendo voluntariamente’. Mientras disfrute lo que hago, mientras no lo sufra, continuaré. Por supuesto, hay cosas que no me gustan. Hay tanto enfoque en mí, recibo tanta atención de los medios... Pero es algo que supongo que viene con lo que hago, desafortunadamente. Pero no puedo quejarme, porque yo me puse en esta situación. Y si quisiera dejar de hacerlo, podría... Pero no es tan fácil como eso, porque hay muy poca gente haciéndolo. Así que nosotros, los jóvenes, sentimos que debemos hacer algo para compensar la inacción de los demás. Entonces, si alguien desea ayudarme, involúcrese. Cuanta más gente seamos, menos responsabilidad recae en una persona. Quiero decir, no soy solo yo quien está en este movimiento, pero sí sentimos que hay mucha presión sobre nosotros, porque nadie más está haciendo nada.

Afrontamos una opción: ¿elegimos la codicia
o la vida? Y si elegimos la vida, es hora de empezar a actuar.

¿Qué preguntas hay que deberíamos habernos hecho antes y no nos hicimos?

Creo que hay muchas preguntas que debemos hacernos ahora mismo. Quizás, sobre todo, ¿cuáles son nuestras prioridades? ¿Qué priorizamos, ahora mismo, en el corto plazo? ¿Qué estamos dispuestos a hacer por nuestros hijos? ¿Qué estamos dispuestos a hacer para que, cuando miremos hacia atrás, nos recuerden como personas que hicimos todo lo que pudimos?¿Es optimista?

Sí.¿Todavía estamos a tiempo de evitar la catástrofe climática?

Sí, definitivamente. Todavía es posible evitar las peores consecuencias, y eso depende de nosotros. Pero no será posible si seguimos como hoy. Por lo tanto, afrontamos una opción: ¿elegimos la codicia o la vida? Y si elegimos la vida, es hora de empezar a actuar.

¿Hay alguna pregunta que no le hice y quisiera responder?

Hay tantas cosas para hablar, tantas preguntas por hacer... Diría que muchas personas tienen miedo de involucrarse en el movimiento climático porque piensan que ya es demasiado tarde o que ya hay personas involucradas o que no saben nada al respecto, pero nunca es demasiado tarde. De hecho, si empiezas ahora, seguirías siendo uno de los pioneros porque esto es algo que se volverá mucho, mucho más grande con el tiempo, inevitablemente. Entonces, si te sumas ahora, eres un pionero y eres más que bienvenido. Te recibiremos con los brazos abiertos.Por último, ¿qué hace con su tiempo libre?

Estoy tejiendo y haciendo un rompecabezas. Eso me relaja. También me gusta leer. Me parece interesante y recomendaría leer sobre la ciencia detrás de la crisis climática. Libros como Las tormentas de nuestros nietos, de James Hansen, o La sexta extinción, de Elizabeth Kolbert, o The Ends of the World, de Peter Brannen, o los de Naomi Klein, por supuesto. Hay tantos libros... Me encanta aprender, así que también me gusta ver documentales y escucho audiolibros.Quién es ella

- Nació el 3 de enero de 2003. En agosto de 2018 inició una protesta frente al Parlamento sueco, adonde acudió todos los días para exigirle al Gobierno de su país que aplicara el Acuerdo de París.

- Jóvenes de todo el mundo se han movilizado en más de 270 ciudades, sumándose a su iniciativa de los Viernes por el Futuro.

- En 2019, la revista Time la eligió como la Persona del Año.

- En 2014 le diagnosticaron síndrome de Asperger, trastorno obsesivo compulsivo y mutismo selectivo. Ella cuenta que eso la limitó en el pasado, pero que ahora lo ve como un “superpoder”.

viernes, 12 de febrero de 2021

El 2021 se pasará más rápido que 2020

La Tierra aumentará su velocidad de rotación durante este año.

Si bien para muchas personas el 2020 fue un año ‘eterno’, lo cierto es que fue el más corto de las últimas décadas, pues la tierra rotó varios milisegundos más rápido.

Pero ¿cómo se calcula eso? Para responder a esta pregunta es importante tener en cuenta que la Tierra gira sobre su propio eje cada 86.400 segundos, es decir, 24 horas. Sin embargo, este tiempo no es igual todos los días, ya que la rotación puede variar en milisegundos (0,001 segundo). Así se comprobó desde la creación de los relojes atómicos de alta presión en 1960.

