Entre los perros y los gatos hay diferencias.
Si has convivido con uno, habrás disfrutado de él. Pero si has estado con ambos, habrás hecho comparaciones.
Y nadie es mejor o peor. Simplemente son. Perros. Gatos.
Y luego nosotros.
Hoy no te voy a hablar de perros o personas.
Te voy a hablar de gatos.
Bueno y de gatos y personas.
En relación sí.
Si has convivido con un gato, sabrás que son animales muy independientes y territoriales.
Vaya, que no comparten su sitio con cualquiera.
Es como el chico o la chica popular de clase.
Ellos eligen.
Si un gato se acerca a ti y comienza a mostrarte cariño, es porque ha decidido que confía en ti y te considera parte de su territorio.
Y porque, además, ha leído que te cae bien, que si no, no te prestaría atención.
En conclusión, los gatos eligen a sus tutores porque confían en ellos, les gustan sus personalidades y se sienten seguros y cómodos a su alrededor.
Así que, si tienes la suerte de ser elegid@ por un gato, considera que es un gran honor y que ese gato confía en ti y te quiere mucho.