Precisamente, gracias a esta herramienta que mide con exactitud el tiempo, se evidenció que el 2020 fue uno de los años más rápidos porque tuvo los 28 días más cortos desde 1973. El más veloz fue el 19 de julio, cuando la Tierra rotó 1,4602 milisegundos por debajo de lo normal. Asimismo, los otros 27 superaron el récord que tenía hasta el momento el 5 de julio de 2005, día en el que la rotación del planeta duró 1.0516 milisegundos menos de los 86.400 segundos.

El 2021 será más rápido

Ahora bien, estas cifras que son imperceptibles al humano podrían bajar aún más en este 2021, convirtiéndolo en el más corto desde 1937. De acuerdo con científicos que monitorean la velocidad de rotación de la tierra, se espera que este año el promedio de duración de los días baje 0,05 milisegundos.

Existen varias hipótesis sobre el origen de este fenómeno. Algunos especialistas en el tema lo relacionan con los cambios del núcleo de la Tierra, sus océanos y su atmósfera; con la atracción gravitacional de la Luna; y con el calentamiento global. Sin embargo, esta última aún continúa en investigación.

De seguir aumentando la velocidad de rotación se tendría que intercalar un segundo negativo. Es decir, saltar un segundo los relojes para sincronizarlos con la Tierra.

jueves, 11 de febrero de 2021

Joven alzó al pez más venenoso del mundo para lograr ser viral

Un ser humano puede morir rápidamente por este pez.

Se grabó cogiendo al pez más venenoso del mundo para ser viral

Ser viral para algunos es fácil, pero para otros no, y ahora se popularizó la tendencia de hacer cosas peligrosas, sucias o contra todo convencionalismo para lograr obtener millones de seguidores o likes, sin pensar en las repercusiones graves de estos actos.

Así lo demostró un joven australiano que levantó al pez más venenoso del mundo con su mano para realizar un Tik Tok.

Hace 2 meses

El joven se encuentra en una playa de Australia cuando se encuentra un pez piedra, que aparte de su veneno mortal tiene una capacidad de camuflaje impresionante. Una vez el joven se percata de su presencia, lo que hace es intentar extraerlo del agua y mostrarlo con detalle a la luz del sol.

Claramente, si el joven hubiera tenido contacto con la aleta dorsal o las peligrosas espinas del animal, la historia podría haber sido distinta, pues el pez piedra tiene la capacidad de matar a un ser humano con su veneno.

Finalmente, cabe recordar que el pez piedra es conocido a nivel científico como 'Synanceia Horrida' y se encuentra principalmente en las zonas costeras del Indo-Pacífico. En cuanto a su veneno, se sabe que posee unas poderosas neurotoxinas que no pueden ser tratadas y que están catalogadas como las más peligrosas en el mundo de los peces. 


Se grabó alzando al pez más venenoso del mundo para ser viral

miércoles, 10 de febrero de 2021

Entrevista las confesiones del elegido mejor DT de tenis del mundo

El español Fernando Vicente ha llevado al ruso Andrey Rublev al éxito. Habló con EL TIEMPO.

Fue una llamada tranquila. Se acomodó en el carro y pidió hacer la comunicación. Mientras hablaba recorría las carreteras españolas para ir a visitar a sus papás. Sabía que tenía un compromiso y un objetivo en el próximo Abierto de Australia, primer grand slam de la temporada, y por eso quería abrazar a sus familiares. Y mientras llegaba a su destino, el español Fernando Vicente entabló una conversación a puro tenis.

Una vez contestó estuvo dispuesto al peloteo de la conversación. Su nombre en el circuito es bien conocido y ya se ha establecido. Vicente fue elegido en el 2020 como el mejor entrenador del mundo por llevar al joven tenista ruso Andrey Rublev, octavo mejor jugador del planeta y quien el año ganó los títulos en Doha, Adelaida (Australia), Hamburgo, San Petersburgo (Rusia) y Viena (Austria). El técnico habló con EL TIEMPO de todo.

Comenzó por el pánico generado por la pandemia, su temor por no quedar atrapado en Estados Unidos, la crisis que sufrió su academia en Barcelona, todo su trabajo con Rublev, el juego que se está viendo hoy en día, la falta de presión de la nueva generación a Roger Federer, Rafael Nadal y Novak Djokovic y más.

¿Cómo ha vivido en medio de esta pandemia?
El año pasado el tenis se dividió en dos partes. Los tres primeros meses estuvo todo tranquilo, pero luego todo empeoró. En nuestro caso fue en el Masters 1.000 de Indian Wells. Todo se rompió con esto del virus. Entramos en pánico, porque se canceló el trabajo, la vida en sí paró brutalmente en España. Nos quedamos encerrados 70 u 80 días, ya perdí la cuenta. Fue muy duro, fue un drama.

Entramos en pánico, porque se canceló el trabajo, la vida en sí paró brutalmente en España.

Seguíamos trabajando en mi academia, que al ser propietario tenía permiso para ir, pero sin un objetivo claro, porque no había calendario, no sabía cómo hacer. Fue la primera vez que en mi vida, por lo que nos pintaban en los medios de comunicación, entré un poco en pánico.

La para del circuito lo agarró en Indian Wells, en Estados Unidos. Por todo lo que se veía en medios, ¿cuál fue su reacción sabiendo que su familia estaba en España?
Entré en pánico, me fui corriendo a Los Ángeles. El equipo de mi jugador (Andrey Rublev) se quedó un día más, pero yo entré en pánico y me fui corriendo al aeropuerto. Me daba miedo quedarme en Estados Unidos y que me cancelaran los vuelos. Eso fue lo primero que pensé. Debía llegar a casa para estar al lado de mi familia. Cuando llegué a casa ya estaba tranquila. El día que aterricé aquí, cerraron toda España.

Dice usted que en esa dura época de inicio de la pandemia no había un objetivo claro, ¿cómo trabajó en la Academia y con el mismo Rublev?
La academia siempre estuvo cerrada. No se podía abrir para nadie y los chicos manejaron la situación a su manera. Hay muchos extranjeros, hay tenistas de muchísimos países, y con esta alerta decidieron qué hacer. Unos se fueron a sus países y otros se quedaron en Barcelona. Al principio esperamos un tiempito y luego se les fue mandando trabajos físicos y cosas que pudieran hacer en casa en medio de ese encierro. Hay que pensar que no todos vivían en casas grandes. Al saber que era un tema muy difícil desde la parte mental y física, al saber que no podíamos ni ir a botar la basura, diseñamos un plan para los chicos para que se mantuvieran bien en todos los ámbitos.

En el caso de Andrey Rublev, algunas veces nos veíamos. Él se fue para Moscú y yo me quedé en Barcelona. Cuando se permitió abrir las fronteras, él vino dos semanas, se volvía a ir. Todo fue así, porque su residencia está en Rusia. Fue complicado.

¿Pensó lo peor para su academia?
Bueno, la verdad que sí. Hubo problemas en todos los niveles. Nosotros tuvimos que pedir una ayuda del Gobierno. Es decir, ellos nos daban una ayuda económica y nosotros debíamos poner la otra parte. Pedimos un crédito que acá en España se les da a los pequeños empresarios, que lo financian muy bien, y pudimos, durante estos tres meses, pagar un dinero digno para que nuestros trabajadores pudieran vivir decentemente. Obviamente fue un desastre económico.

Hubo problemas en todos los niveles. Nosotros tuvimos que pedir una ayuda del Gobierno.

Hablando de temas menos feos como la pandemia, usted fue elegido el año pasado como el entrenador del año para la ATP, ¿qué significa este premio en su carrera?
Yo creo que la gente que viajamos dentro del circuito nos conocemos todos. Al final es un mundo pequeño, porque si me preguntas por Santiago Giraldo, yo sé quién es. Ellos vieron el trabajo que uno hace. En general, mis compañeros, que fueron quienes votaron, han valorado de que llevamos mucho tiempo de trabajo y ellos vieron la forma en la que he trabajado. Lo difícil que es tener un jugador, que puede ser débil mentalmente o que no tenga el talento de otro o que le está costando y ver cómo se pulen con un trabajo de semana tras semana. Eso sumado a que los resultados salieron, porque Andrey hizo un gran año en medio de la pandemia.

Fernando Vicente muestra su trofeo como el técnico del año en la ATP.

Me premiaron mi trabajo, la fidelidad mía con Andrey y de él conmigo, porque al final no nos separamos. No hace falta que me den un premio para saber lo que estoy haciendo y la mejora que ha hecho. Si no lo hubieran inventado no habría problemas, porque igualmente estaría orgulloso de mí mismo. Llevamos muchas semanas tratando de hacer a un jugador lo mejor posible. Gracias a que él me ha dado el tiempo, la confianza y que me escucha, ha hecho que hayamos tenido un año espectacular.

Afortunado usted que encontró en Rublev una perla del tenis mundial…
Lo conozco cuando tenía 18 años. La verdad no sabía ni quién era. Me llegó de casualidad, porque mi socio de la academia entrenaba a Karén Jachánov. Entonces yo viajaba con los españoles Marcel Granollers y Marc López, pero quería dejar de hacerlo. Venía haciéndolo muy seguido y tenía un hijo de cuatro años. Decidí quedarme en Barcelona trabajando con los chicos de la academia. Fue ahí cuando mi compañero que viera a este chiquitico ruso, que es muy amigo de Karén y que le gustaría venir a Barcelona. Me convencieron para que lo viera. Lo importante para mí es que fuera buena persona y que tuviera ganas de trabajar.

Fernando Vicente con Andrey Rublev.

Él era un jugador muy delgado, que le pegaba muy fuerte a la pelota, pero que no tenía ni idea de táctica ni de comportamiento en cancha. Él era número 1 del mundo junior y se comportaba como un malcriado, se quejaba de todo, físicamente todo por mejorar, tácticamente todo por aprender. Pese a lo bueno que era, estaba muy verde.

¿Y cómo lo trabajó entonces?
Nada. Como un niño que viene al colegio en sus primeros cursos. Es que él llega a ser el mejor junior, pero no sabe ni cómo. Le pega muy duro a la pelota, sin orden de nada. Entonces trabajamos en todo sentido desde lo físico, lo mental, aprender a defender, entender por qué tiras una pelota paralela o cruzada ya dónde va a volver esa pelota. Él es ruso, su mentalidad es pegarle muy fuerte a la pelota, pero te terminas volviendo loco. Quería una intensidad que no podía por el cuerpo que tenía. Se trabajó todo, la verdad.


Si Andrey era malcriado, ¿alguna vez chocaron?
Nunca hemos chocado, porque él vino muy abierto a aprender y desde el principio se dio cuenta que estaba totalmente equivocado. Hemos tenido miles de conversaciones desde que empezamos a trabajar. El único acuerdo era que hiciera lo que yo le dijera y en el momento que miramos que ya no me escuchaba o no mejoraba, pues que me diera la confianza de decírmelo. Para mí estaba clarísimo que trabajando y escuchando, era muy difícil que con las horas que él estaba en cancha no fuera para arriba. Eso es lo que más resalto de él, no falla ningún día, no pone ninguna excusa y está enamorado del tenis. Ahí tienes mucho ganado y lo demás se puede mejorar. Yo tengo a mi favor qué sé cómo trabajar a estos muchachos. Pueden estar enfadados o frustrados, pero al final son niños y no todos cambiamos de un día para otro.

¿Fue fácil ese cambio a sus 18 años?
Hay muchas cosas. No porque seas muy joven no puedes cambiar o mejorar. En eso no estoy de acuerdo. Estás joven para ponerte fuerte físicamente, estás joven para ser el 10 del mundo. Para avanzar y mejorar x cosas puedes ir tarde así seas joven. Él vio en mí que he sido un entrenador abierto. Hemos ido creciendo cada año. Está donde está, pero él no se conforma. Eso me hace crecer como entrenador.

En cuanto a juego, ¿qué diferencia puede tener Rublev con otros jóvenes como Zverev, Medvedev, Tsitsipas?
La mayor diferencia que hay con ellos es el saque. Hemos entrenado con Zverev y se ve la cantidad de errores no forzados. Andrey tiene muy buen control de los dos lados: derecha y revés, pero antes sacaba mucho peor. Por eso no estaba en el nivel que se merecía. Además tenía unas actitudes que no eran las correctas para un jugador que quería estar arriba. Todo eso se ha ido trabajando. Ahora, de esa camada joven considero que Zverev tiene mucho margen de mejora, pero está por encima de Andrey, porque saca mejor.

¿Cuáles fueron las claves de ese buen 2020 de Rublev?
Él termina el 2019, antes de la pandemia, ganando el torneo de Moscú en su casa, que es importante porque gana el torneo de su casa. Es como que Santi Giraldo gane en Bogotá. Luego jugó una muy buena Copa Davis. De ahí arrancó el 2020 disparado. Ganó Doha y Adelaida. Luego cae en cuarta ronda en el Abierto de Australia. Ahí estaba jugando perfecto. Luego pasó lo de la pandemia y tuvimos una pelea. Yo no quería que jugara en Hamburgo, porque era antes de Roland Garros. El año pasado Rublev había llegado a la final en Hamburgo y le pedí que no se interesara en ese torneo, porque solo sumaba si ganaba el torneo. Entonces si ganaba el torneo quería decir que iba a desgastarse y podía dañar su Roland Garros y no la podíamos cagar. Él me dijo que tenía que y fue solo. Independientemente que ganara se vio cansado, los fue sacando, pero lo que cambió en él fue que le gusta tanto no perder, que el tipo es capaz de no aflojar, pese a ir cansado. Algunos dicen que tiene muy mala cabeza y yo les respondo “ha jugado cinco finales y ha ganado las cinco”. Él ha cambiado la mentalidad y se ve para ganar todos los torneos.


Fernando Vicente junto a Andrey Rublev.

¿A qué le apuntan en el Abierto de Australia?
Cuando Andrey estaba 16 del mundo decía que quería llegar a cuartos. Ahora está en octavos y firmaría llegar en semifinales. Siempre se intenta apuntar a la sorpresa. Hay que ser humildes, porque todos juegan bien. Lo que quiero es que tenga una estabilidad emocional. No quiere ver volar raquetas, ese es el siguiente paso que necesitamos. Va a ser un año difícil, porque van a esperar mucho de él.

No pudieron sacar a Federer, Nadal y Djokovic…
Estos tres han sido demasiado. Hay un grupo de veteranos como Wawrinka o Murray que juegan muy bien, son muy completos. Son tan competitivos entre ellos que por eso siguen jugando a ese nivel. A veces pienso si la cabeza a Federer no le dice para con cuatro hijos en casa. Son tan competitivos que no pueden dejar de jugar. ¿Qué viene? Esperar hasta cuánto duran y cuándo se van, pero ellos también están ahí porque los jóvenes no los han apretado. Van a aguantar lo que el cuerpo les aguante a ellos. No creo que haya mucha gente por detrás que los vaya a tirar afuera del circuito. Hay jugadores buenos, pero están por salir. La verdad ojalá nunca se vayan Nadal, Federer o Djokovic, pero cuando se vayan, el tenis seguirá.

No creo que haya mucha gente por detrás que los vaya a tirar afuera del circuito. Hay jugadores buenos, pero están por salir.

¿Qué tipo de juego estamos viendo con los nuevos jugadores que van saliendo?
Thiem es un clásico jugador de tierra, pero se ha reconvertido y ganó su primer grand slam en pista dura. Ahora, cada vez los chicos son más altos, sacan más fuertes. No es como en nuestra época. Hoy en día me fascina que un jugador como Diego Schwartzman esté en la posición en la que está. Es una muestra de que siendo inteligente y siendo otro tipo de jugador puedes estar arriba. Es claro que se tiene desventaja, porque hay jugadores que le pegan fuerte porque tienen esa fuerza para hacerlo. Schwartzman le quiere pegar igual de fuerte que Zverev, pero no puede porque mide 1,70. Los materiales cambiaron, pero es algo de lo que hay en el tenis. Sale más gente que le pega más fuerte, pero hace 15 años Nadal ganó Roland Garros y lo sigue ganando. Yo odio ese tipo de jugadores que le pega muy duro a la pelota y hay gente que juega mejor, pero eso es lo que hay.


Sale más gente que le pega más fuerte, pero hace 15 años Nadal ganó Roland Garros y lo sigue ganando.

¿Qué le quiere dejar al tenis?
Lo único que yo puedo hacer es aportarle a mi jugador. No importa si está 20 del mundo o 300. Quiero es pensar en mi jugador. Cada año se entrena a jugadores diferentes, cabezas diferentes y se va haciendo un archivo más completo. No soy nadie para creer que el tenis tiene que aprender de mí. Me interesa es que mis jugadores sean mejores mañana que hoy.

¿Hoy su academia está bien?
Llevamos ocho años. Está fundada por tres personas. Una de ellos es el hijo del extenista colombiano Jairo Velasco. Somos una academia pequeña, con un máximo de 35 jugadores, porque queremos dos jugadores por cancha para que sea bien exclusivo. Pedimos un mínimo de nivel. Muy ilusionado. Viajo 20 semanas con Andrey y el resto del tiempo estoy en la academia.

martes, 9 de febrero de 2021

Mundo de la ciencia se emociona con nacimiento de dos pandas gigantes

Los gemelos estarán vigilados 24 horas al día.

Provisionalmente fueron bautizados como "baby boy" y "baby girl" y pesaron 160 y 150 gramos, respectivamente.

El parque zoológico belga de Pairi Daiza anunció el nacimiento de dos pandas gigantes, tres años después de dar la bienvenida a un primer cachorro macho, Tiao Bao.

"Los equipos de Pairi Daiza y del Centro para la Conservación e Investigación del Panda Gigante de China tienen la inmensa alegría de anunciar el nacimiento de dos bebés pandas gigantes en Pairi Daiza", informaron en un comunicado.

Los dos pequeños pandas, un macho y una hembra, nacieron el jueves con dos horas de intervalo. Provisionalmente fueron bautizados como "baby boy" y "baby girl" y pesaron 160 y 150 gramos, respectivamente.

La madre había sido inseminada artificialmente en abril de 2019. Con este doble nacimiento, Pairi Daiza ya cuenta con cinco ejemplares de panda gigante. 

Los responsables del parque belga expresaron su satisfacción por la fecha del nacimiento, el 8 de agosto (8/8), un número que simboliza la buena suerte en la cultura china.

El parque zoológico belga de Pairi Daiza anunció el nacimiento de dos pandas gigantes.

Aun así, "cuando se produce un nacimiento de gemelos de panda gigante (...) es frecuente que uno de los dos bebés muera", advirtieron.

Los pequeños estarán vigilados 24 horas al día, siete días a la semana para cuidar que la madre los amamante correctamente, si bien el zoo ha decidido colocarlos alternativamente en la incubadora y allí alimentarlos con biberón.

El público podrá visitarlos en aproximadamente un mes, para evitar que las crías o la madre se estresen. 

Prestados por China por un periodo de 15 años, la hembra Hao Hao y su compañero Xing Hui fueron recibidos con gran pompa en Bélgica en febrero de 2014, y rápidamente se convirtieron en una de las principales atracciones del parque Pairi Daiza.

El 2 de junio de 2016 Hao Hao dio a luz a un macho llamado Tian Bao, "Tesoro del cielo".

La madre había sido inseminada artificialmente en abril de 2019.

Los nacimientos de pandas gigantes son tanta raros que "es una nueva esperanza para la conservación de esta especie clasificada como vulnerable", subraya Pairi Daiza.

"A día de hoy, 11 pandas gigantes nacidos en cautividad ya fueron reintroducidos en su hábitat natural. Nueve de ellos siguen vivos en la actualidad", explicaba el comunicado.

La Fundación Pairi Daiza señaló que está financiando la investigación de una especialista belga, Jella Wauters, para desarrollar un test que "permita a científicos de todo el mundo diferenciar los embarazos falsos de los verdaderos".

Además, "predecir el periodo de celo de la hembra semanas antes de su inicio sobre la base de marcadores hormonales presentes en la orina del animal", explicó. 

El periodo de fertilidad de una panda hembra solo ocurre una vez al año y dura de uno a tres días. Del proceso de embarazo, la duración precisa, los abortos espontáneos, o las razones de absorción del feto por parte del sistema reproductivo de las pandas gigantes aún son elementos desconocidos, según los responsables de la fundación.

China va a crear una reserva natural de más de 20.000 km2 en las provincias de Gansu, Shaanxi y Sichuan, para interconectar varios territorios donde viven pandas gigantes con el fin de favorecer la diversificación genética en periodo de reproducción.

lunes, 8 de febrero de 2021

74 animales de fauna silvestre fueron liberados por Corpocaldas


Corpocaldas, con el apoyo de Corpocesar, liberó cuatro guacamayas (Ara ararauna) en un resguardo indígena arhuaco ubicado en las estribaciones de la Sierra Nevada de Santa Marta, municipio de Pueblo Bello, departamento de Cesar, y otros 70 ejemplares en una reserva privada de la empresa minera Drummond, ubicada en la vía San Roche - Bosconia.

Según Oscar Ospina Herrera, profesional especializado del grupo de Biodiversidad y Ecosistemas de Corpocaldas, los animales provenían de esta región. Agregó que los lugares elegidos para regresarlos a la libertad cuentan con excelentes condiciones de oferta alimenticia y además corresponden a zonas protegidas.

Con el regreso de estos animales a su medio natural se garantiza el cumplimiento de su función biológica en el bosque.

Recuerde no adquirir ni vender animales silvestres y a denunciar la tenencia o comercialización ilegal de fauna, esta es una actividad ilícita y conlleva sanciones de tipo penal y administrativo.


Animales liberados

4 guacamayas (Ara ararauna)

29 loras cabeciamarillas (Amazona ochrocephala)

26 loras frenteazul (Amazona amazónica)

2 guacamallejas (Ara severa)

7 tortugas hicoteas (Trachemys callirostris)

6 tortugas morrocoy (Chelonoidis carbonaria